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va para los 80

  • 1 Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados

    law. ACNUR

    Diccionario universal ruso-español > Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados

  • 2 Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos

    abbr. OACDH

    Diccionario universal ruso-español > Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos

  • 3 para

    Del verbo parar: ( conjugate parar) \ \
    para es: \ \
    3ª persona singular (él/ella/usted) presente indicativo
    2ª persona singular (tú) imperativo
    Del verbo parir: ( conjugate parir) \ \
    para es: \ \
    1ª persona singular (yo) presente subjuntivo
    3ª persona singular (él/ella/usted) presente subjuntivo
    3ª persona singular (él/ella/usted) imperativo
    Multiple Entries: para     parar     parir
    para preposición 1 (destino, finalidad, intención) for; ¿para qué sirve esto? what's this (used) for?; champú para bebés baby shampoo; para eso no voy I might as well not go; para + inf: ahorra para comprarse un coche he's saving up to buy a car; tomé un taxi para no llegar tarde I took a taxi so I wouldn't be late; está listo para pintar it's ready to be painted o for painting; para aprobar (in order) to pass; entró en puntillas para no despertarla he went in on tiptoe so as not to wake her; lo dice para que yo me preocupe he (only) says it to worry me; cierra para que no nos oigan close the door so (that) they don't hear us 2 no es para tanto it's not that bad; soy lo bastante viejo (como) para recordarlo I'm old enough to remember it
    b) (en comparaciones, contrastes):
    son altos para su edad they're tall for their age; para lo que come, no está gordo considering how much he eats, he's not fat; ¿quién es él para hablarte así? who does he think he is, speaking to you like that ?; es mucho para que lo haga sola it's too much for you to do it on your own 1 ( dirección): empuja para arriba push up o upward(s); ¿vas para el centro? are you going to o toward(s) the center? 2 ( tiempo)
    a) (señalando una fecha, un plazo):
    estará listo para el día 15 it'll be ready by o for the 15th;
    deberes para el lunes homework for Monday; faltan cinco minutos para que termine there are five minutes to go before the end; me lo prometió para después de Pascua he promised me it for after Easter; ¿cuánto te falta para terminar? how much have you got left to do?; para entonces estaré en Madrid I'll be in Madrid (by) then; tengo hora para mañana I have an appointment (for) tomorrow
    b) (AmL exc RPl) ( al decir la hora) to;
    c) ( duración):
    tengo para rato (fam) I'm going to be a while (yet)
    parar ( conjugate parar) verbo intransitivo 1 ( detenerse) to stop; ir/venir a para to end up; fue a para a la cárcel he ended up in prison; ¿a dónde habrá ido a para aquella foto? what can have happened to that photo?; ¡a dónde iremos a para! I don't know what the world's coming to 2 ( cesar) to stop; ha estado lloviendo sin para it hasn't stopped raining; no para quieto ni un momento he can't keep still for a minute; no para en casa she's never at home; para DE + INF to stop -ing; paró de llover it stopped raining 3 (AmL) [obreros/empleados] to go on strike verbo transitivo 1
    a)cocheáfico/persona to stop;
    motor/máquina to stop, switch off
    b) hemorragia to stanch (AmE), to staunch (BrE)
    c)balón/tiro to save, stop;
    golpe to block, ward off 2 (AmL)
    b) ( poner vertical) ‹vaso/libroto stand … up;
    pararse verbo pronominal 1 ( detenerse)
    b) [reloj/máquina] to stop;
    [coche/motor] to stall; 2 se paró en una silla she stood on a chair; ¿te puedes para de cabeza/de manos? can you do headstands/handstands?
    b) (AmL) [ pelo] ( hacia arriba) to stick up;
    ( en los lados) to stick out
    parir ( conjugate parir) verbo intransitivo [ mujer] to give birth; [ vaca] to calve; [yegua/burra] to foal; [ oveja] to lamb verbo transitivo
    b) [ mamíferos] to have, bear (frml)

    para preposición
    1 (utilidad, aptitud) for: ¿para qué tanto esfuerzo?, what's all this effort for?
    una pomada para las quemaduras, an ointment for burns
    una tijera para zurdos, a pair of scissors for left-handed people
    2 (finalidad, motivo) to, in order to: lo dijo para molestarme, she said it to annoy me
    lo hace para que te fijes en él, he does it so that you notice him
    3 (destinatario) for: es para mamá, it's for mum
    hablaba para los votantes indecisos, he spoke to the undecided voters
    es muy atento para con ella, he's very obliging towards her
    4 (opinión) para Paco todas las mujeres son guapas, in Paco's opinion, all women are pretty
    5 (comparación, concesión) for: para ser tan joven tiene ideas muy sensatas, he has very sensible ideas for his age
    6 (rechazo) para una vez que hablo, me haces callar, the one time I speak, you shut me up
    7 (tiempo) by: estará listo para las cinco, it'll be ready by five
    para entonces, by then
    8 (a punto de) está para salir, it's about to leave
    9 (dirección) el tren para Burgos acaba de salir, the train for Burgos has just left
    iba para tu casa, I was going to your house Recuerda que cuando para expresa finalidad, se traduce por to o in order to (este último sólo se usa para evitar confusión): Me voy para ayudarte. I'm going in order to help you. Si usáramos sólo to significaría: Voy a ayudarte. Sin embargo, cuando después de para viene un sustantivo o un pronombre y no un verbo (esta llave es para aquella puerta), se traduce por for ( this key is for that door).
    parar
    I verbo intransitivo
    1 to stop: para de saltar, stop jumping
    para un momento en la farmacia, stop a minute at the chemist's
    no pares de hablar, por favor, keep talking, please
    2 (alojarse) to stay
    3 (finalizar, terminar) el cuadro fue a parar al rastro, the painting ended up in the flea market
    II verbo transitivo
    1 to stop
    2 Dep to save
    3 LAm to stand up Locuciones: dónde va a parar, by far: mi hija es muchísmo más inteligente que la suya, dónde va a parar, my daughter is far more intelligent than theirs
    parir verbo transitivo & verbo intransitivo to give birth (to) Locuciones: poner a alguien a parir, to run sb down ' para' also found in these entries: Spanish: A - abalorio - ablandar - abreviar - absoluta - absoluto - acá - aceitera - achuchar - actuación - adentro - agitador - agitadora - alcanzar - alfiler - alguna - alguno - aliento - alquiler - alta - amenaza - añadidura - ancha - ancho - ánimo - año - antesala - antirrobo - aplanar - aprovechar - apta - aptitud - apto - aquí - arca - arena - arrastre - arriba - arropar - atonía - atrás - atril - aunar - auspicio - baja - bajo - balde - bálsamo - bañarse - banco English: AA - ability - about - accessory - accommodate - achieve - activity - adapter - adaptor - adequate - adequately - admire - adult - advantage - advantageous - advertise - aftershave (lotion) - agitate - agree - all - all-out - allocate - analyst - antiallergenic - antibiotic - antidote - antihistamine - antipollution - appease - application - appointment - appropriate - aptitude - argue - arm-twisting - arms control - around-the clock - arrangement - arson - as - ASPCA - assailant - assert - assess - assume - astir - astonishment - attain - attention span - attractive
    tr['pærəgrɑːf]
    1 ( paragraph) párrafo
    ABBR
    = paragraph párr.

    English-spanish dictionary > para

  • 4 los

    loːs
    n
    1) ( Lotterielos) billete de lotería m
    2) ( Schicksal) suerte f, destino m
    Los [lo:s]
    <-es, -e>
    2 dig (Lotterielos) billete Maskulin de lotería, boleto Maskulin; das große Los ziehen (also bildlich) tocar(le) a alguien el gordo
    3 dig(gehobener Sprachgebrauch: Schicksal) destino Maskulin; ein hartes/schweres Los un destino difícil/oneroso
    Adjektiv
    1. [lose] suelto ( femenino suelta)
    etw/jn los sein (umgangssprachlich) haberse quitado de encima algo/a alguien, librarse de algo/alguien
    es ist viel/wenig los hay mucha/poca marcha
    ————————
    Adverb
    1. [Ausdruck der Ungeduld] ¡deprisa!, ¡venga!
    2. [Kommando]
    los! ¡vamos!

    Deutsch-Spanisch Wörterbuch > los

  • 5 los unos para con los otros

    els uns respecte als altres

    Vocabulario Castellano-Catalán > los unos para con los otros

  • 6 contracción en + los

     pron. pers. indirecto de la primera persona del plural: nos, a nosotros, en nosotros, para nosotros.

    Diccionario Portugués-Español > contracción en + los

  • 7 ol-los-anan

    Asilo, escondrijo, lugar apropósito para tener escondida ó guardada una cosa.

    Diccionario Bagobo (Giangan) - Español > ol-los-anan

  • 8 tarde veniéntibus, ossa

       para los que llegan tarde, lo huesos; el que llega tarde ni oye misa ni come carne; para el último no hay cuchara; los huesos para los ausentes

    Locuciones latinas > tarde veniéntibus, ossa

  • 9 alle Montagabende sind ausgebucht

    para los lunes por la noche no quedan entradas

    Deutsch-Spanisch Wörterbuch > alle Montagabende sind ausgebucht

  • 10 На черный день.

    Para los días malos.

    Русские пословицы и поговорки и их испанские аналоги > На черный день.

  • 11 axabarciar

    Axabarciar, es tratar, vender, comprar, cambiar, etc. Cuntu you aquindi nisti primeiru llibru qu'un astur fae con ñaturallidá, con honradé, con amore grandie ya ñoble que disdi guaxetín na miou xenciétcha ya ñatural alma se fexu hacia tous lus melgueirus y'embruxantes chugares de la miou mantina tierra d'Asturies, ya de toes les Fidalgues xentes que la poblen, falu you que nagora mesmu tenu ñecexidá de cuntayes un cuintu que nun ye tal couxa, perque cuaxi tóu lu que falu aquindi fóu verdá. Ya cumu encalda mu ben nista pallabra, pos nagua mexor que como exemplu qu'isti casu que per oitre lláu pué xervir tamén d'escola. (Cuento yo aquí en este diccionario primero que hace un astur con documentación, naturalidad y suprema honradez, lleno de un amor grande y noble que desde niño en mi sencilla y natural alma se hizo, hacia todos los dulces y embrujantes lugares de mi amada Tierrina Asturiana, y hacia todas las Hidalgas gentes que la pueblan. Digo que ahora mismo tengo necesidad de contarles un cuento, que no es tal cosa, porque casi todo lo que les voy a contar ha sido una auténtica verdad, y como tal alumbramiento tiene el origen en esta palabra, pues nada mejor que este ejemplo, que por otro lado puede servir también de escuela). (LES XABARCEIRES) L'Aldexuxán (aldea de Susana) yera la miou aldina, fae ya un faticáu d'anus cundu you yera un guaxín, despós de l’achuquinante 'ngarradiétcha, que xemóu de cadarmus toes les teixáes de la miou embruxante Asturies, apaxiétchandu de llutus, mexeries, fames, atristeyáus ya enfernales dollores a toes les xentes, lu mesmu las prietes que yeren las drechistes, que lus roxus que yeren de las esquerdas. (La aldea de Susana era mi aldea, hace ya muchos años cuando yo era un niño después de la asesinante guerra que sembró de cadáveres todas las casas de mi embrujante Asturias, vistiendo de lutos, miserias, hambre e infernales dolores a todas sus nobles gentes, lo mismo a los negros que eran los derechistas, que a los rojos que eran los de las izquierdas). —Por aquel entonces, cuando el hambre, la necesidad y la miseria se enseñoreaban de les teixáes (lares) mejor dicho de los hijos y de las viudas de los perdedores, ya que los pobres, los que no estaban encuandicáus (sepultados) s'atopaben arretrigáus nes cárxeles, (encadenados en las cárceles) ya oitres con más xuerte, xebráranse per miéu 'l hermenu venceor pal extranxeiru. (Y otros con más suerte, se marcharan por miedo al hermano vencedor para el extranjero). —Cuento yo, que por aquellos tristes aconteceres sucedió en mi aldea esta historia que ahora al recordarla tras más de cuarenta años de haber sucedido, trae a mi pensamiento una añoranza triste, nel mesmu lleldar que me fae xonreyire. En el mismo suceder que me hace sonreir, ya que el caso según mi humilde parecer se las trae, porque todos los personajes qu'encaldan (hacen) esta cierta, historia, eran seres que para poder vivir tenían que luchar bravamente todos los amanecidos días, no importa cómo lo hicieran; pero por aquellos tristes tiempos el que no luchaba no comía, no es como hoy, que se tira más comida en un día a la basura, que en los tiempos de esta historia comía toda Asturias en una semana. —Yera mi aldina tan bétcha en allumbrar frutos, que desde los principios del branu (verano), fasta lu fondeiru de la xeronda (hasta lo último del otoño), talmente parecía mi melgueiru chugar (dulce pueblo), el mismo jardín que el Creador debe de tener reservada para las sencillas y buenas gentes que tras la muerte sean huéspedes de su Santificante Reino. Tal exquisita riqueza natural daba lugar, a que casi todos los vecinos tuviesen un pollino que espatuxara llixeiru (andase rápido), y fuese resistente para que no se esmurgazara esventronáu (cayera reventado) en los difíciles y abruptos caminos, con las maniegas (cestas) encima de su albarda amamplenáes (llenas) de sabrosos frutos, antes de llegar a la romería o fiesta donde iba destinado tal manjar, así fueran higos, cerezas, ciruelas, peras, etc., etc., etc. Algunas veces también solían llevar manzanines arroxáes nel fornu (manzanas asadas en el horno) y ablanines turráes nel mesmu cheldar (y avellanas asadas en el mismo lugar), y estas frutas así tratadas, tenían un gusto tan exquisito que uno no se hartaba nunca de comer por ellas. Por estos quehaceres y otros múltiples necesarios en sus caseríos, cada vecino cuidaba a su pollino todo el año, como la mejor de sus prendas, porque era el humilde pollino el único medio de locomoción que tenían para efectuar infinidad de trabajos y muy necesarios traslados. Decía el pedáneo de mi aldea, donde sucedió esta historia que estoy empezando a relatarles, que un pollinín d'arremangu (de valía), le proporcionaba más ganancias al aldeano que una xuntura de les mexores vaques (pareja de sus mejores vacas). Pero endenantes d'afondigoname nel contare lus fechus que fixerun les xabarceires del miou chugar (antes de ahondar en los hechos que dieron lugar las tratantas de mi pueblo), voy a contar así d'esboriaúra (de resbalón), lo que le ha sucedido al razonero alcalde de mi aldeina: Hubiérase casado Graciano cuando era muy joven aun, con Ramona la de Juan de Pacha, que era una mozacona (mozona) de ñidies (finas) mexierches (mejillas), arregañaónes ñalgues (apetecibles nalgas) y un entamu (senos) también empericotáu (prominente, estupendo), que hacían de Ramona una muchacha también formada y deseable, que ni el más exigente sería capaz de deximiya per mu fartu qu'andubiés de clica (nadie la despreciaría por muy harto que estuviese de mujeres). Pero Graciano que por aquel entonces era pobre, aunque dueño de un ameruxamientu d'arganáes, que lu ateixaben nel xeitu del querer escombútchire, (unas crecidas ansias que le resguardaba en el lugar de querer, medrar, enriquecerse, etc.). Mas él pensaba y con buen tino, que jamás sus aspiraciones podría alcanzarlas en la aldea, por tal razón decidió emigrar, y como le acompañaba la suerte de tener un hermano en las Américas, pues un día endubitchóu lus sous fatinus (lió sus ropas), despidióse con lágrimas en sus ojos de su mujer e hijo que por entonces aun no había cumplido un año, y colóu (marchó) para La Habana, donde trabajó como un esclavo durante diez años, sin desperdiciar ni menos gastar ni una perrina (cinco céntimos). Con una buena cuarexá de cuartus (cartera de dinero). Ilegó pasado este tiempo a su aldea, cargado como un abetchún (abejón), de paxiétchus, llásticus, xoyiquines, ya fatáus d'oitres couxiquines, (de trajes, ropas, joyas, y muchas otras preciadas cosas. Hizo su entrada en la aldea en los postreirus (últimos días del mes de Xeneiru), precisamente cuando el día atapecía (oscurecía), por eso, como su teixá (casa) era la primera de la aldea, y hacía un frío y una ventisca que a todo el mundo refugiaba tras de sus lares, con ningún vecino se encontró, que le dijese o le pusiese de aviso contra alguna cosa. Salió su mujer a recibirle a la correlada llena de gozo y de contentura, engavitóuse (enganchose) la Ramona a su cuello loca de alegría, bexucóuyu per tous lus lláus esgalazá (besole por todos los lados con ansias), en el lleldar (hacer) que desfayénduse (deshaciéndose) en chárimes (lágrimas) y xoponcius (mareos, sustos, etc), que le hacían temblar como una vara verde, y después d’allancar (plantar) las rodiétches (rodillas) encima de las llábanas (losas), dijo bajando la cabeza y xofitándula (apoyándola) entre los atavarius (bragueta), de su hombre, en el encaldar (hacer) que s’arretrigaba a sous cadriles (se abrazaba a sus piernas). ¡Achuquíname, achuquíname miou Gracianu, endenantes de que te cunte, lu paraximesquéiramente que me portéi, metantu que tou faíes la Bana nel extranxeiru! (Asesíname, asesíname mi Graciano, antes de que te cuente, que te he hecho de menos con otros hombres, mientras que tu, te hacías rico en el extranjero). ¡Bueno Ramona..., ya tendrás tiempo de decirme todo cuanto de bueno o malo hayas hecho... pero ahora dime ¿dónde está el pequeño? ¡Apuesto a que ya está hecho un mozaquín (adolescente), listo y trabajador como lo que es su padre, que fexu más pesos na Bana (que hizo más duros en La Habana), que de pelos tenedis entrambus ya dos en vuexes motcheres! ¡Bueno los niños, quiero decir Tanín, güéi dexelu nel teixu miou má, pos comu tenu fatáus de couxes qu'escutire coutigu, ya non sei per la primeira que comencipiare, pos ista nuétchi quixe quedáme sola pa faluchar al nuexu encaldare! (Hoy le he dejado en la casa de mi madre, pues como tengo muchas cosas que discutir contigo, y no se por cuál he de comenzar, por éso esta noche he querido quedarme sola para hablar sin que nadie nos enrede). Lo primero que hizo la Ramona fue prepararle la cena a su marido, y al parejo que en esta faena se entretenía, iba preguntándole sucesos que a él le habían acontecido, quedándose siempre muy admirada de cuanto le decía su esposo. Pero después que el Graciano se fartucóu dé xamón, ya güevus con choricinus, arrutióu encomoláu perque l'entelaura inflabai 'l banduyu, plantói fuéu a un pitu, llancói 'n fondigoná 'n par de fumáes, ya sonriyénduse mu felliz dixói a la sou mutcher: (Se hartó de jamón, huevos y chorizos, eructó incomodado por haber abusado de tanta comida que con pesadez le hinchaba la barriga, le pegó fuego a un buen cigarro, le sacudió un par de fumadas, y después sonriéndose muy feliz le dijo a su mujer): ¡Desde que me he marchado a las Américas hasta ahora, no he comido una comida que mejor me supiera que ésta que me has preparado en tan poco tiempo y con tanta arte. Por el mundo adelante mi querida Ramona, no se harta uno nada más que de mollicies (cosas malas). Mucho cacíu pintureiru (cacharros lujosos), mucha cuchara limpia y resplandeciente, mucho sirviente que te trata con tanto mimo como si fueses un banquero, pero los platos son pequeños, y la comida que en ellos vacian (echan), tiene escosáu güétchus de rustíu (que no tiene grasa, que no está sazonada). Más sustancia tiene aquí un potaráu de llabaza de la que chamus a lus bracus (una pota de fregaduras de la que servimos a los cerdos), que todo lo que come en el día un trabajador en las Américas, y si uno trae dineros de aquellas lejanas tierras, es a cuenta de la mucha hambre, calamidades y sufrimientos que uno tiene que aguantar allí. Aquí en las aldeas pensamos cuantos nos vamos para allá, que en cuanto lleguemos, atopamus lus cuartus tremáus pe les caleyes! (encontramos los dineros tirados por las calles). ¡Bueno Ramonina, ahora ya me puedes contar lo que has hecho por aquí, que me parece que abundu enfucheráu (muy sucio) y grave debe de ser, cuando endenantes de entrare na miou teixá, de rodiétches me suplicabes que t'achuquinara! (antes de entrar en mi casa, de rodillas me suplicabas, que te asesinara). ¡Non sei Gracianín perquéi llugar comencipiar, pos tou enllordióxe d’enria mín, comu se ‘l mesmu diañu me l'encalducar! (No sé Gracianín por qué lugar voy a dar comienzo, pues todo se enlodó encima de mí, como si el mismo demonio me lo preparara). Deciale Ramona sentada en el escaño, detrás del aburióxu (ardiente) lar, mirando de frente para su marido y alumbrando a la par un torrente de lágrimas, que resbalaban por sus hermosas y coloreantes mejillas, que resplandecían a la luz del fuego, lo mismo que si estuviesen entafarnáes (untadas) con manteiga (untadas con manteca). Graciano que la propiaba con el mismo arrobo de enamoramiento que por ella siempre había tenido. Le dijo con voz halagosa que ya consigo llevaba el perdón que con tanta argucia su esposa buscaba: ¡Anda Ramonina, déjate de choramicar (llorar), pues con tanta mexareta (meadura) de lágrimas, no vas a encantexar l'esgazaura que fixiste! (arreglar la rotura que has hecho). —Y ahora cuéntame de una vez cuál fue el mal que me has hecho, pues por lo que barrunto, me has hecho castrón fatáus (muchas) veces. ¡No Gracianín, no te he hecho de menos nada más que un par de veces, y te voy a contar sin deximite (ocultarte) nada, el por qué hice de paraxa (puta), pues no me he puesto patas arriba en la añuedaura del cibietchu (haciendo el amor) con nadie, porque mi cuerpo me lo pidiese, sino que ha sido la necesidad la que me ha obligado, pues bien sabes, que cuando tu te has marchado para La Habana, yo me quedé muy sola, con un niño entre mis brazos que nin falaba nin espatuxaba (que ni hablaba, ni andaba) !Ay! Gracianín de mis entretelas, del mi corazón y de los mis sentidos, puedo decirte ahora llena de alegría que te estoy viendo al lado mío, que con las lágrimas que alumbraron mis ojos en todos estos años de soledad que he vivido, navegaría sin hundirse el barco que te trajo de La Habana. ¿Y quién fue el culpable de mi desesperante llanto, de mi inconsolable sufriencia? ¡Sólo tu Gracianín, sólo tu eres el culpable, que me has dejado muy sola, y te marchaste para las Américas hace diez años, siendo yo en aquel tiempo una desventurada criatura que aun no tenía veinte años dígote yo que me has dejado encuandiada (empozada) dentro de la soledad y la pobreza, y en todo este largo tiempo, no me has mandado ni tan sólo una perrona (diez céntimos) con la que comprarle un llastiquín (una camisa, un jersey, etc., etc.) a nuestro hijo, y ahora me vienes tu diciendo que quieres al niño tanto y cuánto! ¡Bueno Ramonina, lo que yo hice o dejé de hacer, abundu bien fechu tá (muy bien hecho está). Hoy ya me encuentro en mi casa dueño de una betchá cuarexa (bien repleta, rica cartera) de dineros, y no quiero perder el tiempo explicándote lo que yo he sufrido y el trabajo que me ha costado atróupar (rejuntar) este capital, pero tu ahora sí que me vas a decir con quién o con quiénes me has traicionado durante el tiempo que he estado fuera de mi casa. Así pues, empieza luego y no pierdas el tiempo barajando pormenores noitres (en otros) caldaretus (ubres) que no sean los que estrincaste (ordeñaste) entre los atavarius (braguetas) de los hombres con los que has hecho el amor, mientras que yo en las Américas fechu 'n castrón, apelucaba cuartus pá betchar la cuarexa que traigu, (hecho un cabrón, recogía dineros para llenar la cartera que traigo). Ramona se levantó del escaño, echó al fuego cuatro astillas porque ya se estaba amorrentandu (apagándose) y después, arremetchandu lus güeyus, miróu 'l Gracianu con mala lleiche, ya díxole sen catar más atayus (abriendo desmesuradamente sus ojos, miró a Graciano y le dijo con enfado sin buscar más atajos). ¡A los dos años de colar (marcharte) tu por el mundo allantri, (adelante) se me puso el niño muy amolaín (enfermo), y no tuve más remedio que llevarle al mélicu (médico), y éste con palabras finas y muy melgueróuxas (dulces) me dijo que yo era una buena moza, que estaba muy guapa y que era muy hermosa, y muchas otras cosas mas que entre todas ellas me hicieron perder la cabeza, el caso fue que el médico me aseguró que el niño estaba realmente muy enfermo, y que sólo se comprometía a sanarle si yo... bueno... el caso fue que yo por curar al mióu fiyín (mi hijo) espurrime y encoyime baxu lus atavarius del mélicu y'añuédei 'l cibietchu cuá 'l un par de veices, (me estiré y me encogí debajo de la bragueta del médico e hice el amor con él un par de veces). Y de resultas de los dos achucáus (acostados) que fexe debaxu 'l allegre mélicu (que hice debajo del alegre médico), me quedé empanzorraona (preñada) y parí otro rapacín (niño) que ahora ya tiene siete años. Así que yo considero que si tú estuvieses en mi lugar, harías lo mismo que yo he hecho, pues por un hijo una madre da todo cuanto tenga y más para con ello! Graciano que era de naturaleza muy tranquilo y a pesar de ser un cornudo era listo y razonero, le dijo sin enfadarse ni levantar más una palabra que otra: ¡Por un hijo una mujer casada debe de entregarlo todo verdad es, todo menos su honra, porque la honra en la mujer casada tiene más valor, que todos los hijos que pueda tener y hasta inclusive más que su propia vida. Porque de ahora en adelante, lus tous nenus namái que serán pá les xentes que fius de paraxona. (Los tus niños nada más que serán para las gentes que hijos de puta). Y tu... una paraxete (putina) mirada en todo momento por los hombres, como pan caliente fácil d'allancái 'l denti (hincarle el diente). Y yo... un cabrón consentido, que ha de ser la guasa y la murga de todos mis vecinos y de cualquier gente que sepa de mi vergüenza! En buena razón acaidonaban (dirigíanse) las palabras del Graciano, pues pronto sus vecinos armados con la socarronera malicia de las gentes de la aldea, empezaron a torearlo, diciéndole entre amistosas risas y halagüeñas palabras, ofensivos insultos, que ponían al pobre Graciano lo mismo que un pingayu (trapo viejo), y como Graciano era simpático y buena persona, aun les daba lugar más xeitu (sitio), para que se apropiaran de mayores confianzas, y ya no sólo eran sus vecinos los que de continuo le provocaban, sino todas las gentes que le conocían, pues un día que estaba segando hierba en un prado que tenía al lado de la carretera, pasó por allí una pareja de los guardias civiles de servicio que eran amigos suyos, y después de torearle un tiempo como todo el mundo hacía, uno de los guardias le preguntó: ¿Qué carrera les vas a dar a tus hijos Graciano? ¡Pues como tienes dineros amamplén (muchos), no estaría mal que los estudiases para xebralus (apartarlos) de estar mayucandu (majando) terrones toda la vida lo mismo que tu haces! Graciano quedose mirando para el guardia sonriéndose como si nada ofensivo le hubiera dicho, y después apurriénduyes (dándoles) la petaca para que enrrodietcharan (liaran) un cigarrillo, cuando los tres estaban aborronandu (fumando) muy tranquilos les dijo: ¡Mucha razón tienes Juaquín, ya que majar terrones no es un oficio descansado ni productivo para nadie, por eso, a mi primer hijo, que es el mío verdadero, le voy a estudiar hasta que se convierta en un buen ingeniero, aunque tenga que vender sino me alcanza cuanto tengo, hasta mi honrado apellido, que por ser tal cosa, en todo el mundo ha tenido siempre buen crédito, y al otro por ser hijo de mi mujer que xebrose (se fue) de la honradez, y se situó entre la hedionda troya (suciedad) donde se enchamuergan (ensucian) las paraxas (putas). En pocas palabras, por ser hijo de puta, le voy a enchufar en el xuzgáu (juzgado), y si no sirve para este menester, entonces le afilio a la guardia civil! Al guardia Juaquín, xelósele (,helósele) d'afechu (del todo) la maliciosa sonrisa que mostraba entre sus labios, y poniéndose muy serio le dijo: ¡Ten cuidado con lo que dices Graciano, porque me parece a mí que no das puntada sin hilo, así que se acabaron las bromas, y de ahora en adelante con nosotros ándate derecho, sino quieres que te enchufemos en la cárcel por tener la lengua demasiado larga y ser tus palabras mal intencionadas! Descubrió Graciano aquel día, que el don de la palabra era un arma muy poderosa, con la que conseguiría manejándola con astucia y solapadamente insultativa, lograr que sus agudosos vecinos se mirasen muy bien antes de lanzarles puchas (sátiras), haciendo de su persona el hazmerreir de todo el concejo. El habíale dicho al guardia Joaquín sin la menor intención de ofensa hacia su persona ni a nadie, que el hijo de su mujer por ser nacido de mala madre, le colocaría en la Guardia Civil, cosa que incomodó grandemente a Joaquín, demostrando con sus inocentes palabras que no es oro todo cuanto reluce, y que todo el mundo tiene algo de suciedad escondida o a la vista, de la que suele avergonzarse. Desde ahora en adelante, escrutaría en la vida y pasado de sus vecinos, y cuando de él se mofasen, les taparía la boca lanzándoles al rostro como arma de defensa y ataque todo cuanto de despreciable y asqueroso, en sus vidas o familias hubiere; y de esta forma, ya se mirarían ellos de volver con sus ya cansadas e insultantes sátiras a molestarle. Y ahora, tras el xemeyu (retrato) que hice del alcalde de mi aldea, escantoyándulu namái que per un cornetchal (rompiéndole nada más que por una esquina) de las muchas que el condenado tenía, voy a hondear ya sin hacer pouxa (parada) ni xebraura (apartamiento) en la historia de las Xabarceiras (tratantas), que entrambas y dos eran de gafas (venenosas) como un perro con la boca negra. «MANOLA Y VENANCIA» Moraban en mi aldeina dos mucherucas (mujerucas), que eran hermanas en apariencia y al decir de ellas también de familia, ya que habían nacido por el mismo furacu (agujero), no eran ya jóvenes cuando yo las conocí, pues paseábanse por la vida con la edad de comenzar a maurecer (madurar), eran las más pobres del lugar (descontándome a mí por supuesto), ya que no les acompañaba más riqueza que una vieja pochina (burra), y por esta pobreza que las acompañaba, allindiaben (cuidaban) a su borrica Facunda, con tanto cariño y esmero, como si en verdad fuese hija de entrambas. Estas mujeres no eran nacidas en mi aldea, y verdaderamente tampoco a ciencia cierta nadie sabía el lugar de su nacencia, lo cierto es que habíanse asentado en mi aldea cuando se terminó la guerra, y vivían en una muy humilde casuca que compraran con algunos dineros que traían, vivían en mi lugar desde aquella época, ganándose su vida con libertad e inteligencia, si se puede denominar así, al apoderarse de lo que muchas veces no les pertenecía. Decian algunos vecinos, y yo no sé si era cierto, que durante toda la guerra habían estado de paraxas (putas) por el frente, haciendo felices a los milicianos primero y después a los vencedores, más sin embargo yo creo que esto no era verdad, porque entrambas y dos físicamente no valían ni para un tiro de escopeta. Nosotros las conocíamos por el apodo de las Xabarceiras, y eran bajas de talla, secas de carne, con rostro de brujas feas y lagañosas, dueñas de un mal genio y peores intenciones que el mismo demonio, y garruxantes nas engarradiétchas (valientes, decididas en las peleas). La de más edad se llamaba Manola, y tal parecía que sus padres la habían fabricado con el puro veneno, y aparte tenía una lengua tan ofensiva y desarrendada, que dejaba en porriques (desnudo) al más pecaminoso de los arrieros. Venancia que era la otra, no algamia (alcanzaba) a su hermana en el ser tan garruxante, pero se aparejaba al lado de ella, en tener los dedos largos y las uñas raguñonas (arañosas) para mal de las tranquilas gentes, donde se engarrapelaban (enredaban) muchas veces los intereses de los vecinos. Las rapiegas Xabarceiras, cuando los campos se cubrían de frutos y los árboles se enseñoreaban con el manto lujoso y natural de los saludables y exquisitos frutos, ellas solían comprar en caña (en el árbol) o escandanaban (recogían) sin ningún permiso, las mejores frutas, y prestas corrían a venderlas por todas las aldeas y mercados de los tres concejos vecinos, y con estas ganancias, ellas prohibían al fantasma del hambre, que no espurriera (estirase) el hocico, agolifandu (oliendo) en su lar, en ningún día del año, por prietu (negro) que éste escombuyere (viniese, naciese). En la casa de las Xabarceiras, a pesar que por aquel entonces los tiempos eran muy difíciles y el hambre se recostaba en todas las esquinas, entre otras cosas en su lar jamás faltaba el cafetacu, y el frasco de marrasquinu (anís, caña, etc.), al que las dos hermanas le hacían halagos con parejo tino, pues érales el café ey el aguardiente tan llambión (goloso), como el tabaco de cuarterón, ya que sonrientes, gozosas y felices, apuxaben (tiraban) por él, con el mismo placer que escosaban (secaban) el pintureru frasco del aguardiente. Muchas veces cuando estaban sentadas con tranquilidad en su casa antroxánduse (festejándose) con las copaxas (copas) y el cigarrillo, decíale la Manola a su hermana entre xorbu ya xorbu (trago y trago) y cigarrillo prendido con la colilla del otro, esta sentencia muy verdadera: ¡Es mucho más fructuoso unos minutos de trato si están bien hechos, que cien horas de trabajo agabuxá (agachada) en las estayas (tajos), haciendo labores para los vecinos, que son más olvidadizos después de hacerles el trabajo, que agradecidos para pagarte en justicia el sudor que en sus tierras has derramado! Pero aquel año las Xabarceiras estaban encuandiadas (empozadas) dentro de un mal estar que mazábayes enoxáes fasta el mesmu fégadu (sacudíales enojadas hasta los mismos hígados), y todo había sido por la causa de no haber sido eficaces en el llindiáu (cuidado) de su pollina Facunda, pues un día que la habían dejado sin vigilancia guareciendu (pastiando) en el pasto comunal, piescóula (cogióla) por su cuenta y riesgo el alegre pollino de Rosendo el goxeiru (cestero), que el condenado tenía unos coyonzones (testículos) que le pingaben (colgaban) hasta el suelo, y se daba muy buena maña en no dejar una pollina manía (sin preñar), por vieja que fuera, y aunque no tuviese gana de que l’añuedaren el cibietchu (que le hicieren el amor). Por esto la Manola que era la que acaidonaba (dirigía) las riendas de su teixu (casa), se abayucaba (se movía) aquel año que corría por los primeros días del mes de Junio, con todos los demonios del infierno haciéndole mil travesuras en su cerebro, y todo era por la causa de la paraxona de sou potchina (de la putona de su pollina), que de resultas del esfoitu (confío) que con ella habían tenido, que fuera bien aprovechado por el alegre pollino del goxeiru (cestero), espatuxaba (andaba) la pobre con una ventroná (barrigada), que trabajo le costaba revolverse. ¡Diañu de bruxa (demonio de bruja), con lo vietcha (vieja) que es, y todavía tuvo la puñetera calentura para que en un momento que la dejamos de la mano, de ir hacer xaceda (camera, sitio) debajo de las patas del condenado burro del maldito goxeiru (cestero). ¡Pues en algo tenemos qu’estenciar (inventar, hacer), para poder llevar la fruta este año, a los mercados y a las aldeas, ya que si no ganamos por el verano los dineros que necesitamos, cuando llegue el invierno, entrará en nuestro hogar de la mano del frío también el hambre. —Está visto que con la Facunda no podemos llegar a ninguna parte pues está la condenada con un baduyáu (barrigada) que apenas puede tartirse (moverse). En buen compromiso nos ha colocado el zaramachón del maldito pollino del goxeiru, que quiera Dios que el demonio le asesine y al amo con él, pues cada vez que veo alguno de entrambos, se me sube la sangre a la cabeza y me pongo en tal trance, que tengo miedo de que un día no pueda contenerme y les parta el alma a entrambos. Todo esto y algunas cosas más, se lo estaba diciendo la Manola que en el lleldar (hacer) ya se encontraba medio tarrasca (borracha), a su hermana Venancia, que intentó consolarla aconsejándole, que lo mejor que hacían, era bajarla el lunes al mercado de la Villa, y con lo que le dieran por ella, y un poco más que pusieran encima, mercarían un burro de arte, que las libraría del complicado problema que las atañía (conducía). En esta conversación se encontraban las afligidas Xabarceiras aquella tarde buscándole encantexu (remedio, remiendo) para su desgracia, cuando hicieron entrada en la aldea una caterva de gitanos, llegaban todos dentro de una alegrosa folixa (juerga, algarabía), que tal parecía que todos eran tan felices como los mismos ángeles moradores del Cielo. Y sin pedirle permiso a nadie, dispusiéronse a pasar la noche debajo de los hórreos que se asentaban en el centro de la aldea, lugar que desde inmemoriales tiempos, siempre solían hacer acomodo sin que ningún vecino los molestara, todos los titiriteros, hojalateros, gitanos y demás transitantes que llegaban con alguna de sus embajadas a la aldea. «PASCUALÓN EL GITANO» Mientras que sus hombres desaparejaban los burros y disponían su ajuar las hábiles y astutas gitanas con el cabás colgado del brazo, y un montón de artesanas cestas encima de la cabeza, se internaban por todas les caleyes (callejas) de la aldea, en el trabajo de equivocar al primer aldeano que se las diera de listo, y de casa en casa, intentando vender su arte, o pedigüeñando cualquier cosa, ya que todo les venía bien, llegaron a la postre a la morada de Manola, que ya tenía ésta pensado desde el momento que endilgóu (que avistó) a los gitanos, el efectuar un saneado trato con ellos a cuenta de la su pollina Facunda. Las gitanas nada más llegar ante su presencia, la saludaron siempre con la sonrisa en los labios y la humildad con ella, cualidades indispensables que el timador maneja, como si propias suyas fueren, y de esta guisa, le dieron las buenas tardes en el momento que una de ellas le preguntó sin perder más tiempo: ¿Oigame señora, no tendrá alguna cosa de comedera por el desván a cambio de una de estas cestinas tan serviciosas? Así le habló una de las dos gitanas que en pareja venían haciéndose la desvalida y la inocente, mientras que su compañera sonriéndose por lo bajo, y sin urniar (hablar palabra), aprestábase en el sacar de su faltriquera un fatu de baraxeta (un trapo de baraja), y nada más que su socia fexu pouxa nel falare (hizo un descanso en su charla) con la Manola, cogió la palabra la gitana de la baraja, y se hondeó en el registro de querer echarles las cartas, decirles la buenaventura, o leerles la suerte, pues asegurábales la sagaz gitana, que ella había nacido con el sobrenatural don, de poder leer en la palma de la mano el destino de las personas, que se halla escrito desde su nacencia en un lenguaje misterioso, que sólo los elegidos pueden leer sin la menor equivocación. La Manola, que yo puedo asegurar que la más espabilada gitana podía ser nada más que su discípula, apropiaba y miraba de soslayo a las gitanas haciéndose la fatona (tonta), mientras que sus vidayas (sienes) moldeaban el negocio que con su Facunda iba hacer encima de los rapiegus xitanus (zorros gitanos), pues ella para sus adentros se decía, que quien equivoca a un manexador (manejador) de enredos, hasta los mismos jueces le ayudarían a xebrase (marcharse) del refregado aunque éste se hendiera, en algo que bien no olíese y sonado fuera. Así pues, que cuando la gitana ya se había creído que la Manola iba a ser un tonto cliente que le pagase sus enredos, en el magín de la Xabarceira ya estaba encaldáu (hecho), el cambiar a su Facunda, por un pollino que ellos trajeran, que no cojeara de ningún lado, y que no fuese muy cargado de años. El caso fue, que cuando la gitana ya le iba a coger su mano para leerle su buena suerte, quedose sorprendida cuando la Manola le dijo: ¡Déjese de pamplinas que conmigo no tiene cabida, yo lo que quiero es cambiar una buena pollina que tengo, que a no tardar mucho se va a convertir en dos porque está preñada, por un burro que ustedes traigan, que tenga llixia (alma, fuerza), y que no tenga amolaúres (males) por ningún lado! La gitanaca dibujó una amplia sonrisa de alegría en la bufarda (ventana) de su boca escosada (falta) de la mitad de sus dientes, y después le dijo a la par que guardaba la baraja en su faltriquera: ¡Eso que usted desea ya lo puede dar por hecho buena mujer, pues mi marido tiene un soberano pollino, que es lo justo a lo que usted me parece anda buscando, así que espere unos momentos, que voy con rapidez a buscarle, para que hagan el trato que me parece a entrambos ha de agradarle! Vino al cachiquín (al rato) en un grande burro escarranquetáu (montado) de alegre presencia, que en el parecer abayucábase (movíase) como el mismo rayo. Llegó el gitano a la casa de la Manola, muy xaraneiru ya xibloutandu (jaranero y silbando), lo mismo que si ya agolifara (oliese) el negocio antes de comenzarlo. Apeose de un áxil blincu (ágil salto) el gitano Pascualón de su xumentu (jumento), y saludó con marcado respeto a la Manola, que ni tan siquiera le contestó, ya que sólo tenía ojos para apropiar al burro, que le pareció muy atongaín (bueno) en sus primeras güeyáes (ojeadas). Empezó el gitano sin demora a tejer en el hacer del trato, con la que él pensaba, que iba a ser una victima sencilla para hacerle un lucrativo timo, ya que entamangaba (hacía) la Manola tal focicu de fatona (hocico de boba), que no era menos de pensar, que aquella mujer tenía los sentidos escosáus (secos) de toda listeza. El gitano que era un útre (águila) en el asunto de hacer de un jumento que sólo valía para ser achuguináu (sacrificado) y convertirlo en chorizos perreros (malos), digo, que él podía hacer de un burro moribundo, un pollino de ojos vivarachos, espurrías uréas (estiradas orejas) y espatuxares de rellámpagu (caminares de relámpago). Así pues con esta maestría que le caracterizaba, comenzó a rexistrar (mirar) a la Facunda desde el principio de su hocico hasta el término de su cola, sin olvidarse de sus molares y patas, y mientras que él hacía tal cosa, Ias Xabarceiras no perdían su tiempo, pues también manxuñaban (tocaban, palpaban) el jumento del gitano por todo el peyeyu (pellejo), con las miras de encontrarle algo que le faltase, o de descubrirle un postizo que le tapase un defecto. Pascualón como que no quería la cosa las propiaba por el rabillo del ojo, y así, allindiaba (cuidaba) a las Xabarceiras que no tenían sentidos nada más que para rexistrar (mirar) el burro del gitano, que no hacía nada más que tascase (moverse) y no estarse ni un instante quieto, demostrándoles con tal nervioso bailar, que era un pollino de arreos, con fuerza según ellas, de llevar un par de manegáus (cestos) encima de su lomo, sin ni siquiera hacer ni un senaldo, hasta el mismo Ricabu, o al lugar de Torrestíu, que son las aldeas más cimeiras de los concejos vecinos. Se veía a las claras, que a entrambas Xabarceiras les encantaba el jumento, por tal razón Pascualón, en el lleldar (hacer) que sacaba una colilla del bolso de su llásticu (chaleco) y le plantaba fuego sin soltar el cayao de su mano, les dijo sonrientemente: ¡No desperdicien el tiempo en buscarle defectos a mi buche, pues no le falta ninguna cosa, ya que tiene hasta los dos coyones (cojones) y está tan entero como yo mismo, que soy padre de una docena de hijos! ¡Pero es igual mujerinas, pues aunque algún defecto tuviese mi jumento, me parece a mí, que no voy a poder hacer trato con ustedes, porque esta pollina que me quieren espetar, está más para ser achorizada en Noreña, que es para lo único que vale, que para hacer galopadas por los caminos! ¡Ahora que si me dan encima de ella ochenta reales, el trato está hecho, y sino, cada cual allindie (cuide) lo que es suyo! Después de mucho tejer y destejer, porfiar, y alegar mil razonamientos de toda índole, la Manola le dijo que sólo le daría sesenta reales, y Pascualón cogiéndole por su palabra, enfardóu (guardó) los dineros en el bolso, y sin demostrar la contentura que le embargaba, dio el trato por hecho. A la mañana siguiente cuando el malvís silbotiaba anunciando el nuevo día, se levantó de su cama la Manola a la misma hora que siempre solía, y antes de hacer ninguna otra labor, fue muy ilusionada y contenta a la cortexaca (cuadra pequeña) donde tenía guardado el pollino, y cuando le puso sus inquisitivos ojos encima, su alegre ilusión fue devorada por una triste sorpresa que le produjo la visión de ver a su pollino achucáu (acostado) en una postura engalbaná (sin fuerza, sin gracia, sospechosa), acercose a él ya buyéndole en sus temperamentales y endemoniados sentidos la apenada sospecha de haber sido engañada por el gitano, y sin el menor miramiento le atizó unos punterazos con las madreñas encima de los cadriles (patas) para que se incorporara y poder mejor repararlo, y fue entonces cuando se le enxenebróu (helósele) la sangre en sus venas, ameruxánduse sous fégadus (llenándose sus hígados) en el atayu (atajo) de un envenenador desespero, al reparar con cuidado a su pollino, por eso sus ojos se le llenaron de lágrimas que alumbraban la rabia y la mala leche que l'esmolecía, (deshacía), cuando ya sin ninguna duda comprobó, que el genio y bizarría que el burro tenía en la hora del trato, no era el mismo que en aquel encaldar (hacer), sino que se había tornado en volverse en estar amurrentáu (enfermizo, moribundo), lo mismo que si del mundo de los vivos se estuviera despidiendo. A fuerza de bardiascazus (palos) y de xurarnentus (juramentos) que sin miatcha (migaja) de compasión la Manola le propinaba, dentro de una amanicomiaura (locura) que le desencaldaba (deshacía) el alma, logró el pobre animal incorporarse, y cuando estuvo en pie el descuaxaringuetáu (deshecho) jumento, con sus urées pingones (orejas lacias, bajas) y los güetchus choramicándoye (los ojos llorándole), como si hubiera despertado de una penosa pesadilla, y por si fuese poco todo esto que la Manola propiaba, todavía la pobre bestia comenzó a temblar con tanta intensidad por todo su cuerpo, que le daba lugar para pensar a la airada y endiablada Xabarceira, que aquel cadabre (cadáver) de burro, estaba viviendo sus postreros momentos. Cuando la Manola percatose ya sin ninguna duda de lo cadarmeru y'esmoleciu (de lo cadavérico y desvanecido), que se encontraba el condenado burro que la había espetado el diablo de Pascualón el gitano, comenzó a alumbrar por su pecaminosa boca, dirigida por su envenenadora lengua, un rosario de juramentos todos en contra de los santos seres del cielo, también maldijo con igual arte a todos los demonios de los infiernos, y no se dejó atrás y ya en este lleldar (suceder) colgándole de las comisuras de su boca unas flemas azuladas cargadas de rabia y de veneno, a todos los gitanos de la tierra, y hasta se recordó ya completamente desarrendada por la amanicomiaura (locura) que la encibiétchaba (retorcía), de manera más denigrante hasta de la propia madre que la había parido. Ante tal escándalo de palabras endemoniantes, saltó de su cama haciendo fuego su hermana Venancia y entre las dos juntas terminaron de hacer la desarrendada y pecaminosa fiesta. «EL PEDÁNEO DE LA ALDEA» Cogió la Manola una foicetuca (hoz) que tenía mangada en un recio y fino palo de ablanu (avellano), y la su hermana una pala de dientes que estaba mocha (falta) de un par de pinchos, y así armadas como si fuesen a la guerra, conducidas por el rey de los demonios que moraba dentro de sus espíritus, preparando un alboroto tan sonado y enloquecido que dudo que nada en la vida otro mayor hiciera, con una prisa que por ser ardiente les amagostada (quemaba) la entraña, fuéronse en busca de los gitanos con el invariable propósito, de deshacer el mal trato que con ellas hicieron, y por las buenas o por las malas, recuperar sus dineros y a su pollina Facunda. Cuando llegaron debajo de los hórreos lugar donde ellas sabían que estaban los gitanos y comprobaron que ya de la aldea a tan tempranera hora los foinus (ladrones) ya se habían xebráu (marchado), entonces la pecaminosa folixa (bronca) qu' enguedétcharun (que enredaron) fue tan escandalosa que pusieron en pie de alarma a toda la aldea, y hasta los perros del lugar, ladraban enfurecidos, sin agolifar (oler) por dónde escarrapietchábase (deshacíase) el peligro, pero presintiendo que se encovarachaba (encuevaba) dentro de los falaxes (hablajes) enfogaratáus (fogosos) que alumbraban las gafuróuxas (venenosas) lenguas de las garruxantes Xabarceiras. Las gentes de mi aldea, al escuchar aquel enxame (emjambre) de airadas voces, que todas ellas endubichaban (envolvían) un rosario de fataus (muchas) maldiciones pecaminosas, a tan hora tan ceda (temprana) de la albiada (de la mañana), descumbutcherun (despertaron, levantáronse) del catre donde aun felices algunos descansaban, y comenzaron a asomarse a las puertas y ventanas, y cuando comprobaron de qué se trataba, dieron rienda suelta a sus risas y gozos que les producía la desgracia que consumía a las ramplonzuelas (ladronas) Xábarceiras, que desde el primer día que habían sentado sus vivencias en la aldea, vivían a cuenta de lo que arrapiegaban (robaban) a los vecinos, sin que jamás s’andecharan (hicieran cuadrilla) en una gavita (ayuda) hacia sus vecinos, aunque éstos se reventasen atosigados por el excesivo trabajo. Por eso, cuando aquel amanecer conoció la aldea el timo que los avispados gitanos hicieran en los pequeños intereses de las atuñáes (avaras) Xabarceiras, al espetarles aquel jumento al cambio de la Facunda, que según las manifestaciones juramentadas que públicamente pregonaba con grandes gritos la Manola, estaba murriéndose estingarraón na cortexa (muriéndose acostado en la cuadra), al xebrársele (marchársele) la alegría y el bizarro genio que le había inyectado la tarrasca (borrachera) de marrasquino que le hicieran coger los gitanos, con el fin de que el alcohol le diera por unos momentos las briosas fuerzas de su juventud que la naturaleza por viejo y deshecho ya le había quitado. Pero no conforme Pascualón con este ardid, también le había introducido para que mejor se dibujase en el lugar de su conveniencia, una fogosa guindilla en el furacu (agujero) por donde alumbraba el federosu cuchu (hediondo estiércol), y por estas razones el pobre animal que en el momento del trato obreiráu (aguijonado) por estos reactivos respondió a las aspiraciones de Pascualón para equivocar a las Xabarceiras, ahora ya aquel pollino falto de tales estímulos, no respondía a las gozosas ilusiones de la Manola v su hermana, por eso entrambas y dos estaban llevadas y traídas por el mismo demonio, y en peor genio se ponían, cuando presenciaban a las gentes de mi aldea todas ellas de buen suceso, entamangándu festa ya murga (haciendo fiesta y güasa) de las hasta entonces avispadas Xabarceiras. Así por ejemplo, la muyer del Goxeiru (mujer del Cestero) que por la causa de que la Facunda apartando el rabo p'un lláu (para un lado) y dejando la clica 'l entestate (la matriz al aire libre) permitiera que su alegre burro le anuedara 'l cibietchu (le hiciera el amor) dejándola preñada, pues por esta causa, engarrapoláronse (peleáronse) con ella las Xabarceiras, en una engarradiétcha (lucha) de campeonato, que si no es porque unos hombres de la aldea las separan, la hubiesen esmueliu a tochazus (muerto a palos), pues esta mujer esfargayánduse (deshaciéndose) de risa díjoles: ¿Qué pensabas Manola, que podías equivocar a los gitanos lo mismo que haces con todos nosotros desde que el demonio te trajo sabe Dios de dónde a vivir a esta aldea? ¡Esos filan (hilan) más fino que nosotros mióu nena, por eso no has sido capaz de detener el truñazu (testerazo) que te atizaron cuando pretendías hacer negocio con ellos, que son los mismos hijos de tu padre el diablo! ¡Me parece a mí que este año, si quieres ir a vender por las romerías la fruta qu’escarpenas (que arrancas) de nuestros árboles, vas a tener que llevar las maniegas (cestas) encima de tu mollera! Xofitóu (apoyó) Manuela de Juan de Pacha, que era muy aguda lanzando putchas (sátiras). ¡Qué quieres hacer Manola, hay que armarse de paciencia mióu nena y nunca olvides que el demonio tiene focicu de gochu (hocico de cerdo), aunque en este lleldar (suceder) a tí se te presentara en la fechura (hechura) de Pascualón el gitano, que mucióte (ordeñote) la cuarexa (cartera) y llancote (te plantó) un pollín, que según el tu falar (hablar) regalado es caro. Díjole Filomena la mujer de Julián el Pertegueiru, que tenía una lengua p’aximielgar (mover) con molestosas intenciones a las gentes. Con más arte, que su marido que era áxil (ágil) como un esquil (ardilla) tenía de coraxe (coraje) para sacudir los arizos de los castañales. Estas y otras parecidas sátiras adornadas con risas y juergas de diferente índole, les decían las gentes de mi aldea aquella mañana a las xabarceiras, con intenciones de zaherirlas, porque ni eran sociables. ni menos tenían nada de buenas personas, sino todo lo contrario, aunque si digo la verdad en aquella época, había en mi pueblo peores personas que las Xabarceiras, ya que moraban un piño de fascistones asesinos, que ellos solos se bastaban para tirar tal partido por tierra. Tanto la Manola como su hermana, esnalaban (volaban) hasta los mismos teyáus (tejados) del aburrióxu (ardiente) infierno, dentro de un envenenamiento que hacía xuenzura con la manicomiaura (yunta con la locura), y con sus lenguas harto desatinadas escarnecían todo cuanto existe del cielo abajo y del infierno arriba, y en todo momento eran acosadas por los perros de la aldea, que les buscaban descuido para hincarles los dientes en cualquier lugar de sus escalixerus cuerpos, y al tenor que con rapidez espatuxaben (corrían) iban poniendo al Hacedor y su Creación como un fedoroxu fatu (hediendo trapo), con sus maldiciones y romances pecaminosos, que muchos de ellos nadie en el lugar jamás había escuchado, y dudo que pocas personas podrían endubitchar (enredar) un rosario de ofensas como el que la Manola preparaba. Pero a pesar de ya ser mucho todo esto que enseñaban, dentro de sus mal intencionadas entrañas, muchas más nefastosas intenciones aun se albergaban, y obreiradas (aguijonadas) por ellas, encamináronse afalucháes (arreadas) por el diablo, hasta la casa del pedáneo, que moraba en la fondeirá (en lo hondo) de la aldeina, y cuando ilegaron a las canciétchas (cancelas) y vieron que estaban piescháes (cerradas), aferronáronse (cogiéronse) a ellas con tal arte, y sacudiéronlas con tal fuerza, que al no llegar el perro a ponerles freno, de seguro que dieran en tierra con ellas. Pero la Manola que era en aquellos momentos conducida por todos los demonios nacidos y por nacer, que la habían corrompináu (llenado) con una airada rabia desgalgada (desmandada), no le puso ningún respeto ni menos miedo aquel perro grande armado de carlangas que hasta los mismos lobos les imponía recelo, sino que le hizo frente con su foiceta (hoz) llantándoye (plantándole) un focetazu (golpe con la hoz) en medio de su enorme cabeza, que le hizo al gafu (fiero) perro atropar (guardar) el rabo entre sus piernas, y marcharse glayucandu (aullando) de dolores del lado de aquella mujer que era peor que la más bravía de las fieras. No hicieron caso las Xabarceiras del matauriáu (descalabrado) can qu'ameruxáu de miéu (que plagado de miedo) se marchara del lado de ellas, sino que entrambas en el mismo lleldar (hacer) ximielgaben (sacudían) las cancelas en el parejo encaldar que llamaban al pedáneo de la siguiente manera: ¡Gracianu, Gracianu...! ¿Dóu tás aponiu faldetacu alcaldi de piteru? (¿Dónde estás ruin alcalde de gallinero?). El bueno de Graciano que se encontraba en la corte (cuadra) muciendu (ordeñando) las vacas, al sentir a su perro glayucar endolloriu (ladrar dolorido) y escuchar aquellas voces preñadas de prisa y betchás (ricas) de ofensivas palabras hacia su persona, salió sin pérdida de tiempo del establo con la caramañola (lechera) en la mano, y cuando comprobó quién le reclamaba, díjoles medio enojado, porque enfadado del todo nunca Graciano lo estaba: ¿Qué es lo que queréis condenadas del infierno, donde sin ninguna duda algún día iréis amagostabus (quemaros) esas asquerosas lenguas que tenéis? ¿qué es lo que queréis que tan cedu (temprano) llegáis a la mi puerta, y no en son de paz como es la debida forma, ya que lo primero que habéis hecho, fue partirle la cabeza al perro que intentó poneros el freno que estáis necesitando desde el mismo día que pusisteis los pies en esta aldea, y no contentas con ésto, aun estáis molestando al amo, enloquecidas por el demonio que lleváis dentro de vuestros cuerpos, que sólo vosotras sabéis dónde le encontrasteis, pero que os hace rellumbrare (relucir) como el mismo rellámpagu? (relámpago) ¡Vengo a ordenarte, —dijo la Manola, saliéndole espumarayus (espumarajos) de rabia por su boca—, vengo a mandarte, que te hagas en el momento en perseguidor de los asquerosos y ladrones gitanos, que me engañaron con un burraco que cambié por la mi Facunda, que ahora está estingarraón (tirado, acostado) en la cuadra, sin llixa (fuerza) de sostenerse encima de su cadriles (patas). Graciano que era como ya sabemos, muy agudo y socarrón, comenzó a reírse por lo bajo, porque abiertamente no se decidía ante el temor de no terminar de alterar aquel par de humanas fieras, que muy capaces las creía de pagar en su persona sus cacíus estrapayáus (sus platos rotos), luego poniendo la cantimpla (lechera) entre las manos de su mujer, que había bajado a la corraleda al escuchar tan grande alboroto, y seguidamente, rascándose su cabeza por debajo de su gorra, les dijo a las Xabarceiras con una socarronería que le alegraba satisfactoriamente: —Podéis ir vosotras mismas a buscarlos, ya que tanto os interesa en encontrarlos, porque yo fuera de la aldea y aun dentro de ella, ninguna autoridad tengo, que me obligue a perseguir a nadie, y creo que para hacia la Villa deben de encontrarse, porque poco antes del amanecer les he oído yo pasar por delante de mi casa, y por cierto que llevaban entemangada una allegroúxa folixa (iban formando una alegre juerga), y ahora escurro (discurro) de dónde procedía tan grande gozo que les acompañaba, que ni más ni menos era, del betcháu (rico) trato que al parecer hicieron con la tu Facunda, por la causa de querer ser tu, todavía más gitana que ellos. ¿Qué es lo que me estás diciendo so castrón (cornudo) de los infiernos? ¡Qué no tienes de hombre nada más que el paxierchu qu’enllastica lus tous enxenebráus güesus, (traje que cubre tus fríos huesos), si en todos los lugares de Asturias tienen como autoridades a ejemplares con el mismo esprapayu (disposición, ánimo), que te tiene encibietcháu a ti, más les valdría a las gentes hacer con ellos, lo mismo que yo debía de hacerte a ti! ¡Vaya un alcalde de cuatcháus (cuajados) que en el lugar tenemos, yo no sé lo que estarían pensando los vecinos el día que te han dado la güichá (vara) de mando, porque la verdad es que no sirves ni para tornar (parar) el agua en un banzaucu (remanso) de poca llixa (fuerza)! Le dijo la Manola lanzándole unas envenenadoras y asesinantes miradas, que intencionaban la firme idea de entamangar (hacer) un engarapoláu con él. Graciano, sin hacer mucho aprecio de lo que le estaba diciendo la bruxa xabarceira, sonrientemente le preguntó: ¿Y qué es lo que te gustaría hacerme a mi Manola? ¡Lo primero que te haría so castrón de los infiernos, sería... llantate la foceta (plantarte la hoz) en medio de tu cabeza, fendiéndotela hasta las mismas caxietches del xixu (partiéndotela hasta las mismas células de los sesos), y después te haría el juicio de por qué fuiste condenado a morrer (morir), que sería por el cobardoso delito, de no saber defender los intereses de la aldea, como es tu obligación de alcalde, y también por consentir, que xentes arrobonas (gentes ladronas), colen del chugar (marchen de la aldea), haciendo festa ya murga (fiesta y güasa), ximielgánduse lus cuartus na cuarexa quei arraguñarun a lus tous vecinus (moviendo los dineros en su cartera, que fueron fruto del robo que hicieron a tus vecinos), por la causa de tener un pedáneo, escasáu de coyones, ya betcháu de plumes de pituca llueza! (seco de cojones, y rico de plumas de gallina clueca). Estas palabras tan poco delicadas y tan grandemente ofensivas, no le sentaron nada bien a Graciano, a pesar de ser él, hombre tranquilo y transigente en gran medida, quizás las hubiese deximíu (olvidado) si su mujer no estaviese presente, pero al no ser así, a Graciano no le cupo otra alternativa, que intentar castigar a aquella desvergonzada que le estaba tratando lo mismo que si él fuese en vez de un hombre y por más primera autoridad de la aldea, no fuese nada más que un enyordiáu pingayu (un sucio pingajo), por esto, destinado Graciano en hondura donde jamás se había presenciado, se arrimó a la Manola con miras d'acoyela (de cogerla), y propinarle un par de ximielgones (sacudidas) y meterle el miedo y la vergüenza en el cuerpo a aquella deslenguada, aunque no fuese nada más, que para demostrarle a su mujer, que un hombre siempre es un hombre, aunque su mujer le pegue, le engañe y le convierta en cabrón por considerarle baldrayu (cobarde). Pero lo que no pudo imaginar Graciano, era que la Manola no se amilanaba ante nada ni nadie, y para demostrárselo, dio un paso hacia atrás para dejar trecho de combate, y enarbolando su focetina (hoz) en el aire, apurrióye (diole) con ella un fuerte y certero golpe en su cabeza, que hizo que el pobre pedáneo se esmurgazara (se cayera) en el santo suelo privado del conocimiento, manando un remexu (un chorro) de sangre, por una mancaúra (herida) que le había nacido repentinamente en el canto una vidatcha (sién). Y así en esta ridícula y dolorosa postura, atendido por su mujer ante la cual el Graciano pretendía convertirse en un héroe, le dejaron las Xabarceiras, que colaron (marcharon) de su casa, perseguidas de cerca por el rencoroso perro de Graciano, que les ladraba enfadado, más por el golpetazo que a él le habían apurriu (dado), que por el que le allantaron (dicran) en el pericote (alto) de la mollera de su amo. Amanicomionáes fasta ‘l más espurrir y'encoyer (enloquecidas hasta el más estirarse y encogerse), Ilegaron las Xabarceiras a su casa guiadas por el mismo espíritu de lucha que en ellas no cejaría hasta que no pudiesen dar con los gitanos, aunque menester fuérales perseguirlos hasta los quintos infiernos, y para sacarlos de este antro, con el fin de conseguir lo que les pertenecía, estaban decididamente dispuestas a partirle los cuernos al propio diablo lo mismo que terminaban de hacer con el pedáneo Graciano. Así pues, sin perder ni tan sólo un minuto de tiempo, sacaron de la cuadra el cadarmoúxu (cadavérico) burro de Pascualón el gitano, y la Venancia tirando del ronzal, con tal xuxeante llixa (crecida fuerza) que si pudiese le llevaría arrastrando, y su hermana Manola apuxada (soplada) por un demonio con peor genio aun, iba detrás del desventurado pollino apurriénduye (atizándole) sin descanso barganazu tras barganazu (palo tras de palo), encima del llombu (lomo) del pobre y descuaxaringuetáu (deshecho) pollino, para que caminase con prisa, y tal hacía la desdichada bestia, y no tanto por huir de los palos a los cuales ya debía de estar bien acostumbrado, sino por intentar aflojar el dogal del que tiraba Venancia, y así de esta forma y siempre en pos de los gitanos, se dirigían a la Villa donde aquel día había mercado. Hicieron entrada en el mercado las Xabarceiras arremexandu (remojadas) en sudor, producido por el cansancio de la larga caminata, y por la desmesurada rabia que a entrambas y dos las atenazaba. Y mismamente al lado de la fragua del ferreiru (herrero) que aquel día tenía endemasía trabajo, agüeyarun (avistaron) a la Facunda, y al lado de ella muy sonriente y gozoso se encontraba el gitano, que tampoco perdía su tiempo, pues ya estaba tratando de venderla o de cambiarla a un paisano que en la sazón la estaba registrando, pero plantándose la Manola delante de Pascualón, le dijo con el hambre retratada en sus ojos de atizarle un par de focetazus: ¿Qué barro me has espetado en el trato so ladrón? ¡Haz el favor de devolverme ahora mismo mi pollina, así como los dineros que me arraguñaste (arañaste), si quieres que este espineroso y mentecato trato que conmigo has hecho, tan sólo se quede en un inolvidable enfado! Pascualón no le hizo mucho caso a las palabras rogativas de la Manola, y así empujándola para un lado con cierto desprecio, a la par que la miraba amenazadoramente le dijo: ¡Quítese delante de mi vista mujeraca de los infiernos, y deje ya de molestarme en mi trabajo, y no olvide nunca, que el que hace un trato con Pascualón, lo tiene hecho para ciento y un años, y ahora lárguese y déjeme tranquilo, que estoy en buenos tratos con este paisano! Nunca peor hiciera el gitano en toda su existencia, pues antes de que se percatase del peligro que le rondaba, la foicina (hoz) de la Manola caía sobre su cabeza con la fuerza de un rayo, escantoyándoila (hiriéndosela) por un par de xeitus (sitios), que hicieron que Pascualón sin gurniar (decir) palabra, se enclicara (se cayera) en el enllordiáu (sucio) suelo, falto de sus sentidos, y alumbrando tanta sangre por sus heridas como un gochu (cerdo) cuando lo están achuquinandu (matando). Nisti telar atopábase (de esta forma se encontraba) Pascualón, con el cerebro escosáu (seco) d'afechu (del todo), por mor de aquel inesperado golpetazo, que le había llegado de manos de quien él menos esperaba, cuando Antonio, un guardia civil del cuartelillo de la Villa, que había presenciado todo el achuquinante xocesu (sangriento suceso), por encontrarse este guardia al lado de la ferrería, enzolánduse fatáus de culetinus de xidre, (bebiendo copiosos vasos de sidra), en amigable compañía con unos paisanos, en el chigrín (bar) de la Faba Prieta (la Haba Negra). Por eso, cuando vio esmurgazarse (caerse) en el suelo por mor del focetazu que le allumara (alumbrara) la Manola al foin del gitano, fue el guardia acochetráu (acelerado, rápido) al lugar del amagüestu (la quema), con el buen fin de encaxinar (encajar) el orden en aquel descalabramiento, nada más que el guardia llegó, afogárunse lus aburióxus (se ahogaron los ardientes) ánimos de otros gitanos, que lleldáus (hechos) dentro de una folixa (bronca) engafuróuxa (envenenada), intentaban acorralar a las dos Xabarceiras, que ya en la sazón se habían aferronáu (cojido) a la Facunda, y dejado libre al jumento del gitano. Mientras tanto, el herido de Pascualón ayudado por el guardia y por otros gitanos, que aun seguían con voces enardecidas maldiciendo y amenazando a las Xabarceiras, como cuento, se puso Pascualón en pie aun medio temblando al volver del desmayo, y con todo su rostro plagado de escandalosa sangre, demostrando que fuera del dolor que pudiera sufrir, el condenado no estaba en trance de mayores males en su cuerpo, no así en sus intereses como veremos seguidamente. «UN XUEZ D’ESQUILONA» (UN JUEZ DE CAMPANILLAS) Era el señor Juan Antonio un falangista digno de ser emulado por el más honrado servidor bien fuese Roxu (Rojo) Prietu (Negro) o Amarietchu (amarillo), era en verdad un hombre Joseantoniano que sin llevar camisa azul con el yugo y las flechas bordados en la pechera, como muchos otros pingayus (pingajos) que yo he conocido, que siempre iban uniformados con su camisa azul y corbata negra, dándoselas en todo momento de buenos falangistas, y no siendo nada más que unos verdaderos mierdas. El señor Juan Antonio era un hombre que llevaba siempre prendido en su espíritu los Nobles y Hermosos Credos de la Falange, con sus Humanidades y Libertades manifiestas, y los sabía cumplir porque los había aprendido en derechura, tal como el Mártir de su Fundador los había creado, para el bien de la Patria y de todos sus hijos. ¡Qué poco sabía José Antonio, que su Maravillosa Doctrina iba a ser manejada por algunos hombres, que cometerían con Ella verdaderos asesinatos y atropellos de toda índole. Pero dejando esto de lo que trataré algún día con mejor cuidado, y acogiéndome al hilo de la historia de la que estoy tratando, diré, que el juez de la Villa era este Caballero, que vivía al lado del mercado, y que era un hombre muy justo, amigo de los razonamientos, inteligente y también un campesino que amorosamente trabajaba sus campos. Cuanto yo, que cuando aquella gresca estaba con su apogeo, salió el juez de su casa para percatarse de aquel ardoroso tiberio (lío que se amagostaba (quemaba) frente a la puerta de su morada, y cuando vio que era un gitano el causante del sangriento escándalo que se enseñaba, díjole al guardia con ardientes deseos de hacer la Justicia en aquel endubiérchu (enredo). ¡Antonio, hágame usted el favor de llevar ahora mismo hasta el Juzgado, a todas las gentes que dieron vida a esa sangrienta engarradiétcha (pelea), para encalducar la xusticia que anda escosá 'n dalgún d'echu (hacer la Justicia que anda seca en alguno de ellos). Así que las Xabarceiras y el escantoyáu (herido) Pascualón hiciéronse presentes en el Juzgado, ante los escrutadores ojos del señor juez, pusiéronse los tres al mismo tiempo a hablar en su defensa, acusándose los unos a los otros dentro de un rosario de palabras injuriosas y amenazantes, que de nuevo los ponía en el atajo de volver a engarrapolarse (pelearse). Pero el señor Juan Antonio fiel repartidor de la Justicia, aporreó con sus nervudas y fuertes manos un mazazo encima de la mesa, que por muy poco la desarma en un montón de astillas, ya que era el juez un bigardón (mozarro) de más de dos metros de estatura, tan fuerte y resistente como una montaña. Y al parejo que tal golpe sacudía, dijo engrifandu (arrugando) su hocico al lar del enfado: ¡Hágamne el favor, y procuren que no tenga que llamarles de nuevo la atención, de hablar tan sólo el que yo le pregunte! Y al decir esto, miró tan condenadoramente al gitano, que éste, que se sabía culpable de muchos engañosos tratos que había efectuado en todo aquel concejo, no pudo menos que ya considerarse culpable, antes de que el juicio comenzara. ¡Vamos a ver Manola, hoy como no tengo mucha prisa ya que el llabor (labor) no me apremia, cuéntame tú la primera con toda clase de pelos y señales, lo que te ha sucedido, para que le escantoyaras (deshicieras) la mollera a este paisano, del que ya tengo oídas que no es la primera rapiega qu'esfuecha (zorra que despelleja) ni tampoco será la última, porque el que fai 'n maniegu fai 'n cientu, dandoi banietches ya tiempu! (el que hace un cesto hace un ciento, si se le da, varas y tiempo). ¡No fue solamente este condenado y útre de xitanu (buitre de gitano) el que salió amatauriáu (con heridas) de este asunto escontramundiáu enrevesado), que prestase usted con tan buen tino a escantexayu (arreglarlo) señor xuez (juez). Pues también al pedáneo de la mi aldeina me vi en la apremiante necesidad d'apurriye (de darle) un par de galgazus (estacazos) en mitad de la cabeza de magüetu (bestia) que tiene, por el no querer acaidonar (dirigir) la justicia en el camino de la razón, como corresponde a su condición y obligación de alcalde del chugar! (lugar). ¡Por la Virxen (Virgen) de los Remedios Manola, no vaigues (vayas) a decirme que por mor de este foín (ladrón) de gitano, tuviste que fendeye (partirle) la cabeza al pobre Graciano!, dijo el juez alegrando su rostro dentro de una llixerina (ligera) risa. ¡Sí señor juez, así ha sucedido! Afirmó la Manola, y seguido le contó todo el suceso desfigurándole y haciéndole más rentable a su favor. El juez casi sin poder detener la risa que le regocijaba su espíritu natural y noble, dijo intentando enmarcar en su rostro la seriedad que no era capaz de hacer: ¡Has hecho muy bien Manola, pues yo entiendo, que el que tiene el delicado oficio d'encaidonar (de dirigir) la justicia, y traiciona tan derecho menester, debe de ser castigado con más entaine (fuerza), que aquellas otras personas, que tienen la obligación de la ley obedecer. Así pues, si en mis manos estuviera te premiaría, por la valentía que has usado al defender la justicia y la libertad de tus intereses! ¡Y ahora... sigue, sigue Manola, y cuéntame todo el suceso en sin mucitche (ordeñarle) ni una migátchina (migaja), que me presta mucho mióu nena (que me agrada mucho mujer). ¡Escúcheme bien señor juez, y júrole por adelantado que cuanto le voy a decir, no se xebra (marcha) de la verdad en nada, y todo ello no es nada bueno ni para mis intereses que han quedado esgazáus d'afechu (rotos del todo), ni tampoco para este gitanu que vé usted aquí tan humildemente con la cabeza gacha, queriendo dar a entender que no ha roto en toda su vida un mal plato, y lleva desde que ha nacido viviendo a cuenta de sus bien urdidos tratos, que tal parece que para industriarlos le ayuda en todo momento la brujería o el mismo diablo! ¡Verá usted señor juez! —Ayer cuando el sol se esfumía (marchaba) por detrás del penón (peña) picutrera (sierra de las águilas), que es la hora d’atapecer (oscurecer) la tarde, llegó este llimiagu (baboso) de gitano a caballo de su adefexu de pollín hasta la misma puerta de mi casa con mires de tentarme la necesidad que me arretrigaba, porque usted bien sabe que nosotras nos dedicamos a correr (vender) la fruta, por todas las romerías y lugares de los tres conceyus y de esta manera nos ganamos nuestra vida muy decente y honradamente, pues como le estoy diciendo, no sé cómo este condenado se enteró que la nuestra pollina estaba próxima a parir, y claro, al encontrarse la probitina en tal estado, no nos podía servir para nuestro trabajo, por eso, tentadas por el embrujo, la engañadora palabra y la buena presencia que en aquel momento se ensenoraba en el pollín de este fartonzón (comedor), enguedeyóume (me enredó) este bruxu (brujo) de gitano, con el endemoniado trato que conmigo hizo, que si tarda mucho tiempo en deshacerse de nuevo, se me va escosar el xuiciu (secar el juicio), y va a dexame Ies caxierches del celebru tan enxenebráes d'entendedeiras, que vóu bazcuchame abondu más cedu de lu qu'usté cunta na mesma amanicomiaúra (dejarme los sesos del cerebro tan fríos de entendimientos, que se me van a vertir mucho más temprano de lo que usted piensa en el mismo manicomio). —El caso fue señor juez, que el burro que traía este foinacu (ladronzuelo) de gitano, estaba en conciencia de él bien preparado, para dejarme a mi despreparada de intereses, pues el pollicaco con un fatáu de caxilonainus (montón de cajilones) de marrasquino que le daban calor y fuerza a su banduévu (panza), hacían de él por el motivo de la alegre tarrasca que lu encibiechaba (borrachera que lo trenzaba), un burrón con buena llixa ya xuxeáu xeniu (fuerza y crecido genio). Y por si fuese poco esto que le cuento, todavía para que el pollino mejor se dibujase, llantárale este achuquinador de gitano, una rabiosa guindilla por debajo de la cola, mismamente dentro del oscuro agujero que alumbra el recimo de los hediondos cagayones, según descubrí yo misma hoy por la mañana justamente cuando ya era demasiado tarde. Y todavía por si estas dos demoníacas trampas no fuesen suficiente este banduerru (indeseable) de gitano, de tal manera me dibujó su jumento que desatinada me trae en este juicio, que me hizo de él un semeyu (retrato) que yo papéilu (creílo) entero, y consideré al pollín como el mejor burro de toda la burrería de gitanacus y aldeanos. Por esto señor juez, le di al cambio de tan falsa y ençañadora presea, la mi pollina Facunda y sesenta pesetas encima, y con estas prendas en nada faisas, xebróuxe (marchose) de mi vera este maldito gitano, tirando del ramal de la mi Facunda, que no quería la probitina del mi lado marcharse, quizás porque presintiera al ser más lista que yo, en la triste desgracia que me dejaba este baldrayu (cobarde) de gitano, que se alejaba de mi casa haciendo que ruxeran (sonaran) los mis dineros en su bolsillo, a la par que se iba riendo de gozo y alegría por la causa del betcháu (rico) negocio que encima de mi pobreza hiciera este desalmado de gitano. Pascualón que ya tenía lleldáu (hecho) en su pensamiento axuquerándose (apoyándose) en las anabayáes güeyáes (acuchillantes miradas) que le dirigía insistentemente el juez que aquel juicio lo tenía bien perdido, cuando escuchó a la Manola decir que le había entregado sesenta pesetas, puso el glayíu (grito) en el cielo jurándole al juez por el Cristo de los gitanos y la Virgen de los cristianos, que la Manola estaba mintiendo, pues tan sólo le había dado sesenta reales. El juez, escuchó por breves momentos a Pascualón en su defensa, y después poniéndose en pie y mirándole acusadoramente desde su montañosa humanidad, a la par que señalándole con su dedo índice que era más grueso que la muñeca del gitano, le dijo con palabras que marcaban el denodado desprecio que sentía hacia estas pobres y desdichadas gentes: ¡Sesenta reales por cuatro lados, que hacen justamente lo que le arraguñaste (arañaste, robaste) a esta desventurada muyerina. No me cave la menor duda que yo os conozco muy bien, ya que siendo yo niño otros gitanos como tu también engañaron a mi padre, por eso puedo juzgarte con propiedad y conocimiento de causa, porque sé que no vivís nada más que de el timo y del engaño y de vuestras cestas, que mientras las tejéis pensáis en la forma de hacer vuestras trapisondas cada día con mejor cuidado! Díjole el juez encabronáu (enfadado) en tal postura que sus mejillas se le pusieron del mismo color de las brasas, en el lleldar que no le quitaba los ojos de encima, mirando tan condenadoramente al esquelético rostro del gitano, que iba ser en parte engañado lo mismo que el señor juez, por la paraximesqueira de la Manola. ¡Pero señor juez, habló enloquecido en su defensa el pobre Pascualón, a la par que a sus ojos vivarachos afloraban unas rebeldes lágrimas que tal vez fuesen fruto de la rabia que le producía el ser tan miserablemente robado por aquella aldeana de los infiernos que él en un principio pensaba que era la mujer más tarangona (tonta, imbécil) que había conocido en su vida de bien urdidos timos y enredosos tratos. ¡Pero señor juez! ¡Sesenta pesetas no las he tenido yo juntas desde que baltiarun (tiraron) la República, donde el pobre podía vivir con más libertad, y con más justicia que usted a mi me está haciendo! ¿No comprende usted señor juez, que con sesenta pesetas hoy día se compra un buen burro y aun sobra dinero? ¡Lo que yo comprendo muy bien es que eres un redomado timador y un despreciable ladrón de cuerpo entero, y como no me puedes demostrar con personas de orden y honradez lo contrario, le has de pagar en media hora los dineros que le has timado a esta pobre mujer, y le devuelves su pollina, que ella con buen contento te hará entrega de tu jumento, y tu harás con esté difunto viviente, lo que ahora como final de sentencia yo te dictaré! ¡Cómo este pollín que nos trae en discordia ya no está para hacer ninguna clase de trabajo, y sabiendo todos los que por ser gentes del campo entendemos de animales, que a un burro; es la leche que se le puede ordeñar, que no es otra que su trabajo, yo como juez de este Juzgado, de la muy noble y astur Villa, te condeno a ti, que te llaman todos Pascualón el gitano, y yo te llamaría Pascualín el de los sucios enredos, a que me traigas ante mi presencia, el pellejo de este jumento, y de esta forma sencilla y eficiente, se atajará de una vez por todas el mal por su comienzo, y no ha de ser jamás este pollino equivocador de nadie más! ¡Y que quede bien entendido, que si te xebras de este concejo, sin traerme antes el pellejo del tu jumento, mandaré a los civiles que te persigan hasta que den contigo, y les ordenaré que bien atado te conduzcan ante mi presencia, y aquí, con estas mis manos que no fueron hechas para manejar una pluma, ni menos para detenerse en ningún papeleo, a los cuales yo considero innecesarios cuando la justicia está tan clara como la luz de este hermoso día, como te digo Pascualín de los enredos, con estas mis manos, que saben muy bien manejar el arado, el guarabeñu (guadaña) y la fexoria (azada), para trabajar dentro de la honradez con muchos sudores y esfuerzos la tierra, con estas mis manos que fueron capaces de empuñar un fusil, y luchar sin rencor ni miedo en defensa de unos derechos humanos a los cuales yo considero justos, dentro de la mermada justicia que los hombres sabemos hacernos, con estas mis manos yo te digo Pascualín de los enredos, que l'arrabucaré (le quitaré) el peyeyu (pellejo) al tu jumento, en el preciso momento que haré lo mismo con el tuyo propio, y de esta sencilla manera, libraré a la sociedad de un pioyón (piojo), que al igual que hay muchos que con libertad campean y viven sin doblar el renaz (espinazo) a cuenta del sudor ajeno! Ante la firme sentencia de aquel juez, que maneja las leyes con la misma fuerza y natural justicia con que empuñabá el llabiegu (arado) para arrancarle a la tierra el justo 'precio de su trabajo quedó Pascualón en lo más bajo de sus sufrimientos y las Xabarceiras en lo más alto de sus alegrías, porque habían conseguido con su lucha desesperante y fiera, una victoria que a fuer de verdad, en una parte no era justicia. Sin embargo Pascualón, tras quedarse unos momentos silencioso y meditabundo, díjole a la postre al juez sin ápice de miedo y con la valentía que le azuzaba, al sentirse timado por aquellas mentecatas dentro de la ley y en el mismo limo que él había pensado que les había hecho: ¡Bien está señor juez, que le devuelva a estas paisanacas su pollina Facunda, también entro en sacrificar a mi burro y traerle su pellejo, no me opongo a pagarles los sesenta reales que en el desastroso trato que con estas hijas de satanás hice, que a cambio de mi jumento ellas me han entregado, pero por lo que sí protesto, es por las cuarenta y cinco pesetas de más que tengo que pagarles, y considero que esto es el timo más vergonzoso que jamás le han dado a ninguno de mi clase. Así que… señor juez supuesto que es usted hombre justicioso, le pido que atienda mis honrosas razones, y haga la Justicia sin que ninguno de ella tengamos que avergonzarnos! ¡Yo no sé Pascualín de los enredos, timador de poca monta y menos clase lo que Dios debe saber en las verdades, yo no sé si tu has cobrado lo que dices, o si ellas han pagado lo que afirman, yo soy hombre y como tal no he de avalarme en errores que se xebran de mi alcance, sólo sé que yo he dictado justicia ateniéndome a los hechos que se nombran, y hecho está que tu eres el culpable, y suerte tienes que estas buenas paisaninas, no te hubieran reclamado ciento veinte veces más crecidos, esos dichosos sesenta reales porque si así fuese, no tendrías más remedio, que sin más protestas abonarles! Todos en mi aldea aquella tarde, esperábamos con marcado disimulo, y satisfactoria alegría, que retornaran de la Villa las despreciables Xabarceiras, por el Humano hecho de reírnos y mofarnos de su desgracia, y creo que todos teníamos creído, que iban a retornar otra vez con aquel moribundo pollino, a no ser, que a fuerza de barganazus (estacazos) le hubiesen achuquináu (asesinado) en el camino. Así pues, los vecinos se repartían haciéndose que trabajaban, por las diferentes huertas colindantes con el camino por donde ellas tendrían que regresar, y algunos chiquillos dentro de las malsanas intenciones de guasearnos de ellas por adelantado, fuimos a su encuentro en un trayecto de más de tres kilómetros, para entrar escoltándolas en la aldea, haciendo verbena a la fiesta que teníamos acordado prepararles. Al fin las vimos retornar, y cuánto desprecio, ansias de sátira y risa sentíamos por ellas, tornose de pronto en respetuosa admiración, pues atónitos pudimos comprobar, que no sólo traían con ellas a su burra Facunda, sino que al lado de ésta traían un estupendo pollino que habían mercado con los dineros que supieron sacarle al avispado gitano, demostrándonos a todos, que el vencedor aunque odiado y despreciado por ser en demasía nefastoso, siempre es admirado y temido, ante el temor de por él, ser humillado y avasallado. Esta es una condición de la cobarde masa Humana, que al vencido aunque éste sea caballeroso y honrado, le solemos despreciar terminando de aniquilarlo, mientras que al vencedor, aunque sea lo más despreciable que imaginarse puede, le cubrimos su camino de rosas y de regalos.
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    Axabarciar, entiéndese por vender, tratar, comerciar a pequeña escala, con frutas, huevos, gallinas, etc., etc., etc.

    Primer Diccionario Enciclopédicu de la Llingua Asturiana > axabarciar

  • 12 xabarciar

    Xabarciar, tratar, vender, cosas de poco valor, tratantes de escasa monta. —Cundu you yera un guaxín prexenciéi 'l tibeiru que cheldarun les Xabarceires de la miou aldina con la sou pótchina Facunda ya 'l Pascualón el Xitanu, lu que non cuntaba you yera qu'al currer el tempu tamén me diba ver encibiétchau per mor de la ñecexidá en tener que faer de xabarceiru, ya nagora mesmu comu tóu nisti dicionariu xirbe d’escola, nagua mexor qu’istes estories pa comprendier con mexor vidayu les ñaturales ya ximples costumes de la Nuexa Xantiquina Tierrina, que güéi nel díe tan sous ancestrus nes manes fedientes ya utreresques de prexones tan rapiegues ya llimiagues, que l'únicu que fan ye mistificar les nuexes costumes ya Chingua, menus mal que col tempu les xeneraciones d'astures venideiras xabran poñer les couxes nel sou xeitu, pos conista esperancia trabayu you xin escanxu ya m'allegre ya enxemáu de gociu, perque you séi, ya xuru per toes mious ceyencias con tou la fuercia del miou alma, qu'angún díe non mu xeru, tous lus entroyáus trabayus fechus per lus Amigus del Bable ya de lus del Conceyu Bable, que güéi amindi me pieschen toes les portes, per el baldrayante miéu que xin me dexen xueltu, dalgún d'echus nun me valdríe amindi nin p'arrátchar el cuchu de lus bracus. Axín que ya ta tóu faláu, ya tous lus que nun s'atopen nes arrañáes pradeires del enxútchu vidayu, comprendieran, que toes istes xentaques per minde nomáes nun son namái que pioyones ou paráxitus. TRADUCCIÓN.—Cuando yo era pequeño presencié el sonado escándalo que prepararon las tratantas de mi aldea, por la causa de la su pollina Facunda y de Pascualón el Gitano, lo que no pensaba yo por aquel entonces, era que al transcurrir los años, me iba a ver envuelto por causa de la necesidad o cualquier otra razón parecida, en trabajar como tratante verdulero, frutero, xabarceiru, pero ahora mismo, y como según mi parecer todo en este diccionario ha de servir de escuela, pues nada mejor que estas historias verdaderas, para comprender con mejor entendimiento y sencillez, las naturales y simples maneras, costumbres y diversas cosas de Nuestra Santina Tierrina, pues con grande pena hoy yo estoy viendo, como sus más respetables y queridos ancestros, son manejados ultrajantemente, por personas que faltas de dignidad, amor a la Tierrina y respeto hacia sus sagrados ancestros, están dándoselas de entendidos mistificando toda la "Cultura de Asturias”, pero yo se muy bien, que con el tiempo las generaciones de astures venideras sabrán poner todas las cosas en el lugar que sabiamente les corresponde, con esta hermosa esperanza trabajo yo hoy en día con alegría y cubierto de entusiasmado gozo, porque yo sé, y juro por todas mis creencias con toda la fuerza de mi alma, que algún día y no muy lejano, todos los estercolosos trabajos sobre la materia de la LLingua D'Asturies y sus Ancestros, que fueron basurescamente hechos por los Amigos del Bable y los del Conceyu Bable, que desde siempre, pretendo decir, que desde que nacieron porque mis humildes trabajos les hicieron con afán insano intentar crecer sin tener raíces para sostener su rancuaya creencia, no hicieron otra cosa que ponerme torgas en todas las puertas, por el cobardoso miedo que tenían, pues al dejarme suelto a mí, ninguno de ellos hoy existiría, y menos me serviría ni para limpiar la cubil de los cerdos. Así que ya está dicho todo sobre este asunto de estas asociaciones de la "Trelda", y yo creo que todas las gentes que no tengan las praderas del entendimiento secas y limpias de saberes, comprenderán perfectamente, que todas estas gentes por mi nombradas nada más que son parásitos. —Esta historia que ya de seguido les voy a relatar, terminó con mis huesos en la cárcel, por haberla yo contado en un pequeño libro tal como había sucedido. La verdad que you espatuxé ya galamiéi per tous lus llugares de la miou Tierrina con mu pouca xuerti, quiciavis fora que ñaciera pa ser un esgraciaín ou que les couxes teñíen que cheldaxe axindi, güéi nel díe que ya vou pa viétchu tou contentu de ver vivíu miou vida de la maneira que lu fexe, perque xin axindi nun fora, poucu ou nagua podría cuntar de les costumes ya llingua de miou mantina Tierrina. Xin lus Roxus viexon ganáu l'engarradiétcha, que tal couxa viexen fechu senún se xebraren en tantus partíus pollíticus que nun dexaben llugar pa l'esciplina, pos tóus queríen mangoniar, escutír, ya tou 'l mamplenáu de tibeirus xabarceirus que manexaben, metantu que lus fascioxus afilaben les nabayes p'achuquinar piscuezus, falules you, que xin lus Roxus viexen ganáu, xeguramente que you nun taríe nagora fayénduyes isti dicionariu, perque xeguramente miou pá me viexe adeprendíu dalguna carreira d'inxinieru, maestru, aboguéu, etc., etc., ya me xebrarie del ñatural vivir ganándume 'l pan nes mesmes fontes ancestrales de les nuexes costumes ya llingua, que ye dou s'abaya tou 'l ancestru ximple, ñatural ya fidalgu d'Asturies, Trubiétchu de la Patria España. —Toes les prexones xebráes d'istus ñaturales y xantiquinus llugares de la miou embruxadóura ya melgueira Tierrina, nun poden querecha na fondeirá de sous raigones, nin tampoucu puén faer el munchu trabayu qu'entavía se ñecexita pa poder cheldar en bom xeitu la Nuexa Palancia, ya toa l'ancestral cultura de la Tierrina. —Existi un reflán astur que díz, que lus nenus pa que queran ben a la sou má tenen que mamar nel sou entamu fasta qu’isti d’afechu s’escose. “TERESA, LA JUSTICIA Y LOS ELEGANTES TIMADORES DE NUESTRO TIEMPO" —No son los timadores de mi tiempo, tan desgraciados y tan cándidos como lo era Pascualón el gitano, pues estos indecentes y asquerosos gitanos de hoy día, no son de la raza “calé” (pobrecitas estas humildes y desventuradas gentes, cuanto desde niño las he querido admirado, y cuantos compañeros en la vida he tenido que eran gitanos, siendo todos ellos estupendos camaradas y soberbios muchachos). —Digo que los gitanos de hoy día, son la escoria que dejo la guerra entre la raza despreciable de algunos “payos”, y a uno de ellos, le voy a retratar en estas páginas lo mejor que pueda, sin quitar, ni poner nada, simplemente voy a contar cuanto ha sucedido. —Habíame yo caído trabajando como calderero en el montaje, y rótome el cumal (la columna), quedando de resultas de este llumbazu (caída) inútil para el trabajo que profesaba, y en una situación bastante desesperada, porque las pensiones que asignan a los mutilados trabajadores españoles, son las mayores canalladas y porquerías, que no le alcanzan al desventurado lisiado, ni para comer un plato de sopas cada día. Así pues, había rótome las costillas toda mi vida trabajando para aquella miseria que me condenaba, a vivir el resto de mi existencia falto de todo, todavía para más fastidiarla, escuchando todos los días a los dirigentes de trabajo, bien con sus comedidas y estudiadas frases, que díganlas ellos y entiéndalas María Santísima, dirigiéndose al país, por el medio de la televisión, radio y prensa, que nos iban a dar tanto y cuanto. En resumen, que lo único que nos dan es una caca, tan grande tan asquerosa como ellos son. —Estaba yo de pensión por aquel entonces en casa de la señora Teresa, que era viuda de un desgraciado minero, que el pobre tuvo la triste desgracia para su esposa e hijos, de morirse en la cama abrazado por una enfermedad, y no haberlo hecho en la mina aplastado en una oscura y tenebrosa rampla por un costero, ya que si así hubiera sucedido, le quedaría a su viuda una pensión que aunque también fuese en demasía miserable, no sería tanto como la que le daban por el seguro de enfermedad, que ésta sí que no les algamía (alcanzaba) ni a ella ni a sus tres pequeños hijos, que el mayor aun no llegaba a los nueve años, ni para comer sin fartucase (hartarse), ni una vez a la semana. —Dentro de privaciones y de miserias endiabladas vivía Teresa, estirando la moleculosa pensión que no se espurría (alargaba), por ser en demasía encoyía (encogida) ya de crianza, y pensando yo que a esta triste situación que a ella acompañaba, sin galga (freno) que me detuviese en desfrenada carrera me acercaba, decidimos dedicarnos al trato, para ver si de esta forma lográbamos despegarnos de las miserias que nos rodeaban. —Creo que no hace falta decir, que la Ciencia le hizo correr al progreso con tanta prisa, que desde aquella inolvidable y lejana época de las Xabarceiras, que recorrían las aldeas, romerías y mercados, vendiendo las frutas y demás productos, que transportaban a lomos de los humildes burros, hasta nuestro tiempo, el progreso con sus ingenios modernos, mitad emparentados en el agrado del Hacedor, y la otra parte con los mismos imaginares del propio demonio, hizo a las gentes moverse con apurante desatino, y por tal suceder hoy día, las personas que pretendan dedicarse a la industria de comerciar con las frutas u otras mercancías por las ferias y mercados, no pueden hacerlo sirviéndose de un jumento como medio de transporte, ya que si tal locura hicieran, no ganarían ni para darle un mal pienso a su pollino. —Por tal lleldar (acontecer) Teresa y yo, nos decidimos hacer camino en el oficio de Zabarceirus (tratantes), por eso nos centramos en el menester de comprar una pequeña furgoneta, de ésas que suelen ser a medio uso, y que nos la dieran a plazos, ya que yo no tenía una perrina (cinco céntimos), y ella tenía que pedir prestado el dinero de la entrada que había que pagar por el vehículo, a una conocida suya que sabedora de nuestras pretensiones, habíase decidido a prestárselo. —Así pues ya con esta determinación tomada, y ya completamente decididos a ganarnos la vida en este oficio, que la verdad era el único que me quedaba a mí, ya que a pesar de aún valer para un sinfín de profesiones livianas, no podía aspirar a ellas, porque para tal menester, se necesitaba una recomendación, o ser por lo contrario hijo o pariente de algún facistón de buena marca, faceta única y sin igual, que impera desde la guerra Civil para todos los efectos en mi Patria. Por esto, a poca curiosidad que cualquiera tenga para investigar en este denigrante panorama, se darán cuenta que en todos los ministerios de la nación, desde el que más manda, hasta el conserje que le franquea la puerta, son todos fascistas, divididos en falangistas, que hermoso y Humanitario partido es éste, si sus afiliados cumplieran los Credos que tan maravillosamente creo su Fundador, y la otra parte, está compuesta por exdivisionarios, exlegionarios, excombatientes, exlicenciados de las fuerzas armadas, etc. Y si quieren ustedes encontrar algún Rojo, búsquenlo en las profesiones más bajas y avasalladas del país. Esto que les cuento señores es la pura verdad, así que consideren la libertad que tendremos, cuando detrás de cada obrero, existe un patrón que le roba, y si el trabajador protesta, entonces aparece un látigo y una pistola que le hace por la vía de la fuerza, entrar en la senda de la esclavitud. —Digo yo, que para encontrar esa furgoneta que determinado teníamos de comprar, investigamos en las páginas de anuncios de los periódicos de provincia, por si alguna venía anunciada del tamaño y condiciones que nosotros necesitábamos. Y nuestra alegría fue grande cuando observamos en uno de los diarios que la Casa de Vulcano tenía una en venta, que la vendía dando como señal una pequeña entrada, y después el resto, que se podía pagar en cómodos plazos, también estaba revisada con esmero y garantía, según las manifestaciones hechas por el propio dueño, en la propaganda que de la furgoneta había anunciado, que aseguraba que el tal vehículo, se encontraba lo mismo que si fuese nuevo. —Así pues, en los últimos días del mes de Enero, del siguiente año del primer baile que los Humanos hicieran alrededor de la Luna, ensenderámonos la Teresa y yo camino de Oviedo, ilusionados y muy gozosos dentro del ánimo que nos movía, de comprar aquel vehículo, con el que pensábamos mejorar a fuerza de trabajar arduamente nuestra situación harto deficiente. Llegamos al fin en alegrosa compañía a la Casa de Vulcano, pudimos comprobar como en el amplio escaparate de su bien saneado negocio, estaba expuesta la furgoneta limpia y reluciente, con todas las apariencias a primera vista de ser una prenda de primera mano. Sin embargo, si fuésemos capaces de leer el destino, hubiésemos observado como los faros de la hermosa furgoneta, nos parecerían ojos vivos, que nos miraban guasonamente, como si de ante mano, ya se estuvieran mofando de nuestras nobles pero ilusas pretensiones, y a fe mía que nos consideraban una xunta (yunta) de fatones (bobos) que muy pronto iban a caer en las sutiles redes de el gitano de su dueño, que era el timador más despiadado, hábil y deshumanizado, de los muchos que protegidos por la ley, comían el escaso pan del pobre en la ciudad de Oviedo. —Tras mirar un buen rato nuestro xumentu de fierru (burro de hierro) pareciéndonos cuanto más lo reparábamos más hermoso y deseable, decidimos hacer entrada al establecimiento, ya con el firme propósito de hacer nuestra aquella furgoneta, que con la necesidad que nos embargaba nos había por completo sorbido el seso. —Nada más que pusimos los pies dentro de aquella industria del timo y el atropello, presentose ante nosotros sin mediar tiempo, igual que si esperándonos estuviera, un hombre de aspecto muy agradable, que llevaba plasmado en su rostro el maravilloso don de no saber hacerle mal a nadie, por lo que a mi primera impresión yo pude apreciarle, y mirándonos con sus ojillos vivarachos, que al mismo tiempo parecían del todo inocentes, brindándonos una amplia sonrisa, que se extendía de oreja a oreja, y estaba amurallada de una dentadura tan perfecta y amarfilada, que me hizo asegurar que aquel sujeto, no tenía suyo ni un sólo diente. Digo yo que a la par que así nos saludaba, se frotaba sus finas y blancas manos con verdadera insistencia, y así con esta presentación tan capitalista, tan engañadora y confianzuda, nos preguntó con su voz exquisita y halagadora, que en nada desmerecía a sus modales: —¿En qué puedo servir a tan distinguidos señores? —Teresa que era la que llevaba la voz cantante porque era la que tenía el paperío (el dinero), ahpoyándose en el vehículo que le interesaba, díjole sonriéndose dentro de una gozosa alegría que no pasó desapercibida ante la escrutante mirada de aquel granuja de timador de los tiempos modernos: —¡Verá usted, queríamos comprar esta furgonetina, si es verdad todo lo que de ella cuenta usted en el periódico! —¡Sí, verdad es todo cuanto he dicho en el anuncio, no tengan ustedes miedo ni temor alguno al engaño, porque esta mi casa se especializa en haber sido siempre muy formal y seria! —Yo que para nada me entrometí mientras que ellos hablaban, por no cortar a la Teresa que es mujer de larga parpayuéla (muy habladora), a la par que muy enfadadiza y voluble si se le corta la palabra, y como ella era la que relativamente iba a satisfacer la entrada y hacerse responsable de la compra, pues tan sólo me limité a observarles mientras que ellos hacían el trato, y después que terminaron de ponerse de acuerdo en todo, no haciéndome ningún aprecio a mí el vendedor, y creo que hasta me había considerado según mis propias apreciaciones, hombre tranquilo y de mermados arreos, pues como cuento, después de haber cerrado el trato, el Vulcano otra vez envuelto por aquella facilona sonrisa, que en él debía de ser una de sus armas más eficientes, preguntó a la par que se frotaba sus manos lleno de un dichoso contentamiento, que le llenaba de gozo, y no tanto por el dinero que en su trato había ganado, sino por la satisfacción que deduzco sentía, cuando timaba a las gentes con su hábil y exquisita maestría: —¿Bueno... y ahora... quién es el que va a revisar esta maravilla? —¡Quiero decir...! ¿quién va a conducirla? —Yo l’acaidonaréi (conduciré), le contesté a aquel individuo del que ya no me gustaba tanto ni su presencia ni nada que de él emanase, y seguido le pregunté ya siempre dentro de la desconfianza: —¡Y ahora dígame usted! ¿Es verdad que este vehículo se encuentra en buenas condiciones? —Tenga presente y compréndame usted, que esta señora lo precisa para tratar en frutas, y no le vaya a suceder, que si desea llegar con ella dónde se propone, tenga que comprar un burro para que remolque a los dos caballos de hierro, que hacen xuntura (yunta) en la furgoneta, y que por encontrarse quemados de tanto trotar, no les quede fuerza nada más que para hacer la carrera de prueba. —Pierda usted todo cuidado, y no haga con sus ingeniosas bromas menosprecio de mis honrados intereses, que no vivo yo a cuenta de engañar a mis queridos y siempre respetados clientes. Manifestó Vulcano poniéndose muy serio, pero sin apearse en ningún momento de su sonrisa, que por ser tan permanente se hondeaba en la sospecha de ser equivocadora y seguido apuntalóse en hacer su propia propaganda de la siguiente manera: —Mire, no olvide nunca, me dijo Vulcano poniéndome cariñosamente una mano encima de mi hombro, que la Casa de Vulcano, es tan honrada como la misma Audiencia, dónde se reparte la ley castigando y persiguiendo toda trampa e injusticia, por eso yo efectúo mi trabajo, bajo la respetuosa sombra de la justicia. —¿Acaso ha pensado usted que yo soy un gitano? —¡No querido amigo, si en esa desconfianza su imaginación trabaja, siento asegurarle que se encuentra usted muy equivocado, pues todos en esta ciudad me conocen, y saben que soy un honrado industrial respetado y querido, tanto por los rectos servidores de la ley, como por todos los demás que estamos obligados a no burlarnos del eficiente sistema de la justicia, que hace que todo ciudadano se sienta protegido, tanto su integridad física, como los intereses que honradamente le pertenezcan! —Y ya por última vez les aseguro que este vehículo se encuentra en perfecto funcionamiento, y hasta puedo permitirme el lujo de decirles, que pueden viajar con esta estupenda furgoneta, sin la más mínima preocupación, y sin el menor problema posible, no sólo al más apartado rincón de Asturıas, sino hasta la alejada Barcelona, sin que este motorín, deje de funcionar ni un momento, ni se empapice (ahogue) ni una sola vez. Aseguraba Vulcano, centrándose en una encendida adulación hacía su “jumento de hierro", que tal parecía que le estuviese jurando al General Franco, que era él, el más horado y disciplinado comerciante, de toda la nación española. —Yo que ya había comprendido que aquel tipejo era una asquerosa rata que no había veneno que la matase, le dije que estaba muy bien todo cuanto había dicho, y después le pregunté, que si podíamos ir a dar una vuelta con la furgoneta, para asegurarnos, que efectivamente era el vehículo la maravilla que con tanto ardor y fuerza él nos había pintado. —¡No, hoy no puede ser! Aseguró Vulcano, y seguidamente dijo, que antes era menester de asegurarla, y abonar la entrada en el Seguro de la Patria Hispana, entidad que con buen acierto, según él, pastoreaba su negocio. —¡Así qué ahora mismo, vamos a ir la señora y yo hasta dicha agencia, para poner en orden dicho asunto, y pasado mañana ya pueden ustedes circular con el vehículo por dónde les venga en gana! “CUNDU LA TAREXA SE MEXOU DE MIEU” “CUANDO LA TERESA SE MEÓ DE MIEDO” —El sábado por la mañana que era el día señalado para recoger nuestra furgoneta, llegamos la Teresa y yo hasta los reinos de Vulcano con el ánimo plagado de alegría y embargados por una ilusión gozosa, pues íbamos a ser dueños de un vehículo, que nos permitiría sin ningún genero de dudas, llegar hasta los mercados más apartados de la Tierrina, y mejorar en el oficio de xabarceirus nuestra situación harto oprimida, tantas cuentas habíamos ya barajado y todas ellas navegantes en alegrosas ganancias, que creído nos teníamos que íbamos a ganar el oro y el moro, que incautos éramos que no nos detuvimos ni por un sólo momento en el pensar, que el que hace las cuentas adelantadas sin tener dineros para cubrirlas, por fuerza que tiene que hacerlas un par de veces, siendo la última la más válida. —Digo yo que cuando llegamos al escaparate dónde se lucía nuestra furgoneta, ya estaba al lado de ella el Vulcano, y tal a mí me pareció, que cuidaba a ésta con tanto mimo, como si fuese industriada en la herrería del mitológico dios que lleva su nombre. —Y a la par que nos saludaba con la misma sonrisa y frotamiento de manos que en anterior ocasión nos había dedicado, con su bien timbrada voz nos dijo, ocultando una guasa que no se me paso desapercibida: —¡Ya les estaba esperando señores, pues yo se muy bien por la larga experiencia que poseo en estos menesteres, que iban a ser ustedes muy puntuales, como corresponde a todas las gentes que arden dentro de los agradables deseos de hincarle el diente, a lo que de antemano han saboreado como manjar sabroso! —¡Así que aquí tienen ustedes la documentación y todos los requisitos necesarios para poder circular con la furgoneta sin que nadie les moleste. Y ahora sólo me queda desearles buena suerte, tanto en los viajes que emprendan, como en los negocios que puedan hacer, que en estos está precisamente el valer de las gentes! —Hicimos muy satisfechos y animados acomodo la Teresa y yo dentro de los dos caballos de hierro, dejando al que resultaría ser un astuto gitano, frotándose sus manos, y sonriéndose tanto para afuera como para sus podridos y asquerosos adentros, festejándose dentro del timo que terminara de hacernos. —Empezó la furgoneta a rodar dirigida por mí que no cabía en mi gozo de contento, por las calles de Oviedo abajo, con ánimo de alcanzar la carretera general y ensenderarme en la ruta de Gijón o Avilés, dónde pensado tenía probar aquella máquina, vendida por el que resultaría se el mas fino gitano, que timaba sin conciencia a las pobres gentes, sin encontrar jamás a un juez, que hiciera con él el escarmiento que años atrás había hecho Juan Antonio el falangista con Pascualín el de los enredos. —Teresa que iba sentada a mi lado, recostada cómodamente en aquel asiento, que tenía más pringue que la solapa de un mendigo a la salida de un frío invierno, me dijo endiosada de alegría por sentirse dueña de aquel maravilloso ingenio: —¡Este Vulcano tiene cara y presencia de ser una buena persona, de ser un hombre bondadoso y bueno, a par que sabe lucirse con su cautivadora sonrisa, en el agradable lugar de la educosa simpatía, la verdad que a una le presta en grande tratar con señores tan serviciales y educados. Hay que ver la finura y delicadeza que este buen señor conmigo se gastó, me trato lo mismo que si fuese una gran señora, no me cave duda que todo en él se dibuja como un caballero respetable y encantador, tan bien parecido, tan elegante, tan guapo, tan... En aquellos momentos unos empapizamientos harto sospechosos en el motor de nuestros dos caballos hízole a la Teresa hacer un descanso en el continuar ensalzando los engañosos enseñares de su hábil timador, y en la sazón que su alborozada alegría íbasele marchitando por el ya continuo pedorreo que alumbraba sin interrupción el motor, preguntóme muy apuradamente, haciendo aposiento en el lar de la nerviosa y asustadiza preocupación: —¿Per quéi demontres s’afuega la miou forgonetina que tantu se queixa Xuliu? —(¿Porqué demonios se ahoga mi furgoneta que tanto ruge Julio?). —Yo que ya sin ninguna duda empezaba a olerme el fino timo, que el cobarde y sucio Vulcano hubiera ordeñado en nuestro enflaquecido bolsillo, contestele arrugando el ceño, poniendo un gesto rabioso y despreciativo, buscando en mi imaginación con prisa, la forma de centrar en ley, aquel moderno y educado gitano de los jumentos de hierro de nuestro tiempo: —Me parece Teresa, que dentro de breves momentos, vas a ver dentro de tu cerebro, a ese encantador, respetable y guapo Vulcano, que no hace ni un minuto no tenías tu boca para aponderarle, te aseguro que le vas a ver del mismo despreciable color del diablo, y esto es así, porque esta furgoneta comienza a quejarse de una de sus muchas mortales heridas, que será con seguridad la más pronunciada de cuantas tiene. —¿Qué es lo que pretendes decirme Xuliu? Preguntó de nuevo Teresa ya ausente de toda alegría, empezando a subir la primera escalera del miedo del desespero. —La verdad Teresa, es que viajamos ajinetados encima de un montón de chatarra, por esta razón he de ir con buena cuenta hasta que de hecho me dé por sabido, qu’acaidono (que dirijo) una maquina, que ha puesto en mis manos ese desalmado de timador de Vulcano, que está predestinada sin ningún género de dudas, hacer en cualquier momento descalabros con las vidas de la inocente gente, que a cada paso cruzamos. —Ya nos hallábamos en las afueras de Oviedo, y comenzábamos a bajar una pequeña cuesta que existe a la entrada de la Corredoria, cuando un bache de los muchos que alumbrábanse por aquel entonces en la carretera, hizo que la dolorida furgoneta se bandaleara ostensiblemente, y en tal baile, abriéronse con verdadero estruendo ambas puertas, despedazándose los cristales y estropeándose en mala manera parejas portezuelas, con tal atronador ruido, que la buena Teresa encogiéndose en el asqueroso asiento, cosida por un miedo que le hizo mearse, dijo temblándole su voz que era dominada por su espantoso miedo: —¡Frena, frena en el instante Xuliu, por todos los demonios del infierno xuntus (juntos), consigue de una vez que se detenga esta asesinadora chocolatera, que bien me parece que intenciones le sobran de hacer mudanza con nuestras vidas, fayéndunus esfuechiquéus na peyeya! (haciéndonos desolladuras en el pellejo). —Hice con toda la rapidez que pude, que se detuviera aquella furgoneta tan destartalada, y al pretender asegurarla mejor con las miras de apearnos para presenciar los primeros destrozos que se rellumbraben (relucían) en aquella infernal máquina, así el freno de mano y tiré de él para colocarle en su lugar de frenada, pero no respondió a su obligación, pues rompiéndose, quedeme con la manilla entre las manos, pensando ya con toda la razón del mundo, que aquella máquina era la causante de un timo que no tenía perdón, y también poseía hechura de ser un perfecto sabotaje. —Teresa que ya se había apeado de la furgoneta movida por la rapidez que injerta el miedo, hallábase en la cuneta de la carretera hilvanada por un ataque de nervios, con sus manos puestas encima de la cabeza, centrada en el más airado desespero, envuelta en un mar de lágrimas miraba para su vehículo desilusionada y atormentada, no dando crédito a lo que presenciaba, que era a todas luces la ruina más grande que en toda su existencia le había caído encima, pero cuando me vio con aquel fino hierro en forma de manilla en mi mano, me preguntó al tenor que buscaba en su boleo un pañuelo para enxugarse (enjuagarse) las lágrimas: —¿Qué diantres de fierru ye ísi Xuliu? —(¿Qué demonios de hierro es ése Julio?). —Yo que reparaba con verdadera lástima a la Teresa, al mismo tiempo que se me escapaba la risa, y el caso no era para menos, le respondí mirando para la manilla a la par que movía la cabeza para los lados con síntomas de verdadero desprecio y asco, hacia aquel gitano timador de Vulcano: —¡Poca cosa Teresa, sólo un defecto más de los muchos que tiene este jumento de hierro que te vendió tu encantador Vulcano! ¡Vaya una rata de cábila que está hecho tu simpático timador! ¡Y ahora deja ya de chorar (llorar), y no le reclames al Cielo un favor que no ha de enviarte, y búscame con rapidez un par de cuetus (piedras), para forrar las ruedas de esta endemoniada chocolatera, con la que el tú fino señor Vulcano, por mediación de mis inocentes manos, pretendía industriar un achuquinamientu (asesinato) entre las tranquilas gentes de la ciudad de Oviedo! —Teresa atenazada por una incontrolable rabia que le raguñaba (arañaba) sus doloridas entrañas, dijo a modo de juramento clavando sus brazos palabras en el firmamento: ¡No me nomes más isi rapiegu con focicu de llabascu, non me lu nomes más, si ye que apreciesme dalgu, ya permita el Faedor que tou lu puéi y'escosá couxa fae, que lu fienda una centecha pente les pates en dos Vulcanus! —(¡No me nombres más a ese zorro con hocico de marrano, no me lo nombres más, si es que me aprecias algo, y permita el Hacedor, que todo lo puede y muy poca cosa hace, que lo parta una centella por entre sus piernas en dos Vulcanos!). —¡Nunca pensé yo que pudiese vivir en este mundo un ladrón tan desalmado y tan grande, que hace su riqueza y bienestar engañando a pobres viudas tan desventuradas como yo, que no tengo más riqueza que el Cielo sobre la cabeza y la insegura tierra bajo mis pies, y para encima de no tener nada, todavía me acompaña la triste desgracia de tener que pagar a Pilar la del Comercio las quince mil pesetas que me prestó para dar la entrada de esta endiablada furgoneta. Poco he de pedir y menos Justicia ha de haber, si a este zorrastrón, si no me devuelve los mis cuartos, no le busco una buena corripa (celda) en la cárcel. Y no sólo por el cobarde ladronizo que me hizo, sino por el pretender arrancarme la vida, y dejar a los mious protetayus fiyinus (mis pobrecitos hijos), sin el menguado pan que puedo proporcionarles y el grande cariño que por ellos siento! —No te alumbres por más tiempo en el lar del sufrimiento Teresa, pues más bien debías de ofrecerle gracias al cielo, porque permitió que nadie saliese con heridas de este descalabro. Y ahora si haces caso de lo que yo te aconseje, va tener que abonarte este despreciable de timador gitano, el dinero que le has entregado, y que se haga cargo de la furgoneta, y sino que la arregle con la decencia que encierra el caso. —Esto le decía yo a la Teresa, a la vez que valiéndome del cinto que sostenía mis pantalones, y de un precioso lazo de terciopelo que la Teresa llevaba anudado a su largo cabello, ataba entrambas portezuelas para poder salir del paso, y cuando mañosamente lo logré, díjele a la Teresa que aún seguía tan desconsolada, y lucíase aún más rabiosa que cuando nos sobrevino el accidente: —¡Güenu Teresa, deixa ya de mexaretar tal corrompináu de chárimes que v’escosásete la fuercia pel furacu lus güeyus (bueno Teresa, déjate ya de mear tantas lágrimas, que se te va a escapar la fuerza por el agujero de tus ojos), y súbete a la furgoneta que nos vamos a ir hasta Noreña a visitar el garaje de un conocido mío, para que revise a conciencia este endemoniado ingenio, y nos diga de una vez, las hendiduras que tiene ocultas esta chocolatera que nos ha vendido el timador de Vulcano. —Teresa que en esto ya se había serenado un poco, aunque todavía alumbrara algunas rebeldes lágrimas, dijo dentro de su maurera de miéu (madurera de miedo): —¡No me ofendas, no lo hagas por el amor que le tengo a la santina de Covadonga, no me tientes por el mismo hacedor que debe de estar riéndose de mi allá en su Cielo, no me empujes para que haga lo que no deseo Xuliu. Pues no me sentare dentro de esa infernal máquina de asesinar gente, ni por todo el oro que tiene el Banco de España almacenado en forma de relucientes y apetitosas barras, y mira que es abundante lo que el otro día nos enseñaron por la Televisión sus manejadores. Vete tu sólo si deseas morir donde te plazca, ya que nada más que tu pobre vida tienes que perder, pero yo tengo tres hijos inocentes y pequeninus, que cuélgame con grande fuerza de las entretelas de mis sentidos, no quiero morirme y dejarlos desamparadinos, a merced de este endemoniado mundo, que cada día me parece que tiene menos verdad y menos justicia, que cada día me parece que el pobre dentro de él, si suprimimos las calamidades y las sufriencias, tiene muy poco que hacer. ¿Qué sería de los tres pedacinos de mi corazón, si se quedaran si su madre, en la triste edad que los probitinus aun no saben de dónde comen? (EL GARAXISTA) "EL GARAJISTA" —Por muchos razonamientos que sostuve con Teresa para convencerla con el fin de que me acompañase, no llegué a persuadirla ni en lo más mínimo, pues todas mis razones nada valían, para vencer el miedo que en aquellos desventurados momentos la dominaba, y no consiguiendo ni de una forma ni otra que subiese a la furgoneta, encaminome yo sólo hacía Noreña, al cansino paso de los viejos jumentos de los antiguos gitanos, conduciendo aquel destartalado ingenio, que era en verdad un innegable peligro público. —Llegué a la postre a mi destino, y contéle sin demora cuanto me había sucedido al garajista por mí conocido. Este esperó unos momentos para que se desfatigase el cansado ahogado motor, después volviéndole a poner en marcha, escuchole atentamente el trote quejumbroso que alumbraba, y seguido dio comienzo con seguro tiento a desmontarle algunas de sus piezas, y cuando le encontró las variadas enfermedades que tenía, dijo envuelto su rostro en una sonrisa que podía tener todos los significados: —Desde luego amigo mío, no sé como has sido capaz de llegar desde Oviedo hasta aquí con esta chocolatera, suerte has tenido de no partirte la sesera por el camino. ¡Tuvo que quedarle la conciencia “si es que la tiene” a ese gitano de Vulcano harto desajustada, porque hay que tener muy poco amor hacía el prójimo, y ser un timador sin la menor entraña, para vender un coche en las condiciones que se encuentra éste. Ahora que tratándose de Vulcano no me extraña en absoluto, ya que todo el mundo sabe en Oviedo la clase de elemento que está hecho! —Ten presente, y esto que te voy a contar ya lo he discutido muchas veces con otras personas, que algunas de las desgracias que suceden en las carreteras es por culpa de estos timadores gitanos de los jumentos de hierro, que venden coches usados, que son verdaderos cacharros que ni para el desguace sirven, y lo peor de todo, es que saben hacer de la ley un pandero, y enriquecerse a cuenta de las inocentes gentes, que no comprenden en el peligro que se divierten cuando compran un vehículo usado, pero todo esto ten por seguro que algún día ha de terminarse, cuando algún juez con buen ingenio, colóqueles un anillo que encarcele ya para siempre sus astutos timos, con una nueva ley para tal menester, que todavía nadie ha creado. —Bien dices amigo mío, pues todo este ladronizo y peligro público que tenemos todos de perder en cualquier momento la pelleja en la carretera, por la causa de estos desalmados gitanos de los jumentos de hierro, silenciárase d’afechu si la ley les castigara y persiguiera con más entusiasmo. —Recuerdo que cuando yo era pequeño la ley perseguía y castigaba a los gitanos que en aquella difícil época había sin tener la más mínima consideración con ellos. Y todo era, porque aquellos gitanucos de los tiempos d’endenantes (de antes), eran pobres de toda riqueza y ciegos de toda cultura, pues aquellos desarropadinos y desventurados gitanos, por muy listos que se alumbrasen, no podían hacer grandes cosas, y por eso vivían tirados por los caminos, despreciados por las gentes y perseguidos en todo instante por una ley que no les dejaba de su mano ni a sol ni a sombra, arrastrando cansina y resignadamente sus estómagos cosidos por el hambre, enseñando un color cadavérico en sus huesudos rostros, por el que uno imaginaba a la negra hambre a la que estaban condenados siempre, luciendo sus vestiduras con tantos y dispares remiendos, que uno no lograba adivinar, cual de ellos pertenecía a la prenda original. —No podían crecer aquellos auténticos gitanos que yo he conocido nada más que en asustadizas carreras y crecidas barrigadas de frío y hambre, y algunas veces solían entrar en calor, cuando les aplicaban una supliciada albarda de vergajazos, que las autoridades les regalaban encima de sus enflaquecidos cuerpos, todo porque a lo mejor un aldeano que muy fácil fuese el mismo ladrón, daba cuenta de ellos, a las autoridades al notar que les faltaba alguna gallina, que muy fácil pudiera habérsela merendado el raposo, o ser equivocados en el trato de un jumento de los naturales, no como estos endemoniados ingenios de fierru (hierro), siendo tan entendido en estas bestias el aldeano como el gitano, y aquí si que no valía engaño, porque cada cual iba a su propia conveniencia, porque cuando un aldeano le cambiaba un burro a un gitano, es que su pollino alguna tara tenía, por esto, no he conocido nunca a un gitano que cambiase su burro con el aldeano pelo a pelo, sino que siempre le pedía encima algo, ya que estas gentes agudas y listas sabían, que la única ganancia que conseguían por lo regular en sus tratos, eran los pocos o muchos dineros que pudieran arrancarle al aldeano encima del cambio. —Poco mal podían hacer aquellas pobres y desgraciadas gentes dignas de toda compasión y lástima, y mermado mal sembraban entre las comunidades que visitaban, porque en todo tiempo vivían cultivando la más denigrante de las miserias, que por ellas se deducía el escaso timo que industriaban, pero a pesar de todo, nadie los dejaba nunca fuera de una celosa vigilancia, de lo que se saca en consecuencia que la ley en aquella difícil época estaba mucho más adelantada que hoy en día, por donde uno comprende que en nuestro país, todo ha progresado grandemente menos la asiste de la Soberana Justicia, que para castigar al pobre siempre sí está en vanguardia, pero para favorecerle siempre se encuentra de veraneo en la retaguardia del capitalista. —Y sino la prueba está bien a la vista, ya que los temidos gitanos de nuestro tiempo, no son otra cosa nada más que astutos y deshumanizados payos, que ya no llevan marcado en su rostro el ceniciento color del que navega con el hambre, sino que se pasean bien hartos y cuidados, envanecidos por su boyante posición, tanto en lo social como en lo económico, ya que gran parte de ellos, precisamente los más principales, son poseedores de una buena carrera que al final les otorgó el título con el cual se avalan en el asqueroso oficio de la explotación y el timo, que faenan a diario entre las humildes y trabajadoras gentes, bien como dirigentes de empresa, engañosos servidores de la Justicia, etc., y también estos timadores gitanos de última categoría, cuyo único representante por mí conocido es el guripa de Vulcano que ya empieza a traerme de cabeza. Pero yo te aseguro Marcelino, que si la Teresa me hace caso de lo que yo tengo barajado en mi mente, no se ha de escapar este raposo de Vulcano haciendo risa y guasa despreciativa de los honrados intereses que les roba a las personas decentes, pues en este presente acaecer se topó con un cliente, que le va hacer coscas (cosquillas) en el lugar donde no ha de nacerle la risa. —Y ahora... dime Marcelino, tu que eres un hábil veterinario en la cura y compostura de estas caballerías de hierro. ¿Cuánto puede costar arreglar esta furgoneta para que quede decentemente? —Quedose el bueno del garajista mirando unos instantes en el más completo silencio hacía el cielo, haciendo con aproximación las cuentas en su cerebro, y después dijo muy serio clavando sus inteligentes ojos encima del jumento de hierro: —Te ha de costar alrededor de unas ocho mil pesetas, tal vez sea algo más, eso depende si al desmontarla aparecen otras averías que ahora no agüeyu (no veo). Pero no pienses ni en broma que el Vulcano va hacerse cargo de esta arregladura, pues yo se que él, sabrá lavarse sus manos no queriendo pagar ni un céntimo, y es inútil que le lleves a los tribunales, ya que él es un gitano listo, que tiene buenos abogados y harán de la ley su propio juego, y estoy por apostarte que es muy capaz de timar al mismo juez en la sesión del juicio, si tiene modo de venderle uno de sus endemoniados ingenios. —Por lo que observo Marcelino, tanto tú como yo mismo coincidimos en, que la ley en nuestra Patria está al servicio del dinero, que es tanto como decir, que el que no tiene un cuarto no debe de meterse en líos por muy honrados que le parezcan, porque no ha de sacar de ellos nada más que disgustos por bien parado que salga, en fin, ya veremos haber lo que resulta de todo esto, yo ahora me voy para Oviedo, y tu no arregles este cacharro hasta que la Teresa no sostenga una conversación con el raposo del Vulcano, pues a lo mejor, este habilidoso gitano no es tan mentecato como lo hemos pintado, y puede que se compongan las cosas sin necesidad de ningún otro teatro. El garajista sonriéndose ladinamente a la vez que de mí se despedía me dijo: —¡Si tales esperanzas hacen aposento en tu imaginación, no sé lo que en verdad has aprendido tú en el mundo, tanto como por él zapatillaste, pero bueno es que sigas creyendo en la bondad de las gentes aunque tan sólo sea por breves instantes! —¡No creo yo en nada ni en nadie Marcelino, a no ser en el plato de cocido cuando tengo hambre, pero hácete buena falta a ti saber, que existe un sistema que todo el mundo receta cuando le conviene. Así por ejemplo, sabemos que Vulcano es un timador inteligente y práctico en el asunto de saber defender sus enredos e intereses, por esto se dará cuenta en el instante, de la peligrosa timadura que industrió, por tal razón procurará que no se airee su sucio negocio, para que las futuras víctimas no huyan a causa del mal olor que emana de la ladroniza industria que maneja. Por esto, muy fácil creo yo que se avenga a razones! —¡Puede que tengas razón, amigo Julio, pero yo no entraré a creer tal cosa, hasta que no lo vea con mis propios ojos! “TERESA Y VULCANO” —El lunes bien de mañana se hizo en el camino de Oviedo la envilecida Teresa, portando en su cerebro los asesoramientos que yo le había prodigado, mucho me hubiese gustado a mí entendérmelas con aquel desalmado granuja, pero como yo no había tenido tratos con él, sólo podía hacer aconsejar a la Teresa en lo que mejor pudiese. Digo que iba ésta alumbrando en sus sentidos rabiosa inquina hacía el Vulcano, pero no era la Teresa tan aunque valiente y decidida engarradietchóusa como la Manola de mi aldea, pues si así fuese, hubiese logrado más provecho que usando la política, que al fin de cuentas ésta de poco sirve cuando con ella menester es por entrambas partes defender los intereses. Llegó al fin la Teresa a la casa del Vulcano, tan dolida y gafa en su desgracia que debatíase con apremiante desatino en el atajo de prepararle un sonado escándalo, si no conseguía lo que ella consideraba justo y honrado. El caso fue que nada más que sus enrojecidos ojos encarnispados por la ira que la desacompasaba retrataron al causante de su desgracia, díjole encasquillándosele la lengua por la rabia que la dominaba: —¡Vengo a darle las gracias estafador de los infiernos por la furgoneta que me ha vendido, que tal de endemoniada se encontraba, que por eso me brindó la mayor cosecha de miedo que he tenido en toda mi existencia. Porque me he visto por unos instantes ajinetada encima de una satánica máquina, que parecíame había sido fabricada por todos los diablos del infierno juntos con el firme propósito de servirle a usted, para que por su mediación me robase mis dineros y me quitase la vida. Hay que ver la poca vergüenza que usted tiene, y la nada consideración que siente hacía las personas, para venderme un vehículo portador de la muerte, y quedarse usted tan tranquilo, como si de malo no hubiera hecho nada. —Vulcano, sin deshacer de sus labios la hipócrita sonrisa que le caracterizaba, díjole tranquilizadora y prometedoramente a la Teresa: —¡Bueno señora, no se me enfade, y céntreseme en el respeto, ya que en este civilizado lugar se consigue conmigo la razón que según me parece es lo que usted anda buscando. Y ahora cuénteme con entera tranquilidad todo cuanto le ha sucedido, que yo por adelantado le prometo arreglarle su vehículo sin cobrarle ningún dinero! —Estas palabras bien dichas y a tiempo por el ingenioso Vulcano, entrelazadas con teatrales gestos de compasión y condolencia, que con postura de consumado actor plasmaba en su rostro y movimientos aquel timador de gitano, pues como cuento, con todo este ratonil teatro logró que los encendidos ánimos de Teresa, abandonaran el envilecido aposento dónde moraban, e hicieran andadura más alegrados por el camino de la contentura, que no era otro que el haber conseguido lo que en justicia le pertenecía. Así pues ya más aplacada la encendida voz de Teresa, en el lleldar que hacía asomo en su boca una alentadora sonrisa, le dijo en el comienzo de estar de nuevo tranquila: —Tiene que perdonarme por haberle ofendido con mis insultante palabras señor Vulcano, pues yo quiero que comprenda que si usted se hallara en mi lugar, muy fácil se desarrendara como yo en tamaño desatino. Y seguidamente le explicó al Vulcano que no podía remediar que la risa aflorara con verdadera alegría, el corto y accidentado viaje que habían hecho con la furgoneta. Y al concluir la Teresa de relatarle su odisea, respondiole el Vulcano con una amabilidad,que tal parecía que alumbrábase en ser cierta: —Créame señora si le digo, que no hay sitio en mi conciencia para poder hacerle el más pequeño daño a nadie, y con toda sinceridad le prometo, que este doloroso descalabro que quizás por un error mío usted ha sufrido, yo haré que con prontitud se mude al sitio que para ambos mejor convenga. Y ahora mismo ordenaré a mis mecánicos, que sin ninguna demora vayan a recoger su vehículo a Noreña, para que le revisen y arreglen en mi garaje, que sin lugar a dudas ha de quedar mejor compuesto, y acomodárseme en un precio más justo, que si lo arreglasen en otro lugar, ya que yo no me fiaría de ningún otro garajista, supuesto que son todos tan careros como chapuceros. —Y ya no más tristezas ni penas señora, pues ninguno de estos dos sentimientos nace feliz al entendimiento, así que destierre sin demora el mal que en su espíritu se enreda, ya que muy pronto será atajado para convertirle en beneficio de su propio remedio. Y sitúese ya desde este preciso momento dentro de la placida pradera de la tranquilidad, considerando ya por adelantado solucionado a su agrado y conformidad este asunto que la atañe, y dentro de tres días puede venir a recoger su furgoneta, en la inteligencia de hallarla como si otra vez fuese hecha de nuevo. —En el día señalado por Vulcano, volví yo acompañando a Teresa a recoger su vehículo, y al lado de él como en anteriores ocasiones se encontraba Vulcano con la misma sonrisa de siempre pintada en su hocico, y frotándose sus manos como al parecer era su costumbre, dijo amablemente: —Ya tiene su vehículo compuesto señora, y muy bien ajustado que por cierto se encuentra ahora, ya que le canta su motorín, con parecido sonar al que tuvo cuando era nuevo. —Muchas gracias señor Vulcano, contestole con rapidez y alegría Teresa, lleldándose en satisfactoria dicha que retornaría a la rabia a los breves momentos. —¡No señora, no me dé usted las gracias pues para esto estamos, que no es otro menester que servir al cliente y dejarle satisfecho! —Pero ahora... y créame que lo siento con toda mi alma, tengo que comunicarle una noticia que no ha de serle en nada agradable, pero comprenda usted que por encima de todo los negocios son los negocios, y si yo no los cuido, aunque eso sí con toda honradez, creo que algún día terminaría pidiendo. —¡Dígame señor Vulcano! ¿Qué clase de contrariedad es la que me tiene que comunicar ahora? —Pregontó Teresa ya en las empinadas vías de perder de nuevo su alegría y tranquilidad, y floreciéndole en el mismo lleldar una apesadumbrada tristeza que le decía, que todo su gozo iba a ser de afechu desfechu (del todo deshecho). —Pues... verá usted señora, los mecánicos me han dicho (dio comienzo Vulcano a su charla pretendiendo muciye "ordeñarle" importancia a la cuestión), que toda la culpa de haberse estropeado la furgoneta, sólo la tiene el chofer que la conducía, que según ellos está muy deficiente en el oficio de conducir estos vehículos. Así que dentro de toda la pena que a mí me acompaña, y no crea usted que es pequeña, tengo que comunicarle que si desea llevar su vehículo, tiene que abonarme la mitad de su compostura, y si no le retira en toda esta semana del garaje, me veré obligado a cobrarle como demasía, el espacio que ocupa la furgoneta en el taller, ya que están los aparcamientos hoy día al precio que uno quiera cobrar por ellos. —Teresa tras escuchar las asquerosas e hipócritas palabras que le había sonrientemente dirigido Vulcano, comenzóle a crecer en sus entrañas la cosecha de la gafez, a parejándose en fuerza y desespero a la que ya padeciera el día que había viajado por primera vez en aquella furgoneta de todos los diablos, y conducida por este envenenador desatino, no me dejó a mí contradecirle al Vulcano la acusación que me había hecho, ya que cogiendo ella la palabra airada y medio enloquecida, hablole de la siguiente manera: —Me parece a mí condenado timador gitano de todos los infiernos, que no tiene usted de hombre, ni palabra, ni presencia, ni tampoco nada. Todo en su persona esta asquerosamente podrido, y en conjunto toda su valía como hombre, tiene menos valor para la decente Humanidad, que un repugnante pioyu (piojo), entre las uñas de una eficiente despioyadora (despiojadora). —¿Sabe usted acaso condenado ladrón y despreciable llimiagu (baboso), que destreza tiene mi chofer en este oficio para tratarle con tanto menosprecio? —¡Síii... por lo que me han dicho los mecánicos, no tiene ni idea, de lo que es manejar un vehículo! —¡Pues sepa usted asqueroso madrazas, y apestoso gusano de timador, que mi chofer, que es este muchacho que usted ve aquí, que no quiere dirigirle la palabra por no ensuciar su lengua al contacto con su mierdosa presencia, aparte de ser un conductor que en nada puede envidiar al mimísimo Fangio, es también un excelente mecánico, con ingenio suficiente de hacer que ruede un coche si preciso fuere tan sólo con la invisible fuerza que tiene el aire, y si le apuran un poco, hasta que vuele como los aviones! —¡Bueno señora, haga el favor de no ofenderme, sino quiere que llame a la autoridad para que le enseñen los modales necesarios que se necesitan para tratar con la gente. Y tenga también bien presente que yo no he ofendido a este muchacho en nada, lo que yo he dicho es que no sabe conducir como es debido un vehículo. Y no crea que me extraña, porque hoy en día, le dan el permiso de conducir a cualquiera que tenga la agudeza de entregarle solapadamente dos o tres mil pesetas al jefe de tráfico! —Y ahora ya para terminar, si no quiere pagar la compostura que se le hizo a su furgoneta, no la lleva usted de aquí bajo ningún concepto, y si cree que tiene algún derecho para formular alguna reclamación, encamínese al Seguro de la Patria Hispana, y entiéndase con ellos de la manera que mejor le cuadre, ya que esa aseguradora a mí ya me ha abonado todo el valor de la furgoneta, y a usted por si se le ha olvidado le digo, que tiene que abonar las letras de banco que ha firmado en blanco a ellos no a mí, así es que yo me lavo las manos en este asunto lo mismo que hizo el romano Pilatos en el Juicio que condenó a Cristo. —Teresa acunada por una enloquecedora rabia que la hacía temblar sacudida por los nervios emanantes de la ira, la rabia, el desprecio y el odio que sentía hacía aquel miserable, le decía mientras que yo procuraba de aquel lugar alejarla sabiendo que nada lograría resolverse: —¡Lo que tiene que lavar usted sin hacer demora es su conciencia que la tiene más negra que la boca de un sanguinario lobo, y tiene un olor más repugnante y asqueroso, que el que producen las podridas inmundicias de un apestoso estercolero. No sé como tiene valor para lucirse entre las gentes, siendo portador de ese nefastoso olor que en todo momento de usted se desprende, por el que todo el mundo puede comprender, la clase de cobardoso timador que se esconde en su enclenque cuerpo! "TERESA Y LA ASEGURADORA" —Es para mí un triste desconsuelo decir, que todo o casi todo en mi Patria lo relacionado con el comercio y otras industrias similares, es una grotesca trampa mal urdida, pero muy bien protegida por las leyes del país, que ya desde antiguo saben que todo se mueve por la fuerza de la riqueza y el poder, y entrambas cosas no están en el poder del pobre, por lo tanto este desventurado ser, por mucha razón que le acompañe siempre llevara las de perder, ¡ y sino que me lo pregunten a mí! —Así pues, que dejando la Teresa al timador de Vulcano haciendo risas y guasas de su desgracia, se dirigió con la prisa del alma que lleva caminaba el diablo, y en aquellos sus momentos tan endemoniada caminaba como el mismo satán, por mor de la condoliente desgracia que le acompañaba, al lugar donde tiene aposentadas las oficinas la Patria Hispana, y subió las escaleras de dos y sin dar ni tan siquiera cuenta, se encontró ante la presencia del señor notario, al que le explico muy desconsoladoramente el timo que en ella había realizado Vulcano, al venderle aquella furgoneta, que tenía más heridas por todas sus piezas, que el heroico Millan Astray, que fue el Fundador de la Legión Española, dónde si el Vulcano tuviese la valentía y el coraje, que por ser un despreciable cobarde le faltaba, digo que si este despreciable timador como legionario ingresase en ella, no viviría allí mucho tiempo, pues entre el “saco terrero”, y los vergajazos que los vigilantes del Pelotón de Castigo, le brindan a las gentes de su condición y calaña, terminarían con tal carroña humana en poco tiempo. —¡Hay de él si lo cogiese por su cuenta y riesgo el famoso sargento Molina, que en cierta ocasión a un legionario, por tan sólo robarle una camisa a un compañero, diole palos encima de sus costillas hasta que se le hundieron sus pecadores huesos, y después que sanó de tal descomunal paliza, colocóle encima de sus aún doloridas espaldas un saco terrero de cincuenta quilos amarrado con recias correas!, con un letrero que más o menos así decía: —¡Yo soy un ladrón, despreciadme todos por tener el oficio más asqueroso de toda la Humanidad! —Y con dos letrerinos como éste, uno en la espalda y otro en el pecho, tenía que caminar Vulcano por todas las calles de Oviedo, para que supieran toda la cuadrilla de compañeros de su calaña, que hay a fatáus (muchos) que vivían como marqueses y se las dan de personas decentes, el vergonzoso fin que tendrían si no dejaban de robar. —El tal notario que como se verá tenía las mismas nefastosas zunas de engañar a las gentes que su consorte de oficio el timador Vulcano, sonriéndose de las graciosas y muy atinadas ocurrencias de Teresa le dijo: —Tenga bien presente señora que nosotros nada tenemos que ver en este asunto, pues toda la culpa de cuanto le ha acontecido, sólo la tiene el señor Vulcano, así que si usted considera que efectivamente fue engañada como manifiesta, reclámele o denúnciele a él, y deje de molestarnos a nosotros, ya que en vez de importunarnos con esta historia sin ninguna importancia para esta sería aseguradora, mejor sintiera usted hacia nosotros un sincero y respetuoso agradecimiento que sin conocerla de nada, le hemos prestado a usted los dineros para que comprase a Vulcano ese vehículo que usted comenta, que a no ser por nuestra desinteresada y magnánima colaboración, no hubiese podido hacerlo, a no ser que se la pagase con dinero en mano. —Cuando Teresa sintió de labios del notario estas palabras le miró entre temerosa y asombrada y preguntole pensando que o había entendido mal, o desde luego se estaba volviendo loca y ya no razonaba: —¡Oígame señor! —¿Me ha dicho usted acaso que me han prestado ustedes a mí dineros sin yo saberlo? —¡Sí señora, eso mismo le he dicho, y no tiene usted de que asombrarse, ya que es una cosa común y muy corriente, nosotros simplemente le hemos abonado al señor Vulcano el valor de su furgoneta, haciendo uso de unas prestaciones modernas que dan a todo negocio un buen resultado! —Diose cuenta la Teresa por primera vez, del teje maneje nada claro que entre manos se traían el hábil timador Vulcano y la no menos honrada Aseguradora, por esto, haciendo un gran esfuerzo para remansar su alterado espíritu, le dijo al notario viviendo el mayor asombro que en toda su existencia conociera: —La verdad quisiera decir pero no sé como explicarla, porque no puedo precisar, dónde termina la mentira y comienza la verdad, porque si ésta existe, la pobre anda bien desgraciada, ya que esto que me está sucediendo a mí, que es verdad siendo mentira, paréceme a mí, que está muy fuera de toda Justicia, pero dentro de la ley que ustedes bien estudian, para robar sin el menor temor a todo pobre desgraciado. —¿Qué pretende decirme usted señora? —Preguntó el notario empezando hacer acopios de enfado. —Que si no me sucediera a mí misma, lo que con ustedes me está pasando, no creería que a nadie pudiérale acaecer tan endemoniado enredo aunque el mismo Padre Santo me jurase con la mano puesta encima de la Biblia que todo este desalmado engaño, era tan cierto como la propia Pasión del Nazareno, que el Pobre murió, para que otros listos como ustedes, hiciesen de su muerte un buen saneado negocio. —Porque tanto ustedes como éstos, tienen una forma de prestar tanto el dinero como la gloria del Cielo, que uno no se entera que la ha recibido, hasta que no le roban lo mucho o poco que posea el crédulo. —Bien comprendo ahora que hállome ahogada dentro del teatro de la discordia, y estoy enflaquecida de riquezas y seca de poderes, que el primer tejedor de la ley, fue en el mismo instante encaldador de la trampa, y en esta despreciable xaceda (cama), barajan ustedes como consumados timadores el mal que trenzada me ata. Por esto desde ahora mismo, jamás se me borrará de mi imaginación, que tanto ustedes como el zorramplón de Vulcano, son lobos de la misma camada, con diferente color, dibujadores de bien parecidos santos, pero con la misma conciencia del despreciable diablo. —Pero señora, de nuevo le vuelvo a repetir, que nada tenemos nosotros de ganancias en los tejes manejes que industria el señor Vulcano, y ahora si me quiere escuchar unos momentos, yo le explicaré con toda la claridad como funciona el honrado negocio de la Patria Hispana, para que ya de una vez y por todas, se quede convencida, y no perjudique a esta Aseguradora con su pregonar que somos tan estafadores como el señor Vulcano. Dijo el notario con seriedad y conciliadoramente. —No hace falta que desgañite su lengua en más araneras explicaciones, ya que los enredos que entrambos y dos se traen, el más fatón (tontón) de mi aldea los vería tan claros como yo los veo, si tuviese la desgracia de pasar por ellos lo mismo que yo los estoy viviendo. —Por lo que se ve, ustedes prestan dineros a quienes no saben que los han recibido, para que los timadores como el asqueroso raposo de Vulcano, hagan sus desalmados negocios y en sus ganancias tienen ustedes como compensación un rentable provecho. —Para mí el caso está tan claro, como que existe Dios y una Justicia que ninguna ley sirve con decencia, y que ustedes no respetan y tratan a la baqueta, porque no son otra cosa nada más que timadores gitanos de los tiempos modernos, que han aprendido muy bien en la universidad las leyes para después sin ninguna traba poder con satisfacción gananciosa burlarlas, aprovechándose de las enormes lagunas que en todas las leyes adolecen, dónde ustedes se refugian para efectuar los atropellos que a todas luces articuladas por la ley son legales. —El asunto es, de que Vulcano me aseguró que toda la culpa la tenían ustedes, y ustedes lavan sus sucias manos con el hipócrita de Vulcano, afirmándome que él es el único culpable, y entre dimes y diretes entrambos y dos me quieren cobrar la peseta a siete reales. Pero yo no estoy dispuesta a dejarme robar de mano de entre juntos estafadores, y por esta razón ahora mismo los voy a denunciar, haber si la ley es capaz de desenredar tanta trapecería y engaño como barajan ustedes encima de esta pobre trabajadora, que poco puede medrar si tiene que abrirse camino entre una bien organizada banda de inteligentes timadores, que ni temen a Dios ni a la ley, ni menos respetan los intereses ajenos. “TERESA Y LA POLICÍA" —Dejó Teresa al notario con su palabra bailándole en los labios y abandonó la oficina de la Patria Hispaña con tanto desprecio hacía sus representantes, como el que sentía hacía el timador Vulcano, y con este profundo y airado malestar que la embargaba, privándola de su sosiego que ya del todo nada de él quedaba, y animada siempre por su espíritu combativo, hizo su entrada en el aposento de la Policía, creyendo firmemente la pobre, que los guardias podían arreglarle en el momento aquel desaguisado que enloquecida la traía. —Dos agentes de la ley enfrascados se hallaban en la comisaría faenando por sus deberes cuando la Teresa hizo aparición ante ellos, con su rostro por completo desarmado en el descosido sufrimiento que la debatía, uno de los policías que se percató en el instante del apurante desespero que a la desventurada Teresa consumía, le dijo a la vez que se levantaba de su asiento, para rogarle gentilmente que ella se sentara, menester que no quiso hacer la Teresa porque manifestole al amable policía, que los nervios no la dejaban estarse queda, ya que entrelazábanse con tal fuerza enfurecida y desatinada en su sentimiento, que la ensenderaban en la enloquecedora postura que a todas luces enseñaba. —¡Está bien señora! Le dijo sonriéndola tranquilizadoramente el policía a la par que le rogaba, que se calmara, que se serenara, y que les contase lo que le sucedía, afirmándole que si en sus manos se encontraba el remedio, podía de antemano considerarlo satisfactoriamente resuelto. —Relató la Teresa por segunda vez en aquella trágica mañana el nefastoso timo que entre el Vulcano y la Aseguradora le habían hecho, que tal ladronizo la traían centrada, en el espineroso sufrir y parejo desarreglo. —El agente que habíala escuchado sin hacerle la más leve interrupción a su diálogo, y ayudándola con sus gestos de protección y confianza para que mejor se despachase en sus acusadores decires, cuando la Teresa terminó de contarles su desgracia, y ya teniendo creído que la policía iba a componerles las torcidas cuentas que industriaran encima de su humilde persona aquellos desalmados timadores modernos, desmoronósele en sentida desilusión tan cándida aspiración, cuando le dijo el agente compadeciéndola: —Siento mucho señora el no poder ayudarla en esta clara injusticia que estos señores le han hecho, y yo creo que de todo este sucio negocio que le han hecho, no ha de sacar usted en su provecho nada. Mi consejo es, que debe de abonarle al señor Vulcano la mitad de la arregladura del vehículo que le reclama, y no olvide nunca, y esto se lo digo yo por la mucha experiencia que en tales asuntos tengo, que todos los ricos se dan la mano, al igual que hacen todos los ladrones, ya que ellos no ignoran, que si uno de ellos se hunde, corren el peligro de ahogarse los demás por eso se protegen mutuamente, y como ellos son los que pagan y los que mandan, pues al pobre no le queda más recurso, que cerrar el pico y aguantar sin la menor protesta todo cuanto le echen. —Ahora bien, si usted no está conforme con hacer esto que le he aconsejado, entonces vaya usted a visitar a un abogado para que formule la consiguiente denuncia al juzgado, pero tenga presente, que si el juez estima que no existe tal timo, entre el juzgado y su abogado le han de cobrar más de lo que vale el vehículo, y hasta inclusive la pueden encarcelar por levantar un falso testimonio a tan respetables señores. —Teresa al escuchar estas palabras no podía a ciencia cierta pensar, que si todo aquello que le estaba sucediendo no era nada más que una endemoniada pesadilla de la cual en cualquier momento iba a despertar pudiendo recuperar en el instante su sosiego y tranquilidad, pero no, era bien cierto que estaba despierta, y que todo cuanto le estaba sucediendo era la triste, canallesca y sucia verdad que al pobre le brinda la vida, ahora se daba cuenta de que todo el entramado de la ley, no más era una vergonzosa y engañativa mentira, por esto, airada, descompuesta, envilecida y rabiosamente desatinada les dijo a los policias: —¡Díganme ustedes señores policías que misión es la que tienen que cumplir en esta mi Patria tan falta de Justicia! —¿Acaso están ustedes nada más que para perseguir y encarcelar a los pobres y desgraciadinos mineros cuando se ponen en huelga, por reclamar lo que Humanamente y en Justicia les pertenece, que no es otra cosa nada más que el fruto de su peligroso trabajo y harto enfermo, y que por hacer tal cosa ustedes les detienen, los encarcelan y les mayan (majan) a vergajazos sus cuerpos hasta arrancarles dentro de atroces sufrimientos, como hicieron una vez con mi difunto marido que a fuerza de llevar centenares de latigazos le sacaban el pellejo a tiras. Para también encarcelar a sus mujeres y cortarles el pelo al cero, como también hicieron con una vecina mía, que su pobre marido que era un santo del cielo, de resultas de una soberana paliza que le propinó la policía, dejó para siempre este podrido mundo al mismo tiempo que a su mujer cargadina de hijos la dejaba también viuda. No siendo su delito otro que haber trabajado desde su niñez en la mina, el haber querido reclamar el sudor que el patrono le robaba. ¿Ustedes que misión es la que tienen? ¡Acaso detener a los borrachos que se entarrascan (embriagan), y no porque sean beodos de profesión, sino que siendo obreros cobrando un miserable sueldo, se ven aburridos porque en sus hogares falta de todo, y entonces buscan en la bebida el olvido, porque saben que no pueden luchar contra un régimen que los oprime, con la poderosa fuerza que detrás de cada trabajador hay un policía! —Quizás hubiese seguido la enloquecida Teresa hablando largo tiempo por este camino, si uno de los policías enérgicamente no se le impusiera a la vez que amenazadoramente le decía: —¡Haga el favor señora de no dar a luz tantas insultantes tonterías, porque me parece a mi, que usted va a terminar muy mal, y tengo la impresión de que se va a quedar aquí, para ser encarcelada juzgada por ofender a la autoridad. Así que no despegue más su boca lárguese pronto antes de que me arrepienta! —No siguió hablando Teresa, no pudo seguir diciéndoles tantas cosas como ella sabía, tantas nefastosas cosas que en las cuencas mineras asturianas la policía había hecho, pero ahora lo que verdaderamente a ciencia cierta ya sabía, era que si el honrado y desventurado trabajador quería vivir con tranquilidad, debía de hacerlo siempre de rodillas. "LA TERESA Y LOS ABOGADOS" —Xebrose (marchose) la Teresa de la comisaría, y corriendo como una desesperada por las calles de Oviedo llegó hasta el Sindicato con intenciones de consultar su caso con un abogado que conocía que tenía ganada fama de ser un buen defensor del trabajador, y no un “tragón" como existen muchos en estas instituciones en otras muchas, ya que este letrado es un hombre recto (y también falangista), tan agudo e inteligente como lo fuera el propio Muñón de Diego, y por tercera vez, y comenzándole ya a enronquecérsele la voz, le relató el escabroso asunto que la traía desatinada. —El ilustre abogado del Sindicado escuchola sopesando todas sus palabras, y antes de responderle a la conclusión que había de aquel teatro sacado, le arrancó con profundidad un par de fumadas a su cigarro, y a la vez que lo estrujaba con rabia en el cenicero, dijo haciendo un marcado gesto de desprecio hacía los promotores de aquel despreciable y cobardoso timo: —¡Esto que le han hecho a usted es un timo asqueroso y despreciable, pero no se preocupe usted más, y deje ya de desesperarse, ya que toda la razón está de su parte, y a esos miserables no ha de quedarles más remedio, que componerle en condiciones las averías que tiene su furgoneta, o por lo contrario, deshacer la venta y entregarle el dinero que usted le dio como entrada! —No se puede imaginar don Pedro el bien que me hacen sus consolativas palabras, ya que he sufrido toda la mañana lo indecible en mi caminar de Herodes para Pilatos, y mis sentidos ya se me estaban avecinando con la pérdida de la razón. Y ahora pagándole lo que fuera menester, yo le ruego por la santina de Covadonga, que me ataña este asunto en el juzgado, para poder meter en el honrado riego a estos endiablados timadores. —Bien quisiera yo hacer lo que me está pidiendo, pero yo sólo puedo actuar en los menesteres que sean de tipo laboral, pero no se apene usted, porque la voy a enviar a un colega amigo mío, que sabe hilar muy derecho en estos asuntos, ya verá como le arregla esta cuestión con prontitud y a su agrado. —Más esperanzada por el motivo de las alentadoras palabras que le había dicho el abogado del Sindicato, hizo Teresa entrada en aquella su aciaga mañana en la casa del letrado a donde iba dirigida, y parecíale que su emprendedor valiente ánimo se encontraba en derechura de sosegarse, y su apagada alegría en hechura de florecer de nuevo, pues ya pensaba que su avisperoso negocio navegaba en las tranquilas aguas que le conducirían a ser resuelto en su favor. —Por esto, tras las consiguientes palabras de presentación que sostuvo con aquel nuevo abogado que visitaba, éste le mandó que se sentase, por primera vez en aquella su ajetreada mañana, acomodose en el mullido sillón la Teresa, medio rendida sofocada por la continua tensión en que había estado sometida, y el grande cansancio que sentía por tantas vueltas como había dado. Así pues empezó Teresa por cuarta vez en tan corto espacio, a poner en el oído del letrado, todo cuanto le aconteciera con el rapiegu de Vulcano, los foínus (garduños) de la Aseguradora, los llimiagus (babosos) de los policías, así como lo que hablara con el estupendo abogado del Sindicato. —No despegó su lengua aquel letrado en todo el tiempo que la Teresa invirtió en narrarle su caso, pero se observaba que hacía trabajar a su imaginación en el silencio, con las miras de encontrar en aquel entuerto el nudo dónde se encontraba atado el delito, y de cuando en cuando sacudía su cabeza y se sonreía, lo mismo que si le hiciera cierta gracia aquel descantoyamientu (descalabro), y cuando a la postre la Teresa terminó su historia, él hablando con seguridad dijo: —Está visto señora que todo este endiablado teatro que le han preparado, tiene el indecente hocico de ser un canallesco y cobardoso timo, pero no se preocupe usted ya que lleva la entera razón, y aunque la ley tiene unas lagunas abismales, no considero yo de que le puedan robar lo que es únicamente suyo. —Mire... voy ha procurar arreglarle este caso sin que usted tenga necesidad de gastar dinero, ya que por lo que observo, usted es una pobre trabajadora, y en los bolsillos de los necesitados no suelo hacer yo cobranzas de mis salarios. Verá, ahora mismo le voy a telefonear al jefe de la policía que es conocido mío, para preguntarle si este asunto se puede enjuiciar por lo criminal y elevarlo directamente ante el señor juez. —Después de conferenciar unos instantes el desinteresado abogado con el jefe de la policía, dijo con marcada satisfacción por haber hallado la solución que buscaba: —¡Bueno señora hemos tenido suerte, ya que se puede hacer lo que yo había pensado, así que vaya ahora mismo al juzgado de lo Criminal, y explíquele al señor juez todo cuanto le ha sucedido, y ya verá usted como le arregla este asunto rápidamente! “TERESA ANTE EL SEÑOR JUEZ” —En pocos minutos ganó corriendo la plaza del Ayuntamiento la esperanzada Teresa, y ágil, decidida y entusiasmada, subió con rapidez las escaleras del juzgado de primera instancia, y allí dijo que venía a visitar al señor juez, y que precisaba hacerlo sin demora, porque ya era demasiado tarde y tenía temor de no poder resolver su cuestión aquella mañana. —Uno de los chupatintas que en aquel despacho aparentemente trabajaba, si es que en verdad sabía hacer algo de provecho, dijo dirigiéndose a un compañero con marcado aire de altanería a la par que miraba a la Teresa de soslayo, como si le tomara la medida a su valía social, y de hecho ya supiera que no tenía facha ni de posición adinerada, ni de poder de ninguna clase: —¡Algunas personas cuentan que hablar con el señor juez es lo mismo que dirigirse a un verdulero, que poca preparación y cuanta ignorancia tenemos en España que hasta los mismos aldeanos que están como el mismo ganado piensan, que todos somos iguales y que un magistrado es parecido al vecino de la puerta de casa! —Pero no todos en aquella dependencia pensaban como este payaso, y como tantas y tantos payasos que pueblan arrastrándose como asquerosos reptiles, la mayor parte de las oficinas de nuestra Patria, pues una joven secretaria que allí también trabajaba, preguntole a Teresa con natural educación y pareja simpatía, el por qué precisaba ver al señor juez con tanto apremio como el que tenía, para ella comunicárselo y señalarle la visita. Y de nuevo la pobre Teresa por quinta vez tuvo necesidad de contar cuanto le había acontecido, condoliendo con su historia el ánimo de la muchacha, la cual le dijo: —¡Yo no sé señora si este caso que usted me explicó pertenece a este juzgado, bueno no obstante espere aquí un poco, que se lo voy a comunicar al señor juez haber si la puede recibir! —No debía de tener mucho trabajo en aquel tiempo de la casi finalizada mañana el señor juez, porque al corto instante sonriéndose satisfecha la buena secretaria con haber conseguido la entrevista, regresando a lado de Teresa le dijo: —Ya puede pasar usted señora, pues el señor juez la espera, hizo acto de presencia en la sala donde el repartidor de ley aguardándola estaba, y nada más que el juez la vio ante su presencia, preguntó con seriedad ajusticiadora: —¡Dígame señora! —¿Qué clase de gravedad la ha guiado ante mi presencia? —Teresa ya casi afónica del todo, y sofocada hasta lindar en el mismo ahogo, le contestó con todo el respeto y educación que poseía: —¡Perdóneme señor juez por molestarle, pero el caso es que mi abogado, me aconsejó que viniese ante su justa presencia para hacerle sabedor de la desgracia que me acompaña, que barrunto por anticipado, que ha de borrarla Su Señoría de mi triste sentimiento de un sólo plumazo! —Y seguidamente le explicó por sexta vez aquella mañana el mal que la desarrendaba, que en tan corto tiempo le había producida más sufrimiento, que los dolores que la embargaran en el haber traído al mundo tres futuros soldados para el Ejército de la Patria. —El señor juez que al parejo que la escuchaba estaba en animada conversación con unos despreciables sujetos que le acompañaban, que tuvieron la poca vergüenza de dialogar con el juez cuando la Teresa a éste hablaba, como si fuese más importante lo que trataban, que la simpleza de la pobre Teresa, que hasta aquellos momentos todavía creía en la eficiencia de la ley, cosa que a los pocos minutos despreciaría con toda su alma. Así que Teresa concluyó su narrativa sin haber sido interrumpida como al parecer tampoco escuchada, el señor juez quitándose sus lentes dijo con marcados síntomas de enojo: —¡Bueno…! ¿A mí que me cuenta usted señora? —¿Qué es lo que pretende usted...? —¿Acaso que yo ordene que le devuelvan con rapidez sus intereses que cualquiera sabe si son razonados, y que su abogado le lleve los cuartos? —Si usted en verdad quiere resolver este su asunto, haga el favor de hacer con la denuncia el debido camino, y no ensenderarse en el del atajo, y cuando el pleito llegue a mis manos, yo lo juzgare ateniéndome a las leyes, y entonces se sabrá quién es el culpable, si el denunciado ó el denunciante! —Salió Teresa del aposento del juez perdiendo ya para siempre toda creencia el la ley, que si en verdad en España algo de ella existe, cuando uno termina de dar las vueltas y revueltas que para todo proceso se necesitan, el más joven se torna viejo, y éste pasa a mejor vida. Y lo que no sabe la ley española con tanto cuento barato como se traen sus compositores que el pobre necesita presto su justicia, de lo que se saca en consecuencia que la ley, es patrimonio eminentemente propio de las clases poderosas. —Pobre Teresa, que no había tenido la suerte de toparse con un juez como el Juan Antonio de mi aldea que supo repartir la justicia entre Pascualín el de los enredos y las gafuros xabarceiras, con un juez que por experiencia sabia lo que era el trabajo, la necesidad, la justicia y la injusticia, por eso ahora Teresa caminaba con paso cansino, ya sin ninguna prisa, iba desilusionada, afligida, herida en lo más profundo de su alma, entristecida y empobrecida, observando por vez primera a un mundo que ella jamás había pensado que existía. Y así con tanta desesperación desventurada dirigíase a la casa de su abogado para contarle las enflaquecidas ganancias que sacara del repartidor de la justicia. —Y su abogado no supo decirle nada más que esto: —¡Creame señora, pues le juro que yo hice todo cuanto estaba a mi alcance por ayudarla, pero ya veo por lo que usted me cuenta que no fuimos capaces de conseguir nada, ahora no le queda más recurso que hacer esto que le digo! —¡Vaya a la casa de ese despreciable timador de Vulcano, páguele la mitad de la compostura que él le reclama por arreglarle el vehículo, de esta manera se encontrará pronto con la tranquilidad que le está haciendo falta, por otra parte ahorrará usted dinero, pues si este asunto lo llevamos hasta el final, se va a gastar usted mucho más de lo que vale el xumentu de fierru, sin tener la garantía de ganar el xuiciu, a pesar de ser usted dueña y señora de toda la verdad! —Llegó tras mucho bregar en busca de la Justicia y la razón que en aquellos tiempos no habla para los menesterosos, cuento que llegó la desdichada Teresa ante la presencia del rapiegu de Vulcanu, y cuando le empezó a hablar, lo hacía la pobre con tan afónica ronquera, que por esto el fuín de su timador sonriéndose muy satisfecho, le pregunto con marcada y despreciativa guasa. —¿Qué ye lu que l'axucéi nagora xiñora, que trái tan afogáu 'l glachu gafu ya endiañáu que nun principiu tal paicióme que querie achuquiname? —Pues me parece que viene muy mermada de voz y enflaquecida de genio. Mucho ha tenido usted que tejer y destejer, hablar, gritar, y desesperarse, para que se le hallan secado entrambas fuentes de mala leche, ya que cuando salió de aquí esta mañana después de ponerme a mi como un verdadero pingayu, todavía se le apreciaba la suficiente fuerza para poner en verdadera revolución a todas las autoridades de Oviedo, que como es muy natural la han escuchado a usted por cuento. —Pero tenga paciencia señora, que en las derrotas que hoy coseche, si sabe aprender de ellas como hicimos los demás, sacará usted las victorias de mañana, y puede que desde ahora ya jamás ponga en duda, que quienes tienen el dinero son los que mandan, y aquellos que luchan con la fuerza de la dialéctica contra el dinero, no son en verdad locos sino simplemente tontos. —Nada le contestó Teresa a los razonamientos atinados de ‘l Rapiegón del Vulcanu, sino que mirándole con endemoniado desprecio, señalada rabia y marcado odio, sacó de su bolso los dineros y al cuidado que se los ponía entre sus fuinesques manes le dijo: —Aquí tiene el importe del arreglo de mi furgonetina, y quiera el Xantiquín del Faidor que le sirva para melecinas. —Con aquella furgoneta anduvimos xabarciandu por todos los mercados de Asturias, y al final tuvimos que dejar tal oficio porque casi no ganábamos para encantexus de la dichosa furgonetina.

    Primer Diccionario Enciclopédicu de la Llingua Asturiana > xabarciar

  • 13 way

    wei
    1. noun
    1) (an opening or passageway: This is the way in/out; There's no way through.) camino, vía; entrada, salida
    2) (a route, direction etc: Which way shall we go?; Which is the way to Princes Street?; His house is on the way from here to the school; Will you be able to find your/the way to my house?; Your house is on my way home; The errand took me out of my way; a motorway.) dirección; camino
    3) (used in the names of roads: His address is 21 Melville Way.) calle; avenida
    4) (a distance: It's a long way to the school; The nearest shops are only a short way away.) distancia
    5) (a method or manner: What is the easiest way to write a book?; I know a good way of doing it; He's got a funny way of talking; This is the quickest way to chop onions.) manera, modo, forma
    6) (an aspect or side of something: In some ways this job is quite difficult; In a way I feel sorry for him.) aspecto; manera (de alguna manera/forma siento pena por él)
    7) (a characteristic of behaviour; a habit: He has some rather unpleasant ways.) maneras
    8) (used with many verbs to give the idea of progressing or moving: He pushed his way through the crowd; They soon ate their way through the food.) camino, paso (abrirse camino/paso)

    2. adverb
    ((especially American) by a long distance or time; far: The winner finished the race way ahead of the other competitors; It's way past your bedtime.) muy, mucho más; de sobra
    - wayside
    - be/get on one's way
    - by the way
    - fall by the wayside
    - get/have one's own way
    - get into / out of the way of doing something
    - get into / out of the way of something
    - go out of one's way
    - have a way with
    - have it one's own way
    - in a bad way
    - in
    - out of the/someone's way
    - lose one's way
    - make one's way
    - make way for
    - make way
    - under way
    - way of life
    - ways and means

    way n
    1. manera / modo
    what's the best way to do it? ¿cuál es la mejor manera de hacerlo?
    2. camino
    which is the quickest way to your house? ¿cuál es el camino más rápido para ir a tu casa?
    3. dirección
    which way did he go? ¿en qué dirección se ha ido? / ¿por dónde se ha ido?
    to be in the way estar en medio / obstruir el paso / molestar
    to get out of the way apartar / apartarse / quitar de en medio
    there's a car coming, get out of the way! viene un coche, ¡apártate!
    tr[weɪ]
    1 (right route, road, etc) camino
    which is the best way to the swimming pool? ¿cómo se va a la piscina?, ¿por dónde se va a la piscina?
    do you know the way? ¿conoces el camino?, ¿sabes cómo ir?
    which way did he go? ¿por dónde se fue?
    which way is the harbour from here? ¿por dónde cae el puerto desde aquí?
    come this way, please venga por aquí, por favor
    are you going my way? ¿vas en la misma dirección que yo?
    3 (distance) distancia
    it's a long way to Tipperary Tipperary está lejos, Tipperary queda lejos
    4 (manner, method) manera, modo
    what's the best way to cook trout? ¿cuál es la mejor manera de guisar las truchas?
    OK, you do it your own way vale, hazlo como quieras
    5 (behaviour, custom) manera, forma, modo
    6 (area) zona, área
    that's out Romford way, isn't it? está por la zona de Romford, ¿verdad?
    1 familiar muy
    1 (customs) costumbres nombre femenino plural; (habits, behaviour) manías nombre femenino plural
    \
    SMALLIDIOMATIC EXPRESSION/SMALL
    across the way / over the way enfrente
    all the way (distance) todo el viaje 2 (completely) totalmente
    this flat's not big enough by a long way este piso es demasiado pequeño, pero pequeño de verdad
    by the way (incidentally) a propósito, por cierto
    by way of (via) vía, por vía de, pasando por 2 (serving as, as a kind of) a modo de
    either way en cualquier caso
    every which way por todas partes, en todas direcciones
    in a big way a lo grande, a gran escala, en plan grande
    in a small way a pequeña escala, en plan modesto
    in a way en cierto modo, en cierta manera
    in any way de alguna manera
    can I help in any way? ¿puedo ayudar de alguna manera?
    in many ways desde muchos puntos de vista, en muchos aspectos
    in many ways, this is her best book desde muchos puntos de vista, éste es su mejor libro
    in more ways than one en más de un sentido
    in no way de ninguna manera, de ningún modo
    in some ways en algunos aspectos
    in the way of (regarding) en cuanto a, como
    what would you like in the way of dessert? ¿qué quieres de postre?
    in this way (thus) de este modo, de esta manera
    no two ways about it no tiene vuelta de hoja
    no way! ¡ni hablar!, ¡de ninguna manera!
    on one's way / on the way por el camino, de camino, de paso
    we're on our way! ¡ya estamos en camino!
    is it on your way? ¿te pilla de camino?
    one way and another en conjunto
    one way and another it's been a good year en conjunto, ha sido un buen año
    one way or the other (somehow) de algún modo, de una manera u otra, como sea
    don't worry, we'll find it one way or the other no te preocupes, lo encontraremos de una manera u otra
    I don't mind one way or the other me da exactamente igual, me da lo mismo
    out of the way (remote) apartado,-a, remoto,-a 2 (exceptional) excepcional, particular, original
    over the way enfrente
    that way (direction) por allá 2 (like that) así
    that's always the way siempre es así
    the other way round al revés, viceversa
    the right way up cabeza arriba, derecho,-a
    the wrong way up cabeza abajo
    to be born that way ser así, nacer así
    to be in the way estorbar, estar por en medio
    you're in the way! estás estorbando!
    move your car, it's in the way quita tu coche de en medio, obstruye el paso
    to be on the way (coming) estar en camino, estar al llegar, avecinarse
    to be on the way down (fall) estar bajando, ir a la baja
    to be on the way in (coming into fashion) estar poniéndose de moda
    to be on the way out (going out of fashion) en camino de desaparecer, estar pasando de moda
    to be on the way up (rise) estar subiendo, ir al alza
    to be out of somebody's way no pillar a alguien de camino
    to be set in one's ways tener unas costumbres muy arraigadas, ser reacio,-a al cambio
    to be under way (work) estar en marcha, estar avanzado,-a 2 (meeting, match) haber empezado
    to cut both ways / cut two ways ser un arma de doble filo, tener ventajas y desventajas
    to get in the way estorbar, molestar, ponerse en medio
    to get into the way of doing something coger la costumbre de hacer algo
    to get one's own way salirse con la suya
    to get out of the way of something dejarle paso a algo, apartarse del camino de algo
    to get out of the way apartarse del camino, quitarse de en medio
    to get out of the way of doing something perder la costumbre de hacer algo
    to get something out of the way deshacerse de algo, quitar algo de en medio
    to get under way (meeting, match) empezar 2 (travellers, work) ponerse en marcha
    to give way (collapse) ceder, hundirse 2 (yield) ceder (to, a) 3 (when driving) ceder el paso
    to go a long way towards something contribuir en gran medida a algo
    to go a long way (succeed) ir lejos 2 (be productive) cundir mucho, dar mucho de sí
    to go one's own way ir a lo suyo, seguir su propio camino
    to go out of one's way (to do something) desvivirse (por hacer algo)
    to have a way with... tener un don especial para...
    to keep out of somebody's way evitar el contacto con alguien
    to keep out of the way (hide) mantener un perfil bajo 2 (step aside) apartarse
    to learn something the hard way aprender algo a las malas
    to look the other way hacer la vista gorda
    to lose one's way perderse, extraviarse
    to make one's own way in life/in the world abrirse paso en la vida/el mundo
    to make one's way dirigirse (to, a)
    to make way for something hacer lugar para algo
    to my way of thinking a mi modo de ver
    to put somebody in the way of (doing) something dar a alguien la oportunidad de (hacer) algo
    to see one's way clear to doing something ver la manera de hacer algo
    to stand in the way of something ser un obstáculo para algo, ser un estorbo para algo
    to talk one's way out of something salir de algo a base de labia
    to work one's way through something (crowd etc) abrirse camino por algo 2 (work, book) hacer algo con dificultad 3 (college etc) costearse los estudios trabajando
    to work one's way up ascender a fuerza de trabajo, subir a base de trabajar
    way back (in time) hace muchísimo
    way in entrada
    way out (exit) salida 2 (solution) solución nombre femenino, remedio
    way ['weɪ] n
    1) path, road: camino m, vía f
    2) route: camino m, ruta f
    to go the wrong way: equivocarse de camino
    I'm on my way: estoy de camino
    3) : línea f de conducta, camino m
    he chose the easy way: optó por el camino fácil
    4) manner, means: manera f, modo m, forma f
    in the same way: del mismo modo, igualmente
    there are no two ways about it: no cabe la menor duda
    have it your way: como tú quieras
    to get one's own way: salirse uno con la suya
    6) state: estado m
    things are in a bad way: las cosas marchan mal
    7) respect: aspecto m, sentido m
    8) custom: costumbre f
    to mend one's ways: dejar las malas costumbres
    9) passage: camino m
    to get in the way: meterse en el camino
    10) distance: distancia f
    to come a long way: hacer grandes progresos
    11) direction: dirección f
    come this way: venga por aquí
    which way did he go?: ¿por dónde fue?
    by the way : a propósito, por cierto
    by way of via: vía, pasando por
    out of the way remote: remoto, recóndito
    n.
    camino s.m.
    dirección s.f.
    distancia s.f.
    estilo s.m.
    guisa s.f.
    género s.m.
    manera s.f.
    medio s.m.
    modales s.m.pl.
    modo s.m.
    paso s.m.
    sentido s.m.
    trayecto s.m.
    vía s.f.

    I weɪ
    1) noun
    2) c
    a) ( route) camino m

    the way in/out — la entrada/salida

    this style is on the way in/out — este estilo se está poniendo/pasando de moda

    you'll soon find your way around the office/system — en poco tiempo te familiarizarás con la oficina/el sistema

    we're going the wrong way — nos hemos equivocado de camino, vamos mal

    which way did you come? — ¿por dónde viniste?

    which way did he go? — ¿por dónde fue?; ( following somebody) ¿por dónde se fue?

    could you tell me the way to the city center? — ¿me podría decir por dónde se va or cómo se llega al centro (de la ciudad)?

    I'm on my way!ahora mismo salgo or voy, voy para allí!

    the doctor is on her way — la doctora ya va para allí/viene para aquí

    did you find the way to Trier all right? — ¿llegaste bien a Trier?

    I don't know the way up/down — no sé por dónde se sube/se baja

    to lead the way — ir* delante

    to lose one's way — perderse*

    there are no two ways about itno tiene or no hay vuelta de hoja

    to go one's own way: she'll go her own way hará lo que le parezca; to go out of one's way ( make a detour) desviarse* del camino; ( make special effort): they went out of their way to be helpful se desvivieron or hicieron lo indecible por ayudar; to go the way of something/somebody — acabar como algo/algn, correr la misma suerte de algo/algn

    b) (road, path) camino m, senda f

    the people over the way — (BrE) los vecinos de enfrente

    3) c u (passage, space)

    to be/get in the way — estorbar

    to stand in the way: they stood in our way nos impidieron el paso; I couldn't see it, she was standing in my way no podía verlo, ella me tapaba (la vista); I won't stand in your way no seré yo quien te lo impida; to stand in the way of progress obstaculizar* or entorpecer* el progreso; (get) out of the way! hazte a un lado!, quítate de en medio!; to move something out of the way quitar algo de en medio; I'd like to get this work out of the way quisiera quitar este trabajo de en medio; to keep out of somebody's way rehuir* a algn, evitar encontrarse con algn; make way! — abran paso!

    4) c ( direction)

    it's that way — es en esa dirección, es por ahí

    which way did they go? — ¿por dónde (se) fueron?

    this way and that — de un lado a otro, aquí y allá

    which way does the house face? — ¿hacia dónde mira or está orientada la casa?

    if you're ever down our way, call in — (colloq) si algún día andas por nuestra zona, ven a vernos

    whichever way you look at it, it's a disaster — es un desastre, lo mires por donde lo mires

    which way up should it be? — ¿cuál es la parte de arriba?

    to split something three/five ways — dividir algo en tres/cinco partes

    every which way — (AmE) para todos lados

    to come somebody's way — ( lit) \<\<person/animal\>\> venir* hacia algn

    to go somebody's way: are you going my way? ¿vas en mi misma dirección?; the decision went our way se decidió en nuestro favor; to put work/business somebody's way conseguirle* trabajo/clientes a algn; way to go! — (AmE colloq) así se hace!, bien hecho!

    5) ( distance) (no pl)

    there's only a short way to go nowya falta or queda poco para llegar

    he came all this way just to see me — (colloq) se dió el viaje hasta aquí sólo para verme

    you have to go back a long way, to the Middle Ages — hay que remontarse a la Edad Media

    it's a very long way down/up — hay una buena bajada/subida

    we've come a long way since those dayshemos evolucionado or avanzado mucho desde entonces

    a little goes a long wayun poco cunde or (AmL tb) rinde mucho

    Springfield? that's quite a ways from here — (AmE colloq) ¿Springfield? eso está requetelejos de aquí (fam)

    to go all the way: do you think he might go all the way and fire them? ¿te parece que puede llegar a echarlos?; they went all the way ( had sex) tuvieron relaciones, hicieron el amor; to go some/a long way toward something — contribuir* en cierta/gran medida a algo; see also way I III

    6) c (method, means) forma f, manera f, modo m

    all right, we'll do it your way — muy bien, lo haremos a tu manera or como tú quieras

    to learn something the hard wayaprender algo a fuerza de palos or golpes

    to do something the hard/easy way — hacer* algo de manera difícil/fácil

    7) c ( manner) manera f, modo m, forma f

    in a subtle wayde manera or modo or forma sutil

    is this the way you treat all your friends? — ¿así (es como) tratas a todos tus amigos?

    that's one way of looking at ites una manera or un modo or una forma de verlo

    what a way to go! — (set phrase) mira que acabar or terminar así!

    that's the way it goes — así son las cosas, así es la vida

    it looks that wayasí or eso parece

    the way I see it — tal y como yo lo veo, a mi modo or manera de ver

    the way things are o stand at the moment — tal y como están las cosas en este momento

    in a big way: they let us down in a big way nos fallaron de mala manera; he fell for her in a big way quedó prendado de ella; to have a way with...: to have a way with children/people saber* cómo tratar a los niños/saber* cómo tratar a la gente, tener* don de gentes; to have a way with animals tener* mucha mano con los animales; to have a way with words — tener* mucha labia or facilidad de palabra

    8) c
    a) (custom, characteristic)

    to get into/out of the way of something — (BrE) acostumbrarse a/perder* la costumbre de algo

    to be set in one's ways — estar* muy acostumbrado a hacer las cosas de cierta manera

    to mend one's ways — dejar las malas costumbres, enmendarse*

    b) (wish, will)

    to get/have one's (own) way — salirse* con la suya (or mía etc)

    have it your own way then! — lo que tú quieras!, como tú digas!

    to have it all one's own way — salirse* con la suya (or mía etc)

    to have one's (evil o wicked) way with somebody — llevarse a algn al huerto (fam), pasar a algn por las armas (fam)

    9) c (feature, respect) sentido m, aspecto m

    in a way, it's like losing an old friend — de alguna manera or en cierta forma or en cierto sentido es como perder a un viejo amigo

    you were in no way to blame — tú no tuviste ninguna culpa; see also way I III

    by the way — (indep) a propósito, por cierto

    but that's all by the way: what I really wanted to say was... — pero eso no es a lo que iba: lo que quería decir es que...

    11)

    by way of(as prep)

    a) ( via) vía, pasando por
    b) ( to serve as) a modo or manera de

    by way of introduction/an apology — a modo or manera de introducción/disculpa

    12)

    in the way of — ( as regards) (as prep)

    don't expect too much in the way of help — en cuanto a ayuda, no esperes mucho

    13)

    no way — (colloq)

    no way is he/she going to do it — de ninguna manera lo va a hacer (fam)

    a) (break, collapse) \<\<ice/rope/cable\>\> romperse*; \<\<floor\>\> hundirse, ceder
    b) (succumb, give in)

    to give way TO something\<\<to threats/blackmail\>\> ceder a or ante algo

    c) (BrE Transp)

    to give way (TO somebody/something) — ceder el paso (a algn/algo)

    d) (be replaced, superseded by)

    to give way TO somethingdejar or dar* paso a algo

    15)

    under way: to get under way ponerse* en marcha, comenzar*; to get a meeting under way dar* comienzo a una reunión; an investigation is under way — se está llevando a cabo or se ha abierto una investigación


    II
    adverb (colloq)

    way and away(as intensifier) (AmE) con mucho, lejos (AmL fam)

    [weɪ]
    1. N
    1) (=road, lane) camino m ; (in street names) calle f, avenida f

    Way of the CrossVía f Crucis, viacrucis m

    across or over the way (from) — enfrente (de), frente (a)

    permanent way — vía f

    the public way — la vía pública

    2) (=route) camino m (to de)

    which is the way to the station? — ¿cómo se va or cómo se llega a la estación?

    this isn't the way to Lugo! — ¡por aquí no se va a Lugo!

    he walked all the way here — vino todo el camino andando

    to ask one's way to the station — preguntar el camino or cómo se va a la estación

    we came a back way — vinimos por los caminos vecinales

    she went by way of Birmingham — fue por or vía Birmingham

    if the chance comes my way — si se me presenta la oportunidad

    way downbajada f, ruta f para bajar

    to take the easy way out — optar por la solución más fácil

    to feel one's way — (lit) andar a tientas

    to find one's way — orientarse, ubicarse (esp LAm)

    to find one's way into a building — encontrar la entrada de un edificio, descubrir cómo entrar en un edificio

    the way is hardel camino es duro

    the way in(=entrance) la entrada

    I don't know the way to his house — no sé el camino a su casa, no sé cómo se va or llega a su casa

    do you know the way to the hotel? — ¿sabes el camino del or al hotel?, ¿sabes cómo llegar al hotel?

    she knows her way around — (fig) tiene bastante experiencia, no es que sea una inocente

    to lead the way — (lit) ir primero; (fig) marcar la pauta, abrir el camino

    to go the long way round — ir por el camino más largo

    to lose one's way — extraviarse

    to make one's way to — dirigirse a

    the middle way — el camino de en medio

    on the way here — de camino hacia aquí, mientras veníamos aquí

    on the way to London — rumbo a Londres, camino de Londres

    we're on our way! — ¡vamos para allá!

    the way outla salida

    there's no way out — (fig) no hay salida or solución, esto no tiene solución

    there's no other way out — (fig) no hay más remedio

    it's on its way out — está en camino de desaparecer, ya está pasando de moda

    to go out of one's way — (lit) desviarse del camino

    to pay one's way — (in restaurant) pagar su parte

    he put me in the way of some good contracts — me conectó or enchufó para que consiguiera buenos contratos

    to see one's way (clear) to helping sb — ver la forma de ayudar a algn

    could you possibly see your way clear to lending him some money? — ¿tendrías la amabilidad de prestarle algo de dinero?

    to go the shortest way — ir por el camino más corto

    to start on one's way — ponerse en camino

    way upsubida f, ruta f para subir

    the way of virtueel camino de la virtud

    - go the way of all flesh
    - go one's own way
    prepare 1.
    3) (=space sb wants to go through) camino m

    to bar the way — ponerse en medio del camino

    to clear a way for — abrir camino para

    he crawled his way to the gate — llegó arrastrándose hasta la puerta

    to elbow one's way through the crowd — abrirse paso por la multitud a codazos

    to fight one's way out — lograr salir luchando

    to force one's way in — introducirse a la fuerza

    to hack one's way through sth — abrirse paso por algo a fuerza de tajos

    to be/get in sb's way — estorbar a algn

    am I in the way? — ¿estorbo?

    you can watch, but don't get in the way — puedes mirar, pero no estorbes

    to stand in sb's way — (lit) cerrar el paso a algn; (fig) ser un obstáculo para algn

    to stand in the way of progressimpedir or entorpecer el progreso

    to make way (for sth/sb) — (lit, fig) dejar paso (a algo/algn)

    make way! — ¡abran paso!

    to leave the way open for further talks — dejar la puerta abierta a posteriores conversaciones

    to get out of the way — quitarse de en medio

    out of my way! — ¡quítate de en medio!

    to get or move sth out of the way — quitar algo de en medio or del camino

    to push one's way through the crowd — abrirse paso por la multitud a empujones

    to work one's way to the front — abrirse camino hacia la primera fila

    give 1., 18)
    4) (=direction)

    down our way — por nuestra zona, en nuestro barrio

    are you going my way? — ¿vas por dónde voy yo?

    everything is going my way — (fig) todo me está saliendo a pedir de boca

    to look the other way — (lit) mirar para otro lado; (fig) mirar para otro lado, hacer la vista gorda

    it was you who invited her, not the other way round — eres tú quien la invitaste, no al revés

    it's out Windsor way — está cerca de Windsor

    turn the map the right way up — pon el mapa mirando hacia arriba

    to split sth three ways — dividir algo en tres partes iguales

    come this way — pase por aquí

    which way did it go? — ¿hacia dónde fue?, ¿por dónde se fue?

    which way do we go from here? — (lit, fig) ¿desde aquí adónde vamos ahora?

    which way is the wind blowing? — ¿de dónde sopla el viento?

    she didn't know which way to look — no sabía dónde mirar, no sabía dónde poner los ojos

    5) (=distance)

    a little way off — no muy lejos, a poca distancia

    a little way down the road — bajando la calle, no muy lejos

    it's a long or good way away or off — está muy lejos

    it's a long or good way — es mucho camino

    he'll go a long way — (fig) llegará lejos

    a little of her company goes a long wayiro solo se le puede aguantar en pequeñas dosis

    better by a long way — mucho mejor, mejor pero con mucho

    I can swim quite a way now — ahora puedo nadar bastante distancia

    a short way off — no muy lejos, a poca distancia

    6) (=means) manera f, forma f, modo m

    we'll find a way of doing itencontraremos la manera or forma or modo de hacerlo

    it's the only way of doing ites la única manera or forma or modo de hacerlo

    my way is to+ infin mi sistema consiste en + infin

    that's the way! — ¡así!, ¡eso es!

    every which way — (esp US) (=in every manner) de muchísimas maneras; (=in every direction) por todas partes

    ways and meansmedios mpl

    that's not the right way — así no se hace

    7) (=manner) manera f, forma f, modo m

    she looked at me in a strange wayme miró de manera or forma extraña or de modo extraño

    it's a strange way to thank someone — ¡vaya manera or forma or modo de mostrar gratitud or darle las gracias a alguien!

    without in any way wishing to — + infin sin querer en lo más mínimo + infin, sin tener intención alguna de + infin

    in a big way *en grande *

    we lost in a really big way *perdimos de manera or forma or modo realmente espectacular

    you can't have it both ways — tienes que optar por lo uno o lo otro

    each way — (Racing) (a) ganador y colocado

    either way I can't help you — de todas formas no puedo ayudarle

    I will help you in every way possible — haré todo lo posible por ayudarte

    the British way of lifeel estilo de vida británico

    no way! * — ¡ni pensarlo!, ¡ni hablar!

    no way was that a goal * — ¡imposible que fuera eso un gol!

    there is no way I am going to agree *de ninguna manera or forma or de ningún modo lo voy a consentir

    (in) one way or another — de una u otra manera or forma or modo

    it doesn't matter to me one way or the other — me es igual, me da lo mismo

    in the ordinary way (of things) — por lo general, en general

    he has his own way of doing it — tiene su manera or forma or modo de hacerlo

    in the same way — de la misma manera or forma, del mismo modo

    we help in a small way — ayudamos un poco

    she's clever that way — para esas cosas es muy lista

    to my way of thinking — a mi parecer, a mi manera or forma or modo de ver

    do it this way — hazlo así

    in this way — así, de esta manera or forma or modo

    it was this way... — pasó lo siguiente...

    that's always the way with him — siempre le pasa igual

    8) [of will]

    to get one's own way — salirse con la suya

    have it your own way! — ¡como quieras!

    they didn't have things all their own way (in football match) no dominaron el partido completamente

    he had his wicked or evil way with her — hum se la llevó al huerto *, la sedujo

    9) (=custom) costumbre f

    to get into the way of doing sth — adquirir la costumbre de hacer algo

    to be/get out of the way of doing sth — haber perdido/perder la costumbre de hacer algo

    - mend one's ways
    10) (=gift, special quality)

    he has a way with people — tiene don de gentes

    11) (=respect, aspect) sentido m

    in a way — en cierto sentido

    in many ways — en muchos sentidos

    he's like his father in more ways than one — se parece a su padre en muchos sentidos

    in no way, not in any way — de ninguna manera, de manera alguna

    in some ways — en algunos sentidos

    12) (=state) estado m

    the way things aretal como están or van las cosas

    things are in a bad way — las cosas van or marchan mal

    he's in a bad way(=sick) está grave; (=troubled) está muy mal

    he's in a fair way to succeed — tiene buenas posibilidades de lograrlo

    it looks that way — así parece

    - be in the family way
    13) (=speed)

    to gather way[ship] empezar a moverse; (fig) [enthusiasm] encenderse

    by the way — a propósito, por cierto

    how was your holiday, by the way? — a propósito or por cierto, ¿qué tal tus vacaciones?

    Jones, which, by the way, is not his real name — Jones que, a propósito or por cierto, no es su verdadero nombre

    oh, and by the way — antes que se me olvide

    by way of a warning — a modo de advertencia

    he had little in the way of formal education — tuvo poca educación formal

    to be under way — estar en marcha

    to get under way[ship] zarpar; [person, group] partir, ponerse en camino; [work, project] ponerse en marcha, empezar a moverse

    2.
    ADV
    *

    that was way backeso fue hace mucho tiempo ya

    way down (below) — muy abajo

    it's way out in Nevada — está allá en Nevada

    it's way past your bedtime — hace rato que deberías estar en la cama

    it's way too big — es demasiado grande

    way up high — muy alto

    3.
    CPD

    way station N(US) apeadero m ; (fig) paso m intermedio

    * * *

    I [weɪ]
    1) noun
    2) c
    a) ( route) camino m

    the way in/out — la entrada/salida

    this style is on the way in/out — este estilo se está poniendo/pasando de moda

    you'll soon find your way around the office/system — en poco tiempo te familiarizarás con la oficina/el sistema

    we're going the wrong way — nos hemos equivocado de camino, vamos mal

    which way did you come? — ¿por dónde viniste?

    which way did he go? — ¿por dónde fue?; ( following somebody) ¿por dónde se fue?

    could you tell me the way to the city center? — ¿me podría decir por dónde se va or cómo se llega al centro (de la ciudad)?

    I'm on my way!ahora mismo salgo or voy, voy para allí!

    the doctor is on her way — la doctora ya va para allí/viene para aquí

    did you find the way to Trier all right? — ¿llegaste bien a Trier?

    I don't know the way up/down — no sé por dónde se sube/se baja

    to lead the way — ir* delante

    to lose one's way — perderse*

    there are no two ways about itno tiene or no hay vuelta de hoja

    to go one's own way: she'll go her own way hará lo que le parezca; to go out of one's way ( make a detour) desviarse* del camino; ( make special effort): they went out of their way to be helpful se desvivieron or hicieron lo indecible por ayudar; to go the way of something/somebody — acabar como algo/algn, correr la misma suerte de algo/algn

    b) (road, path) camino m, senda f

    the people over the way — (BrE) los vecinos de enfrente

    3) c u (passage, space)

    to be/get in the way — estorbar

    to stand in the way: they stood in our way nos impidieron el paso; I couldn't see it, she was standing in my way no podía verlo, ella me tapaba (la vista); I won't stand in your way no seré yo quien te lo impida; to stand in the way of progress obstaculizar* or entorpecer* el progreso; (get) out of the way! hazte a un lado!, quítate de en medio!; to move something out of the way quitar algo de en medio; I'd like to get this work out of the way quisiera quitar este trabajo de en medio; to keep out of somebody's way rehuir* a algn, evitar encontrarse con algn; make way! — abran paso!

    4) c ( direction)

    it's that way — es en esa dirección, es por ahí

    which way did they go? — ¿por dónde (se) fueron?

    this way and that — de un lado a otro, aquí y allá

    which way does the house face? — ¿hacia dónde mira or está orientada la casa?

    if you're ever down our way, call in — (colloq) si algún día andas por nuestra zona, ven a vernos

    whichever way you look at it, it's a disaster — es un desastre, lo mires por donde lo mires

    which way up should it be? — ¿cuál es la parte de arriba?

    to split something three/five ways — dividir algo en tres/cinco partes

    every which way — (AmE) para todos lados

    to come somebody's way — ( lit) \<\<person/animal\>\> venir* hacia algn

    to go somebody's way: are you going my way? ¿vas en mi misma dirección?; the decision went our way se decidió en nuestro favor; to put work/business somebody's way conseguirle* trabajo/clientes a algn; way to go! — (AmE colloq) así se hace!, bien hecho!

    5) ( distance) (no pl)

    there's only a short way to go nowya falta or queda poco para llegar

    he came all this way just to see me — (colloq) se dió el viaje hasta aquí sólo para verme

    you have to go back a long way, to the Middle Ages — hay que remontarse a la Edad Media

    it's a very long way down/up — hay una buena bajada/subida

    we've come a long way since those dayshemos evolucionado or avanzado mucho desde entonces

    a little goes a long wayun poco cunde or (AmL tb) rinde mucho

    Springfield? that's quite a ways from here — (AmE colloq) ¿Springfield? eso está requetelejos de aquí (fam)

    to go all the way: do you think he might go all the way and fire them? ¿te parece que puede llegar a echarlos?; they went all the way ( had sex) tuvieron relaciones, hicieron el amor; to go some/a long way toward something — contribuir* en cierta/gran medida a algo; see also way I III

    6) c (method, means) forma f, manera f, modo m

    all right, we'll do it your way — muy bien, lo haremos a tu manera or como tú quieras

    to learn something the hard wayaprender algo a fuerza de palos or golpes

    to do something the hard/easy way — hacer* algo de manera difícil/fácil

    7) c ( manner) manera f, modo m, forma f

    in a subtle wayde manera or modo or forma sutil

    is this the way you treat all your friends? — ¿así (es como) tratas a todos tus amigos?

    that's one way of looking at ites una manera or un modo or una forma de verlo

    what a way to go! — (set phrase) mira que acabar or terminar así!

    that's the way it goes — así son las cosas, así es la vida

    it looks that wayasí or eso parece

    the way I see it — tal y como yo lo veo, a mi modo or manera de ver

    the way things are o stand at the moment — tal y como están las cosas en este momento

    in a big way: they let us down in a big way nos fallaron de mala manera; he fell for her in a big way quedó prendado de ella; to have a way with...: to have a way with children/people saber* cómo tratar a los niños/saber* cómo tratar a la gente, tener* don de gentes; to have a way with animals tener* mucha mano con los animales; to have a way with words — tener* mucha labia or facilidad de palabra

    8) c
    a) (custom, characteristic)

    to get into/out of the way of something — (BrE) acostumbrarse a/perder* la costumbre de algo

    to be set in one's ways — estar* muy acostumbrado a hacer las cosas de cierta manera

    to mend one's ways — dejar las malas costumbres, enmendarse*

    b) (wish, will)

    to get/have one's (own) way — salirse* con la suya (or mía etc)

    have it your own way then! — lo que tú quieras!, como tú digas!

    to have it all one's own way — salirse* con la suya (or mía etc)

    to have one's (evil o wicked) way with somebody — llevarse a algn al huerto (fam), pasar a algn por las armas (fam)

    9) c (feature, respect) sentido m, aspecto m

    in a way, it's like losing an old friend — de alguna manera or en cierta forma or en cierto sentido es como perder a un viejo amigo

    you were in no way to blame — tú no tuviste ninguna culpa; see also way I III

    by the way — (indep) a propósito, por cierto

    but that's all by the way: what I really wanted to say was... — pero eso no es a lo que iba: lo que quería decir es que...

    11)

    by way of(as prep)

    a) ( via) vía, pasando por
    b) ( to serve as) a modo or manera de

    by way of introduction/an apology — a modo or manera de introducción/disculpa

    12)

    in the way of — ( as regards) (as prep)

    don't expect too much in the way of help — en cuanto a ayuda, no esperes mucho

    13)

    no way — (colloq)

    no way is he/she going to do it — de ninguna manera lo va a hacer (fam)

    a) (break, collapse) \<\<ice/rope/cable\>\> romperse*; \<\<floor\>\> hundirse, ceder
    b) (succumb, give in)

    to give way TO something\<\<to threats/blackmail\>\> ceder a or ante algo

    c) (BrE Transp)

    to give way (TO somebody/something) — ceder el paso (a algn/algo)

    d) (be replaced, superseded by)

    to give way TO somethingdejar or dar* paso a algo

    15)

    under way: to get under way ponerse* en marcha, comenzar*; to get a meeting under way dar* comienzo a una reunión; an investigation is under way — se está llevando a cabo or se ha abierto una investigación


    II
    adverb (colloq)

    way and away(as intensifier) (AmE) con mucho, lejos (AmL fam)

    English-spanish dictionary > way

  • 14 xitanus

    Xitanus, gitanos. —Nus tempus d'endenantes cundu you era guaxe, toes les aldines de la miou Tierrina taben ameruxáes d'istes prexones ya d'oitres qu'achegaben fasta lus nuexus chugares catandu dalguna ruquera qu'enzular p'afogar la prietona fame que lus encibiétchaba, peru de toes les xentes qu'achegaben ya caúna col sou rexistru, lus únicus qu'arrapiegaben dalgu yeren lus intelixentes ya estutus xitanus, vou cuntabus nagora a la memoria d'istes ximples, xenciétches, intelixentes ya desprestixáes xentes isti tratu que cheldarun d'enría d'un veicín miou. TRADUCCIÓN.—En los tiempos pasados cuando yo era un niño, todas las aldeas de mi querida Tierrina, estaban, plagadas de estas gentes y de otras parecidas, que llegaban a nuestras aldeas buscando alguna cosa para comer, con el fin de ahogar la grande hambre que los encadenaba, pero de todas las personas que llegaban y cada una con su oficio bien entrenado y aprendido, los únicos que lograban engañar y sacar partido de sus trapisondas eran los inteligentes gitanos. Yo les voy a contar ahora a la memoria de estas simples y sencillas gentes, de estas buenas, inteligentes y despreciadas personas, un trato que hicieron con un vecino de mi aldea que siempre se las dio de listo, pensando que por mal que fuese el trato, él siempre saldría ganando, ya que su pollino valía muy poco. "PIN EL TOIPU" “JOSÉ EL TOPO” —Chegarun lus xitanus naquel díe del mes de coyer el pan mu cedu a la miou aldina, tou la nuétche la borrina apaxiétchara l'aldina con choramicus d'orfina, anxín yera que tous lus erus taben orbayainus, ya lus pancicales llucíen sous espigues enxemáes sous ariestes d'urpinas d'orfinadura, tal paicíen les espigues que yeren xoyes de finu goru, dientru de repuxáus cadexinus de plata de bona lley. —Llegaron los gitanos aquel día del mes de recoger el trigo (agosto), muy temprano a mi aldea, toda la noche la densa niebla había vestido a la aldea con finas lágrimas que casi invisiblemente de la niebla se desprendían, así era que todos sus campos estaban mojados, y los trigales lucían sus espigas llenas sus aristas de delicado rocío, tal parecían las espigas joyas del más fino oro, dentro de repujados de finas cadenas de buena plata de ley. —Taba la borrina pe la fondeirá de lus préus de la braña, ya tal paicíe qu'aquel díe 'l sol diba ser de figal, anxín yera qu'al nun puder coyer el pan per tar moyáu, cuaxi toes les xentes poucu teníen que faer, perque la yerbe tóa ya taba nel payar perque tou 'l branu fora un magosteiru, per isti cheldar toes les xentes andaben d'un lláu p'oitre chuquinandu 'l tempu, menus lus qu'andaben curiandu 'l ganáu. Anxina yera que la ñovedá de lus xitanus faía qu'el cutidianu tempu s'espiertare dálgu qu'agüéchar nuéu. —Aquechus xitanus chegaben prietus comu les rexes del xardu, amagostáus sous focicus pel sol de lus caminus, ya prietus tous sous pelleyus que chebaben al entestate, que cuaxi, cuaxi andaben en porriques, perque tantu lus homes comu les mucheres traíen sous paxiétchus tan eszarapáus, tan amamplenáus d'esgazaduras per tous lus lláus, que solu lus homes tapaben lus coyones, ya les muyeres la clica yal entamu, perque lus nenus andaben cuaxi d'afechu en porriques. Yera aquecha caterba de xitanus ente lus de sou clás lus mái probes, perque nin tan xiquiér teñíen nin pequenu nin ruín querru, tou contu teñíen chebábenlu d'enría de les costiétches ya del llombu de sous pótchinus. Istus xitanus per lu xeneral son mái pelligróuxus ya galaméan munchu máu depriexa d'un lláu p'oitre nun istanti, que lus que cheben querrus, pos ístus xamás faen les rapiegáes de lus oitres, perque tenen teixá dou catalus que son lus querrus dou s'ateíxan. TRADUCCIÓN.—Aquellos gitanos llegaban negros como las barras del xardu, tostados sus rostros por el sol de los caminos, así como también negros eran los cutis que lucían al aire, pues casi del todo andaban desnudos, porque tanto los hombres como las mujeres, traían sus vestidos tan rotos, tan sumamente despedazados por todas partes, que solo los hombres se tapaban los cojones y las mujeres el culo y las tetas porque los niños andaban casi completamente desnudos. —Era aquella tribu de gitanos entre los de su raza los más pobres, porque ni tan siquiera tenían ni ruino, ni pequeño carro, todo cuanto poseían lo llevaban encima de sus esqueléticas costillas y al lomo de sus pollinos. Esta clase de gitanos por regla general eran más peligrosos y se movían con más rapidez de un lado para otro en un instante, cosa que no podían hacer los que llevaban carros, pues estos jamás cometían los ladronizos de los primeros, porque tenían su casa dónde ir a buscarlos que eran los carros donde vivían. —Chuéu toes les xentes de l'aldina que teñíen dalgúna couxa que perder puxérunxe na guardia de llindiar aquechus xitanacus que lu mesmu arrapiegaben una pita, que cuallesquier oitra couxa menus les ferramientes de trabayu ya les madreñas, pos istes prexés yeren p'échus una ufenxa pa sous dinidáes. —Fexerun sou chariegu debaxu lus húrrus, xeitu dou s’ateixaben toes les xentes que comu échus espatuxaben pel mundiu adiantri, yeren ente mucheres guaxes ya homes un cabanáu de mái d'una ucena, ya sólu traíen tres pótchinus, dous burraxus grandies ya enteirus, tan flacus ya prietus comu taben échus, anxín comu 'na pótchinada pequena ya ruina, que viaxaba xin dalgun aparexu danría 'l sou cadarmeiru llombu, you nun sei xin yera perque nun tendríen mái albardes ou lú que fore, ou perque teñía un pótchinín de pouques xemanes tan famientu ya esguiláu comu tous échus. Nun istantín xebrárunse tóus nel trabayar de sous deleres, metandu qu'angunus quedaben debaxu 'l húrru dexaparexandu les couxes de lus pótchinus oitres tremáus pe l'aldina cataban buxíu pa les sous cestiquínes con mires d'escambiayes per comedera, ou leyíen la bona xuerte, ou chaben les cartes, ou miagaben llimosnes aqueches mucheres que chebaben un nenu d’entamu pal cuál pedigueñaben pel amore del Faidor dalgu de lleichi ou farina, ou pataques, ou fabes, pos ya nel atayu del pedigüeñáu tou lu que fora yera p'échus un antroxáu de festa. —Nel treminu de poucu tempu, tizarun el fuéu, puxeron el pote ya fixerun dalgu callentri, nun sei lu que yera, ya despós de ben gradiada l'aldina, rexúntarunse tóus enxemáus d'allegría, ya falandu na sou xerga metanes enzulaban el potaxín qu'encaldaran, tal paicía que yeren mái fellices que tou l'aldina xunta. TRADUCCIÓN.—Pronto todas las gentes de mi aldea que tenían alguna cosa que perder, se pusieron en guardia para cuidar aquellos gitanos, que lo mismo robaban una gallina, que cualquier otra cosa, pues todo les venía bien y érales necesario, todo menos las herramientas de trabajo y las almadreñas, pues estas preséas, eran para ellos una ofensa hacía sus dignidades muy particulares tan sólo con mirarlas. —Hicieron su campamento debajo de los hórreos de la aldea, lugar donde se aposentaban todas las gentes que como ellos caminaban por el mundo adelante, eran entre mujeres, niños y hombres, un tropel de gentes de más de una docena, y sólo traían tres pollinos, dos grandes burros sin capar, tan flacos y hambrientos como estaban sus dueños, así como una borrica pequeña y ruina, que viajaba sin ninguna clase de aparejos encima de su cadavérico lomo, bien fuese porque no tenían más albardas, o porque estaba criando un pollinín de pocas semanas tan hambriento y enflaquecido como todos los seres que componían aquella tribu. En pocos momentos se repartieron todos sus trabajos, mientras que unos se quedaban debajo del hórreo desaparejando las miserables cosas que traían encima de sus pollinos, otros se repartieron por la aldina, buscando la forma de acomodar a sus cestas en el cambio de comedera, otros leían la buena suerte, o echaban las cartas, o pedían limosnas aquellas mujeres que llevaban un niño de rollo entre sus brazos, para el cuál rogaban por el amor del Hacedor, un poco de leche, o harina, patatas, judías, pues ya caminantes en el atajo de pedir, todo cuanto les dieran para ellos era un regalo de fiesta. —Despos d’engayolar un migayu lus sous ventronacus, perque fartar nun viexen féchulu por lo rápido que habían comido, y lo poco que manejaran la cuchara, pués you agüétchabalus andar a xorbiatus de sous pletus ya cazuelus, per lu que cullumbréi que l'únicu que viexen faíu, fora callentar el estómagu conún tarreñaín de caldapius. Falu que coyerun lus sous pótchinus lus homes d'aquecha tribu 'n compaña de lus sous guaxes que comu you yeren zaragoletus, ya xebrárunxe p'escontres la veira 'l ríu, con mires de catar blimbes ya delgu de comedeira pa lus sous burraxus, perque per tous lus lláus taba la campíz amagostá d'afechu per cuaxa de les callores de tou 'l branu, peru lus pótchinus de lus xitanus manque sean viétchus rumien cuallesquier clás de fuéas ou yerbaxus, pos cundu la fame ye grandie, lu mesmu les prexones que lus anemales nun le ponen mal focicu a dalguna clás de comedera, pos tou ye comu 'n mamxar, ya les boques mái escosáes de caniles, rabilen ya ruquen cuaxi lu mesmu que xin lluciéranxe ben ferramientáes, perque la fame fae millagrus en tous lus xentíus menus nel del estómadu. —Un de lus tres pótchinus el de mexor presencia, chevaba una cabezá cuaxi nuéa, con grandies ureyeres, ya mosqueires de collorinus que remataben nunes moutes comu la de les monteires de lus xoldiáus, xegun el miou preciar, aquecha cabezá teñía mái vallor que tous lus paxiétchus, fatus, cacíus e aparexus que chelaba la tribu enteira. TRADUCCIÓN.—Después de entretener o engañar un poco el estómago, porque hartar no debieron de haberlo hecho, por lo rápido que habían comido y lo poco que manejaron la cuchara, pues yo los observaba beber con ansiosos tragos por sus platos o escudillas, por lo que saque en consecuencia, que lo único que habían hecho no había sido otra cosa, que el calentarse un poco el estómago, con aquel puchero de pobres caldos. Dígoles que nada más dejar los platos, cogieron los hombres de aquella tribu sus burros, y acompañados por los niños mayorcitos, se marcharon para la orilla del pequeño río, con miras de buscar mimbres y alguna hierba para darles de comer a sus animales, ya que por todos los lados se encontraba el campo quemado del todo por la causa del excesivo calor de aquel verano, pero los pollinos de los gitanos, así como todas las gentes y animales del mundo, bien sean viejos o nuevos, comen o rumian cualquier clase de alimentación cuando son atacados por el grande hambre, pues con esta esquelética señora por dueña, tanto las personas, como los animales, no le ponen mal hocico a ninguna clase de comida, ya que la más despreciable es un rico manjar, y hasta las bocas limpias de todo diente, trituran y rumian casi lo mismo, que las que tienen un buen dentamen, porque el hambre, hace milagros en todos los sentidos menos en el del estómago. —Uno de los tres pollinos, el de mejor presencia, llevaba puesta una cabezada casi nueva, con grandes orejeras claveteadas, y mosquiteras de diferentes colores, que terminaban en unas borlas, como las que llevan los gorros de los soldados. Según mi apreciar, aquella cabezada tenía ella solo más valor, que todos los vestidos, y demás ropas, cacharros y aparejos de toda la tribu. —Cundu lus xitanus chegarun al regueiru dexarun a la pótchina yal oitre buche xueltus, paque guarecieren per achindi 'l sou antoxu lu pocu que viexe que pastiar, metantu qu'al pótchin de la lluxóusa cabezá, l'arretrigarun al tueru d'una figaleta, chandói achindi delgu de xegáu qu' apradiaben per les xinuexes veires del regueiru, que xegaretaben conún foicinacu, tal paicíe qu’aquel pótchin tratábenlu mexor que a lus oitres, per unguna razón que you entavía nun comprendíe, achindi rucandu arretrigáu a la figalina taba enzulandu lu quei chaben, metandu qu'al lláu d'él taba un xitanu pulgandu ou escortexandu blimbes, cundu paxóu per el cháu d'él Pín el Xordapu, que comencipióu a nomaxe 'l Toipu disdi aquel mesmu díe. Pín qu'entendía d'animales per viexe criáu xempre 'l lláu d'échus, cundu agüétchou aquel burru de bona prexencia, que rucaba comu 'n condenáu aquechus yerbatus, ya qu'auxaba les mosques a patáes, rabotazus ya fasta con xeniu col sou focicu fasta 'l xeitu qu'el ramal lu dexare, comencipióu a falar col xitanu de couxes que you nun ureaba perque taba dalgu lonxe d'échus xugaretiandu a lus mious deleres, metantu uxerba a lus xitanus lu que faíen per la veira del regueiru, anxín me lu dixu que fixera miou tíu, que teñía un patacal per aquechus chugares, ya nun fora que lus xitanus fozaran en él ya l'arrapiegaren un manegáu de pataques. —Nagua you les uyía de lu que falaben, peru xin qu’agüétchaba a Pín afilbanar per tous lus lláus al buche con güeyáes ximulóuxes, pa despós cundu s'allevantóu 'l xitanu dexandu 'l sou trabayu, comincipiar a rexistrar el burru anxín per altu. Despós vilu colar pala sou teixá, paiciéndume qu'espatuxaba mái llixeiru qu'oitres veices, al ratiquín vilu golguer col sou burriquín del ramal, qu’al colocalu ‘l lláu del d'el xitanu paicía un nanu pelu pequenu ya rancuátchu que yera, fói entoncienes cundu m'ariméi 'l lláu d'échus cundu envidayéi que diben cheldar un tratu. TRADUCCIÓN.—Cuando los gitanos llegaron al riachuelo, dejaron a su borrica y al otro pollino sueltos, para que pacieran por allí a su antojo, lo poco que había que patiar mientras que el pollino de la lujosa cabezada le amarrarón al tronco de una pequeña higuera, y allí le dieron algo de pación que recogían en las cuestas y difíciles orillas del torrente, que segaban con una pequeña hoz, tal parecía que aquel pollino le cuidaban mejor que a los otros, por alguna secreta razón que yo no comprendía. Allí rumiando atado a la higuera estaba comiendo lo que le daban, mientras que al lado de él, sentado se encontraba un gitano que parsimoniosamente pelaba las mimbres para hacer cestas, cuando acertó casual o intencionadamente a pasar por el lugar Pín el Sordo, que se comenzaría a llamarlo Pín el Topo en toda la aldea y sus contornos desde aquel mismo día. —Pín que entendía mucho de animales por haberse criado toda su vida entre ellos cuando vio aquel burro de tan buena presencia, que comía como un desespera aquellos hierbajos, que cualquiera de sus animales despreciaría, y que par espantaba las moscas dando recios y enérgicos coces, fuertes rabotazos y hasta con su hocico con recio regio las espantaba hasta el lugar que se lo permitía el ramal que le ataba. Se detuvo y empezó a dialogar con el gitano de cosas que yo no podía oír por encontrarme demasiado alejado de ellos jugando a mi manera, mientras que en todo momento observaba a los gitanos todos sus movimientos, pues así me lo había ordenado un tío mío, que tenía una huerta sembrada de patatas por aquellos lugares, y no fuera a ser que estos condenados entrasen en ella, y le robasen un grande cesto de patatas. —Nada de cuanto hablaban les escuchaba, pero si que observe a Pín con miradas simulosas propiar al pollino por todas partes, para después, cuando se levanto el gitano y dejó su trabajo, comenzar a registrar al jumento así por encima sin mucho detenimiento, para después marcharse camino de su casa, pareciéndome a mí que caminaba con más ligeraza que otras veces. Al poco tiempo le vi retornar con su borriquito del ramal, que al colocarle al lado del de el gitano, tal parecía un enano por lo pequeño y ruin que era, mi curiosidad me hizo acercarme al lado de ellos, y así pude comprobar como querían hacer un trato. —Cundu 'l xitanu agüeyóu 'l buchacu de Pín xonriyendu le dixu, que comu teñía la poucu vergüenxa del querer cambear el sou buchecín, que yera de fierru ferrunóuxu, per el sou pótchin, que yera de goru macizu, pos xin él tal couxa fixera xemeyaría 'l toipu que cambeóu lus güétchus pel ráu. Pín comencipióu falale que xin dalgu tenía qu'apurriye que fora xustu ya non una rapiegada, pos achindi taba pa tóu lu que fore honréu. El xitanu entóus comencipióu a rexistrar el burrín de Pín conél esprapayu de maestru nel ufixu, palpulu ya miróulu tóu em menus tempu del cantíu del pitu, ya despós díxole, qu'l sou borriquín yera mu vieyu, quei faltaben dalgunus molares ya que teñía l'amolaxura de la foría, total que xin quería camiar el buche teñía qu'apurriye déz pexus enría, ya dous pela cabeza, pos al sou pótchin nunye xeivía perque coyíu tou él dientru d'écha. Pín el Xordapu coyu 'l xitanu pela pallabra ya díxole, que taba d'acurdu 'n apurriye lus déz pexus pel pótchín ya dái 'l suyu enría, peru pelu que nun entraba yera nel mercái la cabezá, pos xospechaba qu'aquel lluxóuxu arñés yera 'l frutu d'una rapiegá, ya nun fora la couxa qu'un díe topara 'l sou amu per dalgún merquéu ou feria ya viexese nun vergüenzóuxu compromixu. —Fáigarne 'l favor paixanu, contestoye 'l xitanu nel char del noxáu. ¿Vusté nun ten güeyus nixe focicu de magüetu que ten, p'uxervar qu’ista carbezá ta fecha a la medía del niou pótchin? —Pos xin penxa qu'el cabezal foi afoinái, penxe tamén qu'el burru foi rapiegáu, ya cole con priexa a denunciábe, agora manque m’apurra venti pexus pel pótchin, ya cuatru pel cabezáu nun encaldaríe con úste tratu dalgún perque ye un paixanu escosu de mótchera, anxín que xébrese del miou lláu xinún quer que nus engarradiemus per nomame lladrón. TRADUCCIÓN.—Cuando el gitano vio el enclenque burro de Pín sonriéndose despreciativamente le dijo: —Que como tenía la poca vergüenza de querer cambiarme aquel despreciable borrico que era de hierro herrumbroso, por el su preciado pollino que era de oro macizo. Pues si tal cosa yo hiciese, decía sonriente el gitano, me parecía al topo, que cambió los ojos por el rabo. Pín con suaves palabras le dijo, que si algo de dinero le tenía que dar encima, que fuera una cosa justa y no una ladronada, que allí estaba él para lo que fuese honrado. —El gitano entonces comenzó a buscar los defectos del borrico de Pín, con la experiencia de ser consumado maestro en tal oficio, lo tocó y lo miró entero en menos tiempo del canto del gallo, y después muy seriamente le dijo, que su borrico era muy viejo, que le faltaban algunas muelas, y que tenía el mal de tener muy a menudo diarreas, total que si quería cambiar su pollinín por el suyo, le tenía que dar diez duros encima y dos más por la cabezada, ya que a su pollino no le servía, pues cogía todo él dentro de ella. —Pín el Sordo asiendo al gitano por su palabra le dijo, que estaba de acuerdo en darle los diez pesos por su pollino y el suyo encina, pero por lo que no pasaba era por el comprarle la cabezada, pues sospechaba que aquel lujoso arnés, era sin duda el fruto de un robo, y no fuera la cosa que un día se encontrara con su dueño en algún mercado o feria, y él se viese metido en un vergonzoso compromiso. —Hágame el favor paisano, le contestó el gitano muy enojado y sulfurado, ¿usted no tiene ojos en su cara de bestia para observar que esta cabezada esta hecha a la medida de mi pollino? —Y si piensa que este cabezal ha sido robado, piense también que el pollino venía con él, y ya sabiendo o suponiendo que entrambas cosas son de la procedencia de la rapiña, puede usted marchar con prisa a denunciarme, porque yo ya no le cambiar mi pollino por su enclenque borriquillo, ni aunque me dé veinte duros encima y cuatro más por la cabezada. Así pues, hágame el favor de marcharse de mi lado sino quiere que nos enzarcemos a leñazos, por la causa de usted haberme ofendido llamándome ladrón. —Nun quixe ufendélu bon xitanu, peru you xempre disdi guaxín ureéi falar a les xentes viétchas, qu'el ufixu de lus xitanus ye 'l faer curioxas cestiquines de blimbles, arrapiegar lu que fore ya enduétbichar fadiernus tratus entivocandu lus iñoxentes paixanus. Anxina ye qu'arretiru lu de chamalu lladrón, ya choquémonus la mán dandu per fechu isti tratu. —El xitanu con punxes plasmáes nel sou esquelléticu focicu de tar entabía m' enoxáu díxole a Pín el Xordapu nel encaldar que l'apurría la sou mán, xamás niegu you la miou mán al que pide perdón, peru llancáu t'entavía nel miou vidayu l’ufenxa que me fexu, per ísfu, ya metantu nun se xebre d'afechu de la miou mótcheira, dexemus el tratu namái que nu faláu, ya xin disdi aquindi a la nuetche se me xebra la noxaura, entóus a lu mexor damus el tratu per zarráu. —Cundu chegóu 'l atapecer del díe, Pín el Xordapu fexu prexencia 'l lláu lus hurrus, per ver xin al xitanu le viexe xapaicíu 'l enoxu, ya puénxuse mu cuntentu cundu l'agüétchou reyixe m'allegre ya fellíz al lláu de les sous xentes, per ístu achegóuxe 'l lláu d'él ya nel cheldar quei poñía la mán denría 'l sou homo le dixu. —Bonu xitanu, quéi faemus el tratu ciarrándulu d'afechu ou entavía s'enllamuerga nel char del tar enoxáu. —El xitanu dichadicheiru le dixu que ya taba tan contentu comu endenantes de velu coñocíu, ya qu'el tratu taba piétchau xin d'enría de l'acordiáu l'apurría un cestu pataques pa faer la cena ya un xarricáu de lleiche pa lus nenus pequenus. —Ya fecha la nuetche d’afechu, zarrarun el tratu entrambos cuntentus ya mu xatisfechus, ya Pín el Toipu, colóu pa la sou teixá chevandu 'l burru 'l xitanu pel ramal del lluxosu cabezal, falandoi sou vidayu que viexe fechu un xegún sou paicer,un fadiernu tratu ya qu’el sou pótchinacu naide n'aldea lu quixés manque fora de regalu. Anxín qu‘achegóu a la sou corte col nuéu pótchin, arretrigolu na pexebleira, chói un bon brazáu de yerbe, ya metandu qu'el burru esgalazáu de fame l’ensulaba con priexa, palpolu ya reparóulu per tous sous lláus menus pe lus güétchus, ya quedóu prendáu d'el en tous lus xentíus. TRADUCCIÓN.—No he querido ofenderle buen gitano, pero yo desde niño siempre he oído decir a las gentes viejas, que el oficio de los gitanos, es el hacer hermosas y serviciales cestas de mimbres, robar todo cuanto tuvieran a mano, y enredar buenos tratos equivocando a los inocentes paisanos. Así que retiro lo de llamarle ladrón, y démosnos la mano dando por hecho este trato. —El gitano con señales plasmadas en su esquelético rostro de encontrarse muy enojado, le dijo a Pín el Sordo en el hacer que le daba su mano. —Jamás niego yo mi mano a quién me pide perdón, pero clavado tengo todavía en mi pensamiento la ofensa que me ha hecho al llamarme ladrón, por esta razón, mientras que no se marche del todo de mi pensamiento tan dañino sentimiento, dejemos el trato nada más que en lo hablado, y si desde aquí a la anochecer puedo olvidar la enfadadura que me ha hecho, entonces a lo mejor daremos el trato por hecho. —Cuando llegó el oscurecer del día, Pín el Sordo hizo acto de presencia al lado de los hórreos, para saber si al gitano ya le hubiese desaparecido el enfado, y se puso muy contento cuando le vió, reírse muy alegre y feliz al lado de sus gentes, por esta razón se acercó a su lado, y en el hacer que le ponía halagosamente una mano encima de su hombro le dijo: —Bueno gitano, qué hacemos el trato dándolo por terminado del todo, o todavía se remoja usted en el lar de estar enojado. —El gitano parlanchín y alegre le dijo, que ya se encontraba tan contento como antes de haberle conocido a él, y que el trato estaba cerrado y bien hecho, si encima de lo acordado, le daba un cesto de patatas para hacer la cena, y una jarra de leche para los niños pequeños. —Ya hecha la noche por completo, dieron el trato por hecho, entrambos muy contentos y satisfechos, Pín el Toipu marchó para su casa llevando al burro del gitano asido por el ramal de la lujosa cabezada, diciéndole en silencio su cerebro, que había hecho según su parecer un buen negocio, ya que su pollino nadie en su aldea lo quería aunque lo regalase. Así que llegando a su cuadra con su nuevo burro le ató a la pesebrera, le dio un buen pienso de hierba y mientras que el pollino con grande apetito la engullía con prisa, le palpó y reparó cuidadosamente por todas sus partes menos por los ojos, y quedó prendado de él en todos los sentidos. —Cundu lus malvixus xilbiaban lus albiares d'oitre díe, lus xitanus se xebraben muy cuntentus de miou aldina, ye d'antigu 'l xaber, que cundu lus xitanus encaldan anguna rapiegá, xempre colen endenantes de que les xentes del llugar espierten p'escubriya, foi anxina naquel xuceder, pos cundu Pín El Toípu fói atreínar el ganáu a la sou corte, lu primeiru que fexu fói chái una güétcha 'l sou nuéu pótchín ya viólu corriudu ya uriscu, paiciénduye que despós la fartura de bona yerbe que viexe enzuleu, fasta llucía mexor pelaxe, metandu que faluchandu conxigu mesmu se decía, que namái que auxare la fame del sou curpu, aquel pótchin diba ser mu nomáu n'aldina. —Despós d'abrañar les dous bétchaes que tenía na corte, perqu'el oitre ganáu taba nel puertu, dióule la sou mucher d'almorzar un bon escudítchau de papes con lleichi cabantes d'afoxinar, ya despós de fartu, díxole a la sou muyer que diba dír al puertu pa ver comu s'atopaba 'l ganáu, ya que diba dire axinetáu nel burru p'uxervar la xixa a maneires que tenía. —Anxina foi, que xacóu 'l pótchin de la corte pel ramal fasta la correlá de sou teixu, dou la sou mucher l'aguardaba p'agüétchalu per primeira véiz, ya namái quei llancóu lus sous güeyus denriba, díxole cuntenta 'l sou home que viexe fechu xegún picíe un fadiernu tratu, Pín el Toípu metandu l'aparexaba con l'albardaxa del oitre pótchin que de pequena quei venía cuaxi nui algemía, falabai a la sou muyer ameruxáu d'allegría ya envelexáu per dáxeyes de llistu ante la sou muyer, qu'urear nun uriaba munchu per cuaxes de la sou xordeira, peru qu'al güeyu yal vidayu poucus l'algamían, la sou muyer que yera una andoyona reyía fellíz escontres el sou llistu home, ya entrambus per aquel pótchin per un momentu forun fellices, fasta que Pín escarranquetánduxe denría 'l pótchin, díxole a la sou muche que lluéu taría de regolguía, nel encaldar que con el sou cayaducu l'apuría 'l burru cuaxi cuaxi falagoxamente paque comencipiara a caminar, e anxina lu fexu 'l pótchin ya nun paróu fasta qu'el sou focicu nun truñóu escontres la porta de la teixá del Puchegu, que taba cual char tamén almorzandu les papes, ya dexandu la tareña xaliú a la caleya dou vióu a Pín el Toipu andar al remolín d’un lláu p’oitre de la caleya xin faer brexu d'aquel condenáu pótchin per munchu que col cayáu ya les brindes l’acaidonaba el xétchu d'andar drechu couxa qu'el probe pótchin nun podíe faer per que taba ciegu comu ‘n toípu, ya nun l’escubrióu Pín xinún el Puchegu, que yera un útre p’urear, agüétchar ya envidayar cuallesquier bétcha ou escosá couxa. Ya comu bon puchegu falói a Pín dista maneira: TRADUCCIÓN.—Cuando los tordos malvises silbaban a los despertares del alba alegres y felices del naciente día, los gitanos muy contentos y dichosos se marchaban de mi querida aldea. Es de antiguo ya sabido entre las hidalgas y nobles gentes de estos maravillosos y embrujantes valles y montañas, que cuando los gitanos hacen algún ladronizo, engaño o timo, siempre se ausentan antes que las personas del lugar se despierten para descubrirlos, y así fue en aquel acontecer, pues cuando Pín el Topo ya con el día alumbrado del todo, fue a su cuadra a ordeñar y cebar al ganado, lo primero que hizo fue mirar con marcado profundo a su nuevo pollino, y lo vió recio, con genio espantadizo, pareciéndole a él, que después de la buena hartura de la excelente hierba que había comido, parecía más lucido su pelaje, y hablando consigo mismo muy contento se decía, que nada más que se alejara el hambre de su cuerpo, aquel pollino iba a ser muy renombrado en la aldea. —Después de arreglar las dos vacas paridas que tenía en el establo, porque el otro ganado que tenía por aquella época estaba en el puerto pastiando, le dió su mujer el desayuno, que consistía en una escudilla grande de harina cocida, comida a la par de la espumosa leche recién ordeñada, y después que se hartó, le dijo a su mujer, que iba a ir hasta el puerto, para ver como se encontraba el ganado, y que iba montado sobre el burro, para observar su fuerza y las otras maneras que pudiera tener. Así fue que sacó al pollino de la cuadra cogido de su ramal hasta la corralada de su casa, donde su mujer le esperaba para mirar por primera vez aquel burro tan aponderado de su marido, y nada más que sus ojos le repararon con interesado deseo, díjole muy contenta a su marido, que hubiese hecho según su apreciación un buen trato. —Pín el Toípu mientas le aparejaba con la albarda del otro pollino que de pequeña que era casi no le valía, le decía a su mujer lleno de alegría y endiosado por sentirse agudo y listo ante los ojos de su mujer. —Yo oír no oigo mucho por causa de la sordera, pero a vista e inteligencia muy pocos me alcanzan. La su mujer que era una inocentona, se reía muy feliz hacía su listo marido, y entrambos por aquel pollino en aquellos momentos se sentían felices, y a la par que Pín montaba en su pollino a su mujer le hacía, que muy pronto estaría de vuelta, y seguido le daba al burro con el callado casi, casi como halagándole para que se pusiese en camino, y así lo hizo el buen pollino, no deteniéndose en su camino, hasta que su hocico no tropezó contra la puerta de la casa del satírico, que en aquel suceder también estaba desayunando las papes, y ante tal golpetazo, dejó su escudilla saliendo con rapidez a la calleja, donde vio a Pín el Topo dando vueltas a caballo de su burro de un lado para otro de la calle, sin poder conducir aquel condenado asno, por mucho que lo intentaba con el callado y las bridas para ensenderarlo en el surco del caminar enderechura, cosa que el desgraciado pollino no podía hacer, porque se encontraba tan ciego como el topo, y no descubrió este mal Pín, sino que fue su vecino Satírico, que era un verdadero águila en el oír, ver y pensar en cualquier rica o pobre cosa, y como buen satírico que era le habló a Pín de esta manera: —Disdi güéi Pín el Xordapu tou l'aldina chamarate Pín el Toípu, perque hay que tar de cegaretu comu isti llabrador xin llabiegu, pa nun ver disdi prinxipíu qu'isti pótchin nun vei goteira per dagún de lus dous güetchus. Pín baxóuxe del pótchin xin gurniar pallabra, falagóu 'l burru comu dandói nel entender que nun taba noxáu escontres d'él, coyólu pel ramal ya golguióu arretrigalu na sou corte, dexaparexólu ya chandoi un bon brazáu de yexbe axentóuxe nel pexeble xuntu dél, comencipiandu falaye d'ista maneira: —Nun cuntes miou pótchin que tóu noxaón escontres tigu per que tás cegaretu you sei que yes un bón pótchin, grandie, forte, sanu ya enteiru comu se foxes de parada, per ístu d'aquindi nadiantri you seréi lus tous güetchus, ya tóu farás lus mious trabayus, you te chevaréi ben acaidonáu pel ronzal, ya farás lus mesmus trabayus que cualesquier pótchin de l'aldina, l'únicu que nun podréi será 'l axinetame d'enría tigu, peru de tous lus demás llabores nun me dexarás d'encaldar dalgún, anxine ye, que cuaxi tou contentu de ver fechu 'l tratu con lus condenáus xitanus, quei conisti tratu que fexe conechus, per rexultar tóu cegeretu d'afechu, llimpiarúnme disdi güéi 'l nome de Pín el Xordapu, 'l chamane 'l Puchegu Pín el Toípu, que ye lu mesmu que xin me bautizar el cura. —Y'Anxina foi comu xucedióu, pos aquel xigante de pótchin cegaretu, acaidonáu per el bon envidátchar de Pín el Toípu, yera queríu, aponderáu ya respetáu nun solu na miou aldina, senún entoes les oitres de l'arredonda, ya yera tan renomáu aquel pótchin, perque faía couxes qu'enxemás fixérales dalgún burru que tuviexe lus güeyus con bona vista. El pótchín conel bon pexeble refachénduxe nel cheldar qu'auxaba la fame del sou curpu, ya comu yera xoven dientru lu que cueye, féxose un pótchinon cuaxi paicíu a lus de les paráes de xementales. —Un díe 'l sou veicín díxole a Pín qu'andaba la sou pótchuca callentri, ya quei xin le doxaba que la cabriere 'l sou pótchin, Pín que nun algamíe a faer les puches tamén encalducades comu les cheldaba el sou veicín el Puchegu que foi capaz d'escambiaye 'l nome, xin qu'el sou vidayu cuaxi xempre con intelixencia l'allambraba, per ístu arrespondióule axindi: —Comu 'l miou cegaretu pótchin ye xemental de postineira parada, ya nun solu per sou prexencia, xinún perque paez que ten fasta pequenina alma, xin quiés que cubra la tou pótchina tenes qu'apurrime un pexu, ya isu atinde que yes veicín de la porta la teixada, peru a toes les oitres xentes que queran pedime lu mesmu que tou, cobrareyes dous pexetes mái, perque tener na corte descendencía del miou pótchin, ye teñer la meyor xoya de la pótchineria. Conistu queru falate queríu veicín de la porta la teixá, que con la rebaxa que te faigu ben me pués faer una bona propaganda. TRADUCCIÓN.—Desde el día de hoy Pín el Sordo, toda la aldea te llamará Pín el Topo, porque hay que estar tan ciego como este labrante sin arado, para no ver desde principio que este pollino no veía ni gota por ninguno de entrambos ojos. Pín se apeo de su asno sin pronunciar palabra, a la vez que halagaba al pollino, dándole a entender que no estaba enojado con él y asiéndole por el ramal le volvió a atar dentro de su establo, lo desaparejo y le dio un buen brazado de hierba, y sentándose en el pesebre junto a él, comenzó a hablarle de la siguiente forma: —No pienses mi pollino que estoy enojado contigo, porque te encuentras completamente ciego, yo se muy bien que eres un buen pollino, grande, fuerte, sano y entero, como si fueses de la parada de los sementales, por esto, de ahora en adelante, yo seré tus propios ojos y tu harás los mis trabajos, yo te llevaré bien conducido por el ramal y harás los mismos quehaceres de los demás pollinos de la aldea, lo único que no podré será el ajinetarme encima de tu lomo, pero de todos los demás labores, se que no dejarás de hacer ninguno y hasta puede que los realices mejor que el más avispado de tus hermanos de burrería, por está razón te digo, que casi me encuentro contento de haber realizado tu trato con los condenados gitanos, pues por haber hecho tal negocio con ellos, al resultarme tú del todo ciego, mis vecinos me quitaron desde hoy el nombre de Pin el Sordo, desde el mimo momento que el Puchegu me llamó Pín el Topíu, que es lo mismo que si me bautizase el cura de nuevo. —Aquel gigante de ciego pollino, bien dirigido por el inteligente Pín el Topo, con tal precisión realizaba todos sus trabajos, que era querido, aponderado y respetado, no sólo por las gentes de mi aldea, sino en todas las otras que la rodeaban. Y era tan renombrado aquel excepcional pollino, porque hacía cosas que jamás habían sido hechas por ningún otro pollino aunque tuviese los ojos con buena vista, el ciego burro, que siempre tenía el pesebre lleno de buena hierba, que érale para él manjar divino, engordó y se rehizo, al tenor que iba sacando la miseria y el hambre de su cuerpo, y como era aun joven dentro de lo que cabía, se hizo un pollino aún casi mejor que los que tenían de sementales en la cuadra de la parada. —Un día su vecino el Puchego, le dijo a Pín que su pollina andaba en el celo de necesitar semental, y que si le dejaba que su pollino la cubriera. Pín que no alcanzaba el hacer las sátiras tan bien niveladas y agudas como el Puchegu, que fue capaz de cambiarle el nombre de Pín el Sordo por el de Pín el Toípu, si que su pensamiento casi siempre navegante en la inteligencia le alumbró lo siguiente. —Como mi ciego pollino es semental de postinera parada, y no sólo por su gallarda presencia, sino porque tal parece que también tiene una pequeña alma, si tú deseas que cubra a tu pollina, me tienes que pagar por tal servicio un duro, y esto a ti que eres vecino de la puerta de casa, pero a todas las demás gentes que quieran pedirme lo mismo que tú, les cobraré dos pesos más, pues tener en el establo una descendencia de mi pollino, es lo mismo que poseer la mayor joya de toda la burrería. Con esto pretendo decirte querido vecino de la puerta casa, y con la rebaja que te estoy haciendo, tú bien me puedes hacer una buena propaganda.

    Primer Diccionario Enciclopédicu de la Llingua Asturiana > xitanus

  • 15 good

    ɡud
    1. comparative - better; adjective
    1) (well-behaved; not causing trouble etc: Be good!; She's a good baby.) bueno; educado
    2) (correct, desirable etc: She was a good wife; good manners; good English.) bueno, correcto
    3) (of high quality: good food/literature; His singing is very good.) bueno
    4) (skilful; able to do something well: a good doctor; good at tennis; good with children.) bueno, competente
    5) (kind: You've been very good to him; a good father.) bueno, amable
    6) (helpful; beneficial: Exercise is good for you.; Cheese is good for you.) bueno; útil, beneficioso
    7) (pleased, happy etc: I'm in a good mood today.) bueno, buen (humor), satisfecho, contento
    8) (pleasant; enjoyable: to read a good book; Ice-cream is good to eat.) bueno, agradable
    9) (considerable; enough: a good salary; She talked a good deal of nonsense.) bueno, apropiado, adecuado, suficiente
    10) (suitable: a good man for the job.) bueno, apto, cualificado, adecuado
    11) (sound, fit: good health; good eyesight; a car in good condition.) bueno; sano; en buenas condiciones
    12) (sensible: Can you think of one good reason for doing that?) bueno
    13) (showing approval: We've had very good reports about you.) bueno, positivo
    14) (thorough: a good clean.) bueno; profundo
    15) (healthy or in a positive mood: I don't feel very good this morning.) bien, sano, en forma

    2. noun
    1) (advantage or benefit: He worked for the good of the poor; for your own good; What's the good of a broken-down car?) bien, provecho, beneficio
    2) (goodness: I always try to see the good in people.) bien, bondad, lado bueno

    3. interjection
    (an expression of approval, gladness etc.) bueno, bien

    4. interjection
    ((also my goodness) an expression of surprise etc.) ¡Dios mío!
    - goody
    - goodbye
    - good-day
    - good evening
    - good-for-nothing
    - good humour
    - good-humoured
    - good-humouredly
    - good-looking
    - good morning
    - good afternoon
    - good-day
    - good evening
    - good night
    - good-natured
    - goodwill
    - good will
    - good works
    - as good as
    - be as good as one's word
    - be up to no good
    - deliver the goods
    - for good
    - for goodness' sake
    - good for
    - good for you
    - him
    - Good Friday
    - good gracious
    - good heavens
    - goodness gracious
    - goodness me
    - good old
    - make good
    - no good
    - put in a good word for
    - take something in good part
    - take in good part
    - thank goodness
    - to the good

    good1 adj
    1. bueno
    2. bueno / amable
    he's been very good to me ha sido muy amable conmigo / se ha portado muy bien conmigo
    good for you! ¡bien hecho!
    to be good at something tener facilidad para algo / ser bueno en algo
    El comparativo de good es better; el superlativo es best
    good2 n bien
    what's the good of shouting if nobody can hear you? ¿de qué sirve gritar si nadie te oye?
    tr[gʊd]
    adjective (comp better, superl best)
    1 bueno,-a (before m sing noun) buen
    2 (healthy) sano,-a
    3 (beneficial) bueno,-a
    4 (kind) amable
    5 (well-behaved) bueno,-a
    be good! ¡sé bueno!
    6 (useful) servible
    1 muy
    1 ¡bien!
    1 SMALLCOMMERCE/SMALL (in shop) género m sing, artículos nombre masculino plural
    1 SMALLCOMMERCE/SMALL (merchandise) mercancías nombre femenino plural
    \
    SMALLIDIOMATIC EXPRESSION/SMALL
    a good deal bastante
    all in good time todo a su debido tiempo
    as good as como si, prácticamente, casi
    for good para siempre
    for the good of en bien de
    good afternoon buenas tardes
    good evening buenas tardes
    Good Friday Viernes Santo
    good heavens!, good grief! ¡cielo santo!
    good morning buenos días
    good night buenas noches
    it's a good job menos mal
    that's a good one! (joke) ¡ésta sí que es buena!
    to be as good as new estar como nuevo,-a
    to be as good as gold ser un ángel
    to be good at tener aptitudes para
    to be good for a laugh familiar ser muy divertido,-a, ser muy cachondo,-a
    he's good for nothing no sirve para nada, es un inútil
    to be up to no good estar tramando algo
    to deliver the goods (literally) repartir las mercancías 2 (fig) cumplir sus compromisos
    to do good hacer bien
    to feel good sentirse bien
    to have a good time pasarlo bien
    to look good (person) tener buen aspecto 2 (food) tener buena pinta
    to make good (be successful) tener éxito, salir bien 2 (reform) reformarse 3 (compensate) indemnizar
    what's the good of «+ ger»? ¿de qué sirve + inf?
    what's the good of denying it? ¿de qué sirve negarlo?
    goods train tren nombre masculino de mercancías
    goods wagon furgón nombre masculino, vagón nombre masculino de mercancías
    goods yard estación nombre femenino de mercancías
    good ['gʊd] adv
    a good strong rope: una cuerda bien fuerte
    2) well: bien
    good adj, better ['bɛt̬ər] ; best ['bɛst]
    1) pleasant: bueno, agradable
    good news: buenas noticias
    to have a good time: divertirse
    2) beneficial: bueno, beneficioso
    good for a cold: beneficioso para los resfriados
    it's good for you: es bueno para uno
    3) full: completo, entero
    a good hour: una hora entera
    4) considerable: bueno, bastante
    a good many people: muchísima gente, un buen número de gente
    5) attractive, desirable: bueno, bien
    a good salary: un buen sueldo
    to look good: quedar bien
    6) kind, virtuous: bueno, amable
    she's a good person: es buena gente
    that's good of you!: ¡qué amable!
    good deeds: buenas obras
    7) skilled: bueno, hábil
    to be good at: tener facilidad para
    8) sound: bueno, sensato
    good advice: buenos consejos
    9) (in greetings) : bueno
    good morning: buenos días
    good afternoon (evening): buenas tardes
    good night: buenas noches
    good n
    1) right: bien m
    to do good: hacer el bien
    2) goodness: bondad f
    3) benefit: bien m, provecho m
    it's for your own good: es por tu propio bien
    4) goods npl
    property: efectos mpl personales, posesiones fpl
    5) goods npl
    wares: mercancía f, mercadería f, artículos mpl
    6)
    for good : para siempre
    adj.
    bueno, -a adj.
    n.
    bien s.m.
    provecho s.m.

    I gʊd
    1) adjective (comp better; superl best) [The usual translation, bueno, becomes buen when it is used before a masculine singular noun]
    2) <food/quality/book> bueno

    it smells good — huele bien, tiene rico or buen olor (AmL)

    to make good something: they undertook to make good the damage to the car se comprometieron a hacerse cargo de la reparación del coche; our losses were made good by the company la compañía nos compensó las pérdidas; to make good one's escape — lograr huir

    3) ( creditable) <work/progress/results> bueno
    4) (opportune, favorable) <moment/day/opportunity> bueno

    is this a good time to phone? — ¿es buena hora para llamar?

    it's a good job nobody was listening — (colloq) menos mal que nadie estaba escuchando

    5) (advantageous, useful) <deal/offer/advice> bueno

    burn it; that's all it's good for — quémalo, no sirve para otra cosa

    it's a good idea to let them know in advanceconvendría or no sería mala idea avisarles de antemano

    good idea!, good thinking! — buena idea!

    6) ( pleasant) bueno

    to be in a good mood — estar* de buen humor

    did you have a good flight? — ¿qué tal el vuelo?

    7) (healthy, wholesome) <diet/habit/exercise> bueno

    I'm not feeling too good — (colloq) no me siento or no me encuentro muy bien

    9)

    good morning — buenos días, buen día (RPl)

    good! now to the next question — bien, pasemos ahora a la siguiente pregunta

    good grief/gracious! — por favor!

    very good, sir/madam — (frml) lo que mande el señor/la señora (frml)

    c) ( for emphasis) (colloq)
    d)

    as good as: it's as good as new está como nuevo; he as good as admitted it — prácticamente lo admitió

    10) (skilled, competent) bueno

    to be good AT something/-ING: to be good at languages tener* facilidad para los idiomas; he's good at ironing plancha muy bien; he is good with dogs/children tiene buena mano con or sabe cómo tratar a los perros/los niños; she is good with her hands — es muy habilidosa or mañosa

    11) (devoted, committed) bueno

    a good Catholic/socialist — un buen católico/socialista

    12)
    a) (virtuous, upright) bueno
    b) ( well-behaved) bueno

    be good — sé bueno, pórtate bien

    13) ( kind) bueno

    to be good TO somebody: she was very good to me fue muy amable conmigo, se portó muy bien conmigo; it was very good of you to come muchas gracias por venir; good old Pete — el bueno de Pete

    14) (decent, acceptable) bueno

    to have a good reputation — tener* buena reputación

    15) ( sound) <customer/payer> bueno
    16) ( valid) <argument/excuse> bueno

    it's simply not good enough! — esto no puede ser!, esto es intolerable!

    17) (substantial, considerable) <meal/salary/distance> bueno

    there were a good many people therehabía bastante gente or un buen número de personas allí

    19) (thorough, intense) <rest/scolding> bueno

    II
    1)
    a) u ( moral right) bien m

    to do good — hacer* el bien

    to be up to no good — (colloq) estar* tramando algo, traerse* algo entre manos

    b) ( people)

    the good — (+ pl vb) los buenos

    2) u
    a) ( benefit) bien m

    for the good of somebody/something — por el bien de algn/algo

    to do somebody/something good — hacerle* bien a algn/algo

    lying won't do you any good at all — mentir no te llevará a ninguna parte, no ganarás or no sacarás nada con mentir

    b) ( use)

    are you any good at drawing? — ¿sabes dibujar?

    3) goods pl
    a) ( merchandise) artículos mpl, mercancías fpl, mercaderías fpl (AmS)

    manufactured goodsproductos mpl manufacturados, manufacturas fpl

    to come up with o deliver the goods — (colloq) cumplir con lo prometido; (before n) <train, wagon> (BrE) de carga; < depot> de mercancías, de mercaderías (AmS)

    b) ( property) (frml) bienes mpl

    III

    it's been a good long while since... — ha pasado su buen tiempo desde...

    you messed that up good and proper, didn't you? — (BrE colloq) metiste bien la pata, ¿no? (fam)

    2) (AmE colloq) (well, thoroughly) bien
    [ɡʊd]
    1. ADJECTIVE
    (compar better) (superl best) When good is part of a set combination, eg in a good temper, a good deal of, good heavens, look up the noun. The commonest translation of good is bueno, which must be shortened to buen before a masculine singular noun.
    1) (=satisfactory)

    at the end of the day, it's a good investment — a fin de cuentas es una buena inversión

    Note that [bueno]/[buena] {etc} precede the noun in general comments where there is no attempt to compare or rank the person or thing involved:

    if he set his mind to it, he could be a very good painter — si se lo propusiera podría ser muy buen pintor

    [Bueno]/[buena] {etc} follow the noun when there is implied or explicit comparison:

    I'm not saying it's a good thing or a bad thing — no digo que sea una cosa buena, ni mala

    Use [ser] rather than [estar] with [bueno] when translating [to be good], unless describing food: Use [estar] with the adverb [bien] to give a general comment on a situation:

    you've written a book, which is good — has escrito un libro, lo que está bien

    his hearing is good — del oído está bien, el oído lo tiene bien

    b)

    she's good at maths — se le dan bien las matemáticas, es buena en matemáticas

    that's good enough for me — eso me basta

    it's just not good enough! — ¡esto no se puede consentir!

    40% of candidates are not good enough to pass — el 40% de los candidatos no dan el nivel or la talla para aprobar

    to feel good — sentirse bien

    I don't feel very good about that *(=I'm rather ashamed) me da bastante vergüenza

    we've never had it so good! * — ¡nunca nos ha ido tan bien!, ¡jamás lo hemos tenido tan fácil!

    how good is her eyesight? — ¿qué tal está de la vista?

    you're looking good — ¡qué guapa estás!

    things are looking good — las cosas van bien, la cosa tiene buena pinta *

    you can have too much of a good thinglo mucho cansa (y lo poco agrada)

    it's too good to be true — no puede ser, es demasiado bueno para ser cierto

    he sounds too good to be true! — ¡algún defecto tiene que tener!

    she's good with cats — entiende bien a los gatos, sabe manejarse bien con los gatos

    good 2., manner 4), a), mood II, 1., time 1., 5)
    2) (=of high quality)
    3) (=pleasant) [holiday, day] bueno, agradable; [weather, news] bueno

    it was as good as a holiday — aquello fue como unas vacaciones

    have a good journey! — ¡buen viaje!

    how good it is to know that...! — ¡cuánto me alegro de saber que...!

    it's good to see you — me alegro de verte, gusto en verte (LAm)

    have a good trip! — ¡buen viaje!

    alive, life 1., 3)
    4) (=beneficial, wholesome) [food] bueno, sano; [air] puro, sano

    it's good for burns — es bueno para las quemaduras

    it's good for you or your health — te hace bien

    all this excitement isn't good for me! — ¡a mí todas estas emociones no me vienen or sientan nada bien!

    it's good for the soul!hum ¡ennoblece el espíritu!, ¡te enriquece (como persona)!

    5) (=favourable) [moment, chance] bueno

    it's a good chance to sort things out — es una buena oportunidad de or para arreglar las cosas

    I tried to find something good to say about him — traté de encontrar algo bueno que decir de él

    it would be a good thing or idea to ask him — no estaría mal or no sería mala idea preguntárselo

    this is as good a time as any to do it — es tan buen momento como cualquier otro para hacerlo

    6) (=useful)

    the only good chair — la única silla que está bien, la única silla servible or sana

    to be good for (doing) sth — servir para (hacer) algo

    he's good for nothing — es un inútil, es completamente inútil

    7) (=sound, valid) [excuse] bueno

    unless you have a good excusea menos que tengas una buena excusa

    for no good reasonsin motivo alguno

    he is a good risk (financially) concederle crédito es un riesgo asumible, se le puede prestar dinero

    word 1., 1)
    8) (=kind)

    that's very good of you — es usted muy amable, ¡qué amable (de su parte)!

    he was so good as to come with me — tuvo la amabilidad de acompañarme

    please would you be so good as to help me down with my case? — ¿me hace el favor de bajarme la maleta?, ¿tendría la bondad de bajarme la maleta? more frm

    would you be so good as to sign here? — ¿me hace el favor de firmar aquí?

    he's a good sortes buena persona or gente

    he was good to me — fue muy bueno or amable conmigo, se portó bien conmigo

    nature 1., 2)
    9) (=well-behaved) [child] bueno

    be good! (morally) ¡sé bueno!; (in behaviour) ¡pórtate bien!; (at this moment) ¡estáte formal!

    - be as good as gold
    10) (=upright, virtuous) bueno

    he's a good man — es una buena persona, es un buen hombre

    I think I'm as good as him — yo me considero tan buena persona como él

    yes, my good man — sí, mi querido amigo

    send us a photo of your good selffrm tenga a bien enviarnos una foto suya

    she's too good for him — ella es más de lo que él se merece

    lady 1., 5)
    11) (=close) bueno

    he's a good friend of mine — es un buen amigo mío

    my good friend Fernandomi buen or querido amigo Fernando

    12) (=middle-class, respectable)

    to live at a good addressvivir en una buena zona or en un buen barrio

    he's got no money but he's of good familyno tiene dinero pero es or viene de buena familia

    13) (=creditable)
    14) (=considerable) [supply, number] bueno

    we were kept waiting for a good hour/thirty minutes — nos tuvieron esperando una hora/media hora larga, nos tuvieron esperando por lo menos una hora/media hora

    a good £10 — lo menos 10 libras

    a good many or few people — bastante gente

    15) (=thorough) [scolding] bueno

    to have a good cry — llorar a lágrima viva, llorar a moco tendido *

    to have a good laughreírse mucho

    to take a good look (at sth) — mirar bien (algo)

    to have a good washlavarse bien

    16)

    good morningbuenos días

    good afternoon/ eveningbuenas tardes

    good day (=hello) ¡buenos días!; (=goodbye) ¡hasta mañana!

    good nightbuenas noches

    with every good wish, with all good wishes (in letter) saludos, un fuerte abrazo

    good! — ¡muy bien!

    (that's) good! — ¡qué bien!, ¡qué bueno! (LAm)

    very good, sir — sí, señor

    good for you! — ¡bien hecho!; (=congratulations) ¡enhorabuena!

    good one!(=well done, well said) ¡muy bien!, ¡sí señor!

    old 1., 5) as good as

    as good as saying... — tanto como decir...

    to come good good and... to hold good valer ( for para) it's a good job

    (it's a) good job he came! * — ¡menos mal que ha venido!

    make 1., 3), riddance, thing 2)
    2. ADVERB

    a good long walk — un paseo bien largo, un buen paseo

    - give as good as one gets
    good and proper

    they were cheated good and proper *les timaron bien timados *, les timaron con todas las de la ley *

    2) (esp US) * (=well) bien

    "how are you?" - "thanks, I'm good" — -¿cómo estás? -muy bien, gracias

    3. NOUN
    1) (=virtuousness) el bien

    to do good — hacer (el) bien

    good and evilel bien y el mal

    he is a power for good — su influencia es muy buena or beneficiosa, hace mucho bien

    for good or illpara bien o para mal

    there's some good in him — tiene algo bueno

    to be up to no good *estar tramando algo

    2) (=advantage, benefit) bien m

    a rest will do you some good — un descanso te sentará bien

    a (fat) lot of good that will do you! *iro ¡menudo provecho te va a traer!

    much good may it do you! — ¡no creo que te sirva de mucho!, ¡para lo que te va a servir!

    for your own good — por tu propio bien

    to be in good with sb — estar a bien con algn

    that's all to the good! — ¡menos mal!

    what good will that do you? — ¿y eso de qué te va a servir?

    what's the good of worrying? — ¿de qué sirve or para qué preocuparse?

    3) (=people of virtue)
    the good los buenos any good

    is he any good?[worker, singer etc] ¿qué tal lo hace?, ¿lo hace bien?

    is this any good? — ¿sirve esto?

    is she any good at cooking? — ¿qué tal cocina?, ¿cocina bien?

    for good (and all) (=for ever) para siempre no good

    it's no good(=no use) no sirve

    it's no good, I'll never get it finished in time — así no hay manera, nunca lo terminaré a tiempo

    it's no good worryingde nada sirve or vale preocuparse, no se saca nada preocupándose

    4.
    COMPOUNDS

    the Good Book N — (Rel) la Biblia

    good deeds NPL= good works

    Good Friday N — (Rel) Viernes m Santo

    good guy N — (Cine) bueno m

    good looks NPLatractivo msing físico

    * * *

    I [gʊd]
    1) adjective (comp better; superl best) [The usual translation, bueno, becomes buen when it is used before a masculine singular noun]
    2) <food/quality/book> bueno

    it smells good — huele bien, tiene rico or buen olor (AmL)

    to make good something: they undertook to make good the damage to the car se comprometieron a hacerse cargo de la reparación del coche; our losses were made good by the company la compañía nos compensó las pérdidas; to make good one's escape — lograr huir

    3) ( creditable) <work/progress/results> bueno
    4) (opportune, favorable) <moment/day/opportunity> bueno

    is this a good time to phone? — ¿es buena hora para llamar?

    it's a good job nobody was listening — (colloq) menos mal que nadie estaba escuchando

    5) (advantageous, useful) <deal/offer/advice> bueno

    burn it; that's all it's good for — quémalo, no sirve para otra cosa

    it's a good idea to let them know in advanceconvendría or no sería mala idea avisarles de antemano

    good idea!, good thinking! — buena idea!

    6) ( pleasant) bueno

    to be in a good mood — estar* de buen humor

    did you have a good flight? — ¿qué tal el vuelo?

    7) (healthy, wholesome) <diet/habit/exercise> bueno

    I'm not feeling too good — (colloq) no me siento or no me encuentro muy bien

    9)

    good morning — buenos días, buen día (RPl)

    good! now to the next question — bien, pasemos ahora a la siguiente pregunta

    good grief/gracious! — por favor!

    very good, sir/madam — (frml) lo que mande el señor/la señora (frml)

    c) ( for emphasis) (colloq)
    d)

    as good as: it's as good as new está como nuevo; he as good as admitted it — prácticamente lo admitió

    10) (skilled, competent) bueno

    to be good AT something/-ING: to be good at languages tener* facilidad para los idiomas; he's good at ironing plancha muy bien; he is good with dogs/children tiene buena mano con or sabe cómo tratar a los perros/los niños; she is good with her hands — es muy habilidosa or mañosa

    11) (devoted, committed) bueno

    a good Catholic/socialist — un buen católico/socialista

    12)
    a) (virtuous, upright) bueno
    b) ( well-behaved) bueno

    be good — sé bueno, pórtate bien

    13) ( kind) bueno

    to be good TO somebody: she was very good to me fue muy amable conmigo, se portó muy bien conmigo; it was very good of you to come muchas gracias por venir; good old Pete — el bueno de Pete

    14) (decent, acceptable) bueno

    to have a good reputation — tener* buena reputación

    15) ( sound) <customer/payer> bueno
    16) ( valid) <argument/excuse> bueno

    it's simply not good enough! — esto no puede ser!, esto es intolerable!

    17) (substantial, considerable) <meal/salary/distance> bueno

    there were a good many people therehabía bastante gente or un buen número de personas allí

    19) (thorough, intense) <rest/scolding> bueno

    II
    1)
    a) u ( moral right) bien m

    to do good — hacer* el bien

    to be up to no good — (colloq) estar* tramando algo, traerse* algo entre manos

    b) ( people)

    the good — (+ pl vb) los buenos

    2) u
    a) ( benefit) bien m

    for the good of somebody/something — por el bien de algn/algo

    to do somebody/something good — hacerle* bien a algn/algo

    lying won't do you any good at all — mentir no te llevará a ninguna parte, no ganarás or no sacarás nada con mentir

    b) ( use)

    are you any good at drawing? — ¿sabes dibujar?

    3) goods pl
    a) ( merchandise) artículos mpl, mercancías fpl, mercaderías fpl (AmS)

    manufactured goodsproductos mpl manufacturados, manufacturas fpl

    to come up with o deliver the goods — (colloq) cumplir con lo prometido; (before n) <train, wagon> (BrE) de carga; < depot> de mercancías, de mercaderías (AmS)

    b) ( property) (frml) bienes mpl

    III

    it's been a good long while since... — ha pasado su buen tiempo desde...

    you messed that up good and proper, didn't you? — (BrE colloq) metiste bien la pata, ¿no? (fam)

    2) (AmE colloq) (well, thoroughly) bien

    English-spanish dictionary > good

  • 16 eye

    1. noun
    1) (the part of the body with which one sees: Open your eyes; She has blue eyes.) ojo
    2) (anything like or suggesting an eye, eg the hole in a needle, the loop or ring into which a hook connects etc.) ojo; agujero
    3) (a talent for noticing and judging a particular type of thing: She has an eye for detail/colour/beauty.) buen ojo

    2. verb
    (to look at, observe: The boys were eyeing the girls at the dance; The thief eyed the policeman warily.) mirar, observar
    - eyebrow
    - eye-catching
    - eyelash
    - eyelet
    - eyelid
    - eye-opener
    - eye-piece
    - eyeshadow
    - eyesight
    - eyesore
    - eye-witness
    - before/under one's very eyes
    - be up to the eyes in
    - close one's eyes to
    - in the eyes of
    - keep an eye on
    - lay/set eyes on
    - raise one's eyebrows
    - see eye to eye
    - with an eye to something
    - with one's eyes open

    eye n ojo
    to keep an eye on vigilar / echar un ojo
    can you keep an eye on my suitcase? ¿me puedes vigilar la maleta?
    to see eye to eye opinar igual / estar de acuerdo
    tr[aɪ]
    1 SMALLANATOMY/SMALL ojo
    2 (sense) vista
    3 (of needle, potato, storm) ojo
    1 (observe) mirar, observar; (look at longingly) echar el ojo a
    \
    SMALLIDIOMATIC EXPRESSION/SMALL
    all eyes were on... todas las miradas estaban puestas en...
    an eye for an eye ojo por ojo
    as far as the eye can see hasta donde alcanza la vista
    before somebody's very eyes delante de los propios ojos de alguien
    eyes right/left/front vista a la derecha/izquierda/al frente
    for somebody's eyes only sólo para los ojos de alguien
    if you had half an eye si tuvieras dos dedos de frente
    in the eyes of the law según la Ley
    in the eyes of somebody / in somebody's eyes a ojos de alguien, para alguien
    my eye! ¡y un pepino!
    not to be able to believe one's eyes no poder dar crédito a sus ojos, no poder creer lo que uno está viendo
    not to take one's eyes off something/somebody no quitar la vista de encima de algo/a alguien, no perder de vista algo/a alguien
    to be all eyes ser todo,-a ojos
    to be one in the eye for somebody suponer un chasco para alguien
    to be unable to look somebody in the eye no poder mirar a alguien a la cara
    to be unable to take one's eyes off somebody/something no poder quitar la vista de encima de alguien/algo
    to be up to one's eyes in something estar hasta el cuello de algo
    to cast one's eyes over something / run one's eyes over something ojear algo, echar una ojeada a algo
    to catch somebody's eye llamar la atención de alguien
    to clap/lay/set eyes on somebody/something ver a alguien/algo, poner los ojos en alguien/algo
    to close one's eyes to something hacer la vista gorda a algo
    to eye somebody up and down comerse a alguien con los ojos
    to give somebody the eye lanzar miraditas a alguien
    to have an eye for something tener buen ojo para algo
    to have eyes in the back of one's head darse cuenta de todo, tener cien ojos
    to have one's eye on (watch) observar, vigilar
    to keep an eye on (watch) vigilar 2 (not let out of sight) no perder de vista
    to keep an eye open/out for somebody/something mantener los ojos bien abiertos por si se ve a alguien/algo
    to keep one's eyes peeled estar ojo avizor
    to look somebody in the eye mirar a alguien a los ojos
    to make eyes at somebody / make sheep's eyes at somebody dirigir miraditas a alguien
    to only have eyes for somebody / have eyes only for somebody sólo tener ojos para alguien
    to open somebody's eyes abrirle los ojos a alguien
    to see eye to eye with somebody estar de acuerdo con alguien
    to turn a blind eye to something hacer la vista gorda a algo
    with an eye to doing something con la intención de hacer algo, con miras a hacer algo
    with one's eyes open con los ojos abiertos
    with one's eyes shut con los ojos cerrados
    with the naked eye a simple vista
    eye contact contacto ocular
    eye shadow sombra de ojos
    eye socket cuenca del ojo, órbita
    eye ['aɪ] vt, eyed ; eyeing or eying : mirar, observar
    eye n
    1) : ojo m
    2) vision: visión f, vista f, ojo m
    a good eye for bargains: un buen ojo para las gangas
    3) glance: mirada f, ojeada f
    4) attention: atención f
    to catch one's eye: llamar la atención
    5) point of view: punto m de vista
    in the eyes of the law: según la ley
    6) : ojo m (de una aguja, una papa, una tormenta)
    n.
    hondón s.m.
    ojo s.m.
    yema s.f.
    v.
    mirar detenidamente v.
    ojear v.

    I
    1)
    a) ( Anat) ojo m

    to have sharp eyestener* (una) vista de lince, tener* ojo de águila

    as far as the eye can/could see — hasta donde alcanza/alcanzaba la vista

    I can't believe my eyes — si no lo veo, no lo creo, no doy crédito a mis ojos

    to close o shut one's eyes to something — cerrar* los ojos a algo

    to cry one's eyes outllorar a lágrima viva or a mares

    to have eyes in the back of one's headtener* ojos en la nuca

    to keep one's eyes open — (to avoid danger, problems) andarse* or ir* con cuidado; ( looking for something)

    keep your eyes open for a restaurantvete mirando or fíjate bien a ver si ves un restaurante

    to keep one's eyes peeled o skinned — (colloq) (to avoid danger, problems) andarse* or ir* con mucho ojo (fam); ( looking for something) estar(se)* ojo avizor (fam)

    to make eyes at somebodyhacerle* ojitos a alguien

    to open somebody's eyesabrirle* los ojos a alguien

    to open somebody's eyes to something — hacerle* ver algo a alguien

    to see eye to eye with somebody(usu with neg) estar* de acuerdo con alguien, coincidir con alguien

    with one's eyes shut o closed — con los ojos cerrados

    to be up to one's eyes in somethingestar* hasta aquí de algo (fam)

    I'm up to my eyes in workestoy agobiada or (fam) hasta aquí de trabajo

    we're up to our eyes in debt — estamos cargados de deudas, debemos hasta la camisa (fam); (before n)

    eye contact: to make/avoid eye contact with somebody mirar/evitar mirar a alguien a los ojos; at eye level — a la altura de la vista

    b) (look, gaze) mirada f

    to cast o run one's eye over something — recorrer algo con la vista

    to have one's eyes on somebody/something — no quitarle los ojos de encima a alguien/algo

    in Mary's eyes he's perfectpara Mary or a ojos de Mary es perfecto

    to keep one's eye(s) on something/somebody: keep your eyes on the road! no apartes la vista de la carretera!; keep your eyes on him no lo pierdas de vista; to look somebody straight in the eye mirar a alguien directamente a los ojos; she won't look me in the eye no se atreve a mirarme a la cara; he couldn't take his eyes off her no podía quitarle los ojos de encima; easy on the eye (colloq) agradable a la vista; to keep an eye on something/somebody vigilar or cuidar algo/a alguien; keep an eye on those two no pierdas de vista a esos dos, vigila a esos dos; to lay o set o (colloq) clap eyes on somebody/something: from the moment I laid o set o (colloq) clapped eyes on him/it desde el primer momento que lo vi; to turn a blind eye (to something) — hacer* la vista gorda (frente a or ante algo)

    c) ( attention)
    d) ( ability to judge) ojo m

    to have an eye for design — tener* ojo or idea para el diseño

    to have an eye for detail — ser* detallista

    2)
    a) ( of needle) ojo m
    b) (of hurricane, storm) ojo m
    c) ( in potato) ojo m

    II
    transitive verb (pres p eying or BrE eyeing)
    a) ( observe) mirar, observar
    b) ( ogle) mirar, pasarle revista a (fam)
    [aɪ]
    1. N
    1) (gen) ojo m

    I couldn't believe my (own) eyes — no daba crédito a lo que veían mis ojos

    black eye — ojo m morado or amoratado

    she had a black eyetenía or llevaba un ojo morado

    to catch sb's eye — llamar la atención de algn

    it was the biggest one I'd ever clapped eyes on — era el más grande que jamás me había echado a la cara

    to cry one's eyes out — llorar a moco tendido or a lágrima viva

    there wasn't a dry eye in the house — no había ojos sin lágrimas en todo el teatro

    to have an eye or a keen eye for a bargain — tener mucha vista or buen ojo para las gangas

    he's got his eye on you — (=monitoring) no te quita ojo, no te pierde de vista; (=attracted to) te tiene echado el ojo

    she had eyes only for me — solo tenía ojos para mí, no tenía ojos más que para mí

    it hits you in the eye — salta a la vista

    in the eyes of — a los ojos de

    to keep an eye on sth/sb — (=watch) vigilar algo/a algn, echar una mirada a algo/algn; (=look after) cuidar algo/a algn

    keep your eyes on the road! — ¡no quites los ojos de la carretera!

    to look sb (straight) in the eye — mirar a algn (directamente) a los ojos

    with the naked eye — a simple vista

    he couldn't keep his eyes off the girl — se le fueron los ojos tras la chica

    to keep an eye out or one's eyes open for sth/sb — estar pendiente de algo/algn

    keep an eye out for the postmanestáte atento or pendiente a ver si ves al cartero

    keep your eyes open for bag-snatchers! — ¡mucho ojo, no te vayan a dar el tirón!

    I could hardly keep my eyes opense me cerraban los ojos

    I saw it with my own eyes — lo vi con mis propios ojos

    to be in the public eye — estar a la luz pública

    eyes right/left/front! — ¡vista a la derecha/izquierda/al frente!

    to run one's eye over sth — (from curiosity) recorrer algo con la vista; (checking) echar un vistazo a algo

    as far as the eye can seehasta donde alcanza la vista

    it's five years since I last set or laid eyes on him — hace cinco años que no lo veo

    the sun is in my eyes — me da el sol en los ojos

    he didn't take his eyes off her for one second — no le quitó los ojos de encima ni por un segundo

    with an eye to sth/to doing sth — con vistas or miras a algo/a hacer algo

    use your eyes! * — ¡abre los ojos!

    it happened before my very eyes — ocurrió delante de mis propios ojos

    under the watchful eye of — bajo la atenta mirada de

    to look at sth with or through the eyes of an expert — ver algo con ojos de experto

    - have eyes in the back of one's head

    he must have eyes in the back of his head! — ¡no se le escapa una!

    I haven't got eyes in the back of my headiro ¿te crees que tengo ojos en la nuca o qué?

    - give sb the glad eye
    - open sb's eyes to sth
    - keep one's eyes peeled
    - do sth with one's eyes
    - make sheep's eyes at sb
    - shut one's eyes to
    - be up to one's eyes
    - an eye for an eye
    blind 1., feast 2., mind 1., 1), sight
    2) [of potato] yema f
    3) [of storm] ojo m
    4) (Sew) [of needle] ojo m; [of hook and eye] hembra f de corchete
    2.
    VT mirar detenidamente, observar

    she eyed him sullenly/with suspicion — lo miró detenidamente con gesto hosco/con recelo

    an expensive leather jacket I had been eyeing for some time — una cazadora de cuero muy cara a la que hacía tiempo (que) le había echado el ojo

    3.
    CPD

    eye candy * Nregalo m para la vista

    eye clinic Nclínica f oftalmológica

    eye colour Ncolor m de los ojos

    eye contact Ncontacto m ocular

    eye cream Ncrema f para los ojos

    eye doctor N(US) oculista mf

    eye drops NPLgotas fpl para los ojos

    eye examination Nexamen m de la vista

    eye patch Nparche m

    eye pencil Nlápiz m de ojos

    eye shadow Nsombra f de ojos

    eye socket Ncuenca f del ojo

    eye test Ntest m visual or de visión

    * * *

    I [aɪ]
    1)
    a) ( Anat) ojo m

    to have sharp eyestener* (una) vista de lince, tener* ojo de águila

    as far as the eye can/could see — hasta donde alcanza/alcanzaba la vista

    I can't believe my eyes — si no lo veo, no lo creo, no doy crédito a mis ojos

    to close o shut one's eyes to something — cerrar* los ojos a algo

    to cry one's eyes outllorar a lágrima viva or a mares

    to have eyes in the back of one's headtener* ojos en la nuca

    to keep one's eyes open — (to avoid danger, problems) andarse* or ir* con cuidado; ( looking for something)

    keep your eyes open for a restaurantvete mirando or fíjate bien a ver si ves un restaurante

    to keep one's eyes peeled o skinned — (colloq) (to avoid danger, problems) andarse* or ir* con mucho ojo (fam); ( looking for something) estar(se)* ojo avizor (fam)

    to make eyes at somebodyhacerle* ojitos a alguien

    to open somebody's eyesabrirle* los ojos a alguien

    to open somebody's eyes to something — hacerle* ver algo a alguien

    to see eye to eye with somebody(usu with neg) estar* de acuerdo con alguien, coincidir con alguien

    with one's eyes shut o closed — con los ojos cerrados

    to be up to one's eyes in somethingestar* hasta aquí de algo (fam)

    I'm up to my eyes in workestoy agobiada or (fam) hasta aquí de trabajo

    we're up to our eyes in debt — estamos cargados de deudas, debemos hasta la camisa (fam); (before n)

    eye contact: to make/avoid eye contact with somebody mirar/evitar mirar a alguien a los ojos; at eye level — a la altura de la vista

    b) (look, gaze) mirada f

    to cast o run one's eye over something — recorrer algo con la vista

    to have one's eyes on somebody/something — no quitarle los ojos de encima a alguien/algo

    in Mary's eyes he's perfectpara Mary or a ojos de Mary es perfecto

    to keep one's eye(s) on something/somebody: keep your eyes on the road! no apartes la vista de la carretera!; keep your eyes on him no lo pierdas de vista; to look somebody straight in the eye mirar a alguien directamente a los ojos; she won't look me in the eye no se atreve a mirarme a la cara; he couldn't take his eyes off her no podía quitarle los ojos de encima; easy on the eye (colloq) agradable a la vista; to keep an eye on something/somebody vigilar or cuidar algo/a alguien; keep an eye on those two no pierdas de vista a esos dos, vigila a esos dos; to lay o set o (colloq) clap eyes on somebody/something: from the moment I laid o set o (colloq) clapped eyes on him/it desde el primer momento que lo vi; to turn a blind eye (to something) — hacer* la vista gorda (frente a or ante algo)

    c) ( attention)
    d) ( ability to judge) ojo m

    to have an eye for design — tener* ojo or idea para el diseño

    to have an eye for detail — ser* detallista

    2)
    a) ( of needle) ojo m
    b) (of hurricane, storm) ojo m
    c) ( in potato) ojo m

    II
    transitive verb (pres p eying or BrE eyeing)
    a) ( observe) mirar, observar
    b) ( ogle) mirar, pasarle revista a (fam)

    English-spanish dictionary > eye

  • 17 work

    wə:k
    1. noun
    1) (effort made in order to achieve or make something: He has done a lot of work on this project) trabajo
    2) (employment: I cannot find work in this town.) trabajo
    3) (a task or tasks; the thing that one is working on: Please clear your work off the table.) trabajo
    4) (a painting, book, piece of music etc: the works of Van Gogh / Shakespeare/Mozart; This work was composed in 1816.) obra
    5) (the product or result of a person's labours: His work has shown a great improvement lately.) trabajo
    6) (one's place of employment: He left (his) work at 5.30 p.m.; I don't think I'll go to work tomorrow.) trabajo

    2. verb
    1) (to (cause to) make efforts in order to achieve or make something: She works at the factory three days a week; He works his employees very hard; I've been working on/at a new project.) trabajar
    2) (to be employed: Are you working just now?) trabajar, tener empleo
    3) (to (cause to) operate (in the correct way): He has no idea how that machine works / how to work that machine; That machine doesn't/won't work, but this one's working.) funcionar
    4) (to be practicable and/or successful: If my scheme works, we'll be rich!) funcionar, dar resultados
    5) (to make (one's way) slowly and carefully with effort or difficulty: She worked her way up the rock face.) progresar, desarrollar
    6) (to get into, or put into, a stated condition or position, slowly and gradually: The wheel worked loose.) volverse
    7) (to make by craftsmanship: The ornaments had been worked in gold.) trabajar, fabricar
    - - work
    - workable
    - worker
    - works

    3. noun plural
    1) (the mechanism (of a watch, clock etc): The works are all rusted.)
    2) (deeds, actions etc: She's devoted her life to good works.) mecanismo
    - work-box
    - workbook
    - workforce
    - working class
    - working day
    - work-day
    - working hours
    - working-party
    - work-party
    - working week
    - workman
    - workmanlike
    - workmanship
    - workmate
    - workout
    - workshop
    - at work
    - get/set to work
    - go to work on
    - have one's work cut out
    - in working order
    - out of work
    - work of art
    - work off
    - work out
    - work up
    - work up to
    - work wonders

    work1 n
    1. trabajo
    2. obra
    in work con trabajo / que tiene trabajo
    out of work sin trabajo / parado
    to get to work / to set to work ponerse a trabajar
    work2 vb
    1. trabajar
    2. funcionar
    how do you work this machine? ¿cómo funciona esta máquina?
    tr[wɜːk]
    1 (gen) trabajo
    he put a lot of hard work into that project trabajó mucho en ese proyecto, puso mucho esfuerzo en ese proyecto
    2 (employment) empleo, trabajo
    what sort of work do you do? ¿qué clase de trabajo haces?, ¿a qué te dedicas?
    what time do you leave work? ¿a qué hora sales del trabajo?
    3 (building work, roadworks) obras nombre femenino plural
    4 (product, results) trabajo, obra
    1 (person) hacer trabajar
    2 (machine) manejar; (mechanism) accionar
    do you know how to work the video? ¿sabes cómo hacer funcionar el vídeo?
    3 (mine, oil well) explotar; (land, fields) trabajar, cultivar
    4 (produce) hacer
    5 (wood, metal, clay) trabajar; (dough) amasar
    7 familiar (arrange) arreglar
    1 (gen) trabajar
    she works hard at her homework trabaja mucho en sus deberes, pone mucho esfuerzo en sus deberes
    2 (machine, system) funcionar
    how does this machine work? ¿cómo funciona esta máquina?
    3 (medicine, cleaner) surtir efecto, tener efecto; (plan) tener éxito, salir bien, funcionar, resultar
    1 (factory) fábrica f sing
    1 (parts) mecanismo m sing
    1 familiar (everything) todo, todo el tinglado
    \
    SMALLIDIOMATIC EXPRESSION/SMALL
    it's all in a/the day's work todo forma parte del trabajo, es el pan nuestro de cada día
    all work and no play makes Jack a dull boy hay que divertirse de vez en cuando
    it works both ways es una arma de doble filo
    keep up the good work! ¡que siga así!
    the forces at work los elementos en juego
    to be in work tener trabajo, tener un empleo
    to be out of work estar en el paro, estar sin trabajo, estar parado,-a
    to get down/set to work ponerse a trabajar, poner manos a la obra
    to get worked up exaltarse, excitarse, ponerse nervioso,-a
    to give somebody the (full) works tratar a alguien a lo grande
    to have one's work cut out to do something costarle a uno mucho trabajo hacer algo
    to make light/short work of something despachar algo deprisa
    to work like a Trojan trabajar como un negro
    to work loose soltarse, aflojarse
    to work one's fingers to the bone dejarse los codos trabajando
    to work oneself to death matarse trabajando
    to work to rule hacer huelga de celo
    work basket costurero, cesto de labor
    work camp campamento de trabajo
    work experience experiencia laboral
    work of art obra de arte
    work permit permiso de trabajo
    work station SMALLCOMPUTING/SMALL estación nombre femenino de trabajo, terminal nombre masculino de trabajo
    work surface encimera
    work ['wərk] v, worked ['wərkt] or wrought ['rɔt] ; working vt
    1) operate: trabajar, operar
    to work a machine: operar una máquina
    2) : lograr, conseguir (algo) con esfuerzo
    to work one's way up: lograr subir por sus propios esfuerzos
    3) effect: efectuar, llevar a cabo, obrar (milagros)
    4) make, shape: elaborar, fabricar, formar
    a beautifully wrought vase: un florero bellamente elaborado
    5)
    to work up : estimular, excitar
    don't get worked up: no te agites
    work vi
    1) labor: trabajar
    to work full-time: trabajar a tiempo completo
    2) function: funcionar, servir
    work adj
    : laboral
    work n
    1) labor: trabajo m, labor f
    2) employment: trabajo m, empleo m
    3) task: tarea f, faena f
    4) deed: obra f, labor f
    works of charity: obras de caridad
    5) : obra f (de arte o literatura)
    7) works npl
    factory: fábrica f
    8) works npl
    mechanism: mecanismo m
    v.
    andar v.
    elaborar v.
    funcionar v.
    hacer funcionar v.
    hacer trabajar v.
    laborear v.
    labrar v.
    marchar v.
    obrar v.
    trabajar v.
    adj.
    laborable adj.
    n.
    chamba s.f.
    fábrica s.f.
    labor s.f.
    mecanismo s.m.
    obra s.f.
    sobrehueso s.m.
    trabajar s.m.
    trabajo s.m.
    wɜːrk, wɜːk
    I
    1) u (labor, tasks) trabajo m

    the house needs a lot of work done o (BrE) doing to it — la casa necesita muchos arreglos

    to set to work — ponerse* a trabajar, poner* manos a la obra

    keep up the good worksigue (or sigan etc) así!

    it's all in a day's workes el pan nuestro de cada día

    to have one's work cut out: she's going to have her work cut out to get the job done in time le va a costar terminar el trabajo a tiempo; to make short work of something: Pete made short work of the ironing Pete planchó todo rapidísimo; you made short work of that pizza! te has despachado pronto la pizza!; all work and no play makes Jack a dull boy — hay que dejar tiempo para el esparcimiento

    2) u ( employment) trabajo m

    to look for/find work — buscar*/encontrar* trabajo

    to go to work — ir* a trabajar or al trabajo

    they both go out to work — (BrE) los dos trabajan (afuera)

    I start/finish work at seven — entro a trabajar or al trabajo/salgo del trabajo a las siete

    at work: he's at work está en el trabajo, está en la oficina (or la fábrica etc); they were hard at work estaban muy ocupados trabajando; other forces were at work intervenían otros factores, había otros factores en juego; men at work obras, hombres trabajando; in work (BrE): those in work quienes tienen trabajo; off work: she was off work for a month after the accident después del accidente estuvo un mes sin trabajar; he took a day off work se tomó un día libre; out of work: the closures will put 1,200 people out of work los cierres dejarán en la calle a 1.200 personas; to be out of work estar* sin trabajo or desocupado or desempleado or (Chi tb) cesante, estar* parado or en el paro (Esp); (before n) out-of-work — desocupado, desempleado, parado (Esp), cesante (Chi)

    4)
    a) c (product, single item) obra f
    b) u ( output) trabajo m

    it was the work of a professional — era obra de un profesional; see also works


    II
    1.
    1) \<\<person\>\> trabajar

    to get working — ponerse* a trabajar, poner* manos a la obra

    to work AT something: you have to work at your service tiene que practicar el servicio; a relationship is something you have to work at una relación de pareja requiere cierto esfuerzo; she was working away at her accounts estaba ocupada con su contabilidad; to work FOR somebody trabajar para alguien; to work for oneself trabajar por cuenta propia; to work FOR something: fame didn't just come to me: I had to work for it la fama no me llegó del cielo, tuve que trabajar para conseguirla; he's working for his finals está estudiando or está preparándose para los exámenes finales; to work IN something: to work in marble trabajar el mármol or con mármol; to work in oils pintar al óleo, trabajar con óleos; to work ON something: he's working on his car está arreglando el coche; scientists are working on a cure los científicos están intentando encontrar una cura; she hasn't been fired yet, but she's working on it (hum) todavía no la han echado, pero parece empeñada en que lo hagan; we're working on the assumption that... partimos del supuesto de que...; the police had very little to work on la policía tenía muy pocas pistas; to work UNDER somebody — trabajar bajo la dirección de alguien

    2)
    a) (operate, function) \<\<machine/system\>\> funcionar; \<\<drug/person\>\> actuar*

    to work against/in favor of somebody/something — obrar en contra/a favor de alguien/algo

    it works both ways: you have to make an effort too, you know: it works both ways — tú también tienes que hacer el esfuerzo, ¿sabes? funciona igual or (esp AmL) parejo para los dos

    b) ( have required effect) \<\<drug/plan/method\>\> surtir efecto

    try it, it might work — pruébalo, quizás resulte

    3) (slip, travel) (+ adv compl)

    his socks had worked down to his ankles — se le habían caído los calcetines; see also free I 1) c), loose I 1) b)


    2.
    vt
    1)
    a) ( force to work) hacer* trabajar
    b) ( exploit) \<\<land/soil\>\> trabajar, labrar; \<\<mine\>\> explotar
    c) \<\<nightclubs/casinos\>\> trabajar en

    do you know how to work the machine? — ¿sabes manejar la máquina?

    3)
    a) (move gradually, manipulate) (+ adv compl)

    to work one's way: we worked our way toward the exit nos abrimos camino hacia la salida; I worked my way through volume three logré terminar el tercer volumen; she worked her way to the top of her profession — trabajó hasta llegar a la cima de su profesión

    b) (shape, fashion) \<\<clay/metal\>\> trabajar; \<\<dough\>\> sobar, amasar
    4)
    a) (past & past p worked or wrought) ( bring about) \<\<miracle\>\> hacer*; see also wrought I
    b) (manage, arrange) (colloq) arreglar

    she worked it so that I didn't have to payse las arregló or se las ingenió para que yo no tuviera que pagar

    Phrasal Verbs:
    [wɜːk]
    1. N
    1) (=activity) trabajo m; (=effort) esfuerzo m

    to be at work on sth — estar trabajando sobre algo

    work has begun on the new dam — se han comenzado las obras del nuevo embalse

    it's all in a day's work — es pan de cada día

    to do one's work — hacer su trabajo

    to get some work done — hacer algo (de trabajo)

    to get on with one's work — seguir trabajando

    good work! — (=well done) ¡buen trabajo!

    it's hard work — es mucho trabajo, cuesta (trabajo)

    a piece of work — un trabajo

    she's put a lot of work into it — le ha puesto grandes esfuerzos

    to make quick work of sth/sb — despachar algo/a algn con rapidez

    to set to work — ponerse a trabajar

    to make short work of sth/sb — despachar algo/a algn con rapidez

    to start work — ponerse a trabajar

    to have one's work cut out —

    nasty 1., 4)
    2) (=employment, place of employment) trabajo m

    "work wanted" — (US) "demandas de empleo"

    to be at work — estar trabajando

    to go to work — ir a trabajar

    to go out to work — (=have a job) tener un trabajo

    to be in work — tener trabajo

    she's looking for work — está buscando trabajo

    it's nice work if you can get it — es muy agradable para los que tienen esa suerte

    I'm off work for a week — tengo una semana de permiso

    to be out of work — estar desempleado or parado or en paro

    to put sb out of work — dejar a algn sin trabajo

    on her way to work — camino del trabajo

    3) (=product, deed) obra f; (=efforts) trabajo

    this is the work of a professional/madman — esto es trabajo de un profesional/loco

    what do you think of his work? — ¿qué te parece su trabajo?

    good works — obras fpl de caridad

    his life's work — el trabajo al que ha dedicado su vida

    4) (Art, Literat etc) obra f

    a work of artuna obra de arte

    a literary work — una obra literaria

    5) works [of machine, clock etc] mecanismo msing
    - bung or gum up the works
    spanner
    6) works (Mil) obras fpl, fortificaciones fpl

    Ministry of WorksMinisterio m de Obras Públicas

    2. VI
    1) (gen) trabajar; (=be in a job) tener trabajo

    he is working at his German — está dándole al alemán

    to work hardtrabajar mucho or duro

    she works in a bakery — trabaja en una panadería

    he works in education/publishing — trabaja en la enseñanza/el campo editorial

    he prefers to work in wood/oils — prefiere trabajar la madera/con óleos

    to work to rule — (Ind) estar en huelga de celo

    to work towards sth — trabajar or realizar esfuerzos para conseguir algo

    - work like a slave or Trojan etc
    2) (=function) [machine, car] funcionar

    my brain doesn't seem to be working todayhum mi cerebro no funciona hoy como es debido

    it may work against us — podría sernos desfavorable

    this can work both ways — esto puede ser un arma de doble filo

    this may work in our favourpuede que esto nos venga bien

    to get sth working — hacer funcionar algo

    it works off the mains — funciona con la electricidad de la red

    3) (=be effective) [plan] salir, marchar; [drug, medicine, spell] surtir efecto, ser eficaz; [yeast] fermentar

    how long does it take to work? — ¿cuánto tiempo hace falta para que empiece a surtir efecto?

    the scheme won't work — el proyecto no es práctico, esto no será factible

    it won't work, I tell you! — ¡te digo que no se puede (hacer)!

    4) [mouth, face, jaws] moverse, torcerse
    5) (=move gradually)

    to work loosedesprenderse

    to work round to a question — preparar el terreno para preguntar algo

    what are you working round to? — ¿adónde va a parar todo esto?, ¿qué propósito tiene todo esto?

    3. VT
    1) (=make work) hacer trabajar

    to work o.s. to death — matarse trabajando

    2) (=operate)

    can you work it? — ¿sabes manejarlo?

    3) (=achieve) [+ change] producir, motivar; [+ cure] hacer, efectuar; [+ miracle] hacer
    wonder 1., 2)
    4) (Sew) coser; (Knitting) [+ row] hacer
    5) (=shape) [+ dough, clay] trabajar; [+ stone, marble] tallar, grabar

    worked flintpiedra f tallada

    6) (=exploit) [+ mine] explotar; [+ land] cultivar
    7) (=manoeuvre)

    to work o.s. into a rage — ponerse furioso, enfurecerse

    the screw had worked itself looseel tornillo se había soltado solo

    to work one's way along — ir avanzando poco a poco

    to work one's way up a cliffescalar poco a poco or a duras penas un precipicio

    8) (=finance)

    to work one's passage on a ship — costearse un viaje trabajando

    to work one's way through college — costearse los estudios universitarios trabajando

    4.
    CPD

    work area Nárea f de trabajo

    work camp Ncampamento m laboral

    work ethic Nética f del trabajo

    work experience Nexperiencia f laboral

    work file Nfichero m de trabajo

    work force N(=labourers) mano f de obra; (=personnel) plantilla f

    work in progress Ntrabajo m en proceso

    work permit Npermiso m de trabajo

    work prospects NPL[of student] perspectivas fpl de trabajo

    work study Npráctica f estudiantil

    work therapy Nlaborterapia f, terapia f laboral

    work week N(US) semana f laboral

    * * *
    [wɜːrk, wɜːk]
    I
    1) u (labor, tasks) trabajo m

    the house needs a lot of work done o (BrE) doing to it — la casa necesita muchos arreglos

    to set to work — ponerse* a trabajar, poner* manos a la obra

    keep up the good worksigue (or sigan etc) así!

    it's all in a day's workes el pan nuestro de cada día

    to have one's work cut out: she's going to have her work cut out to get the job done in time le va a costar terminar el trabajo a tiempo; to make short work of something: Pete made short work of the ironing Pete planchó todo rapidísimo; you made short work of that pizza! te has despachado pronto la pizza!; all work and no play makes Jack a dull boy — hay que dejar tiempo para el esparcimiento

    2) u ( employment) trabajo m

    to look for/find work — buscar*/encontrar* trabajo

    to go to work — ir* a trabajar or al trabajo

    they both go out to work — (BrE) los dos trabajan (afuera)

    I start/finish work at seven — entro a trabajar or al trabajo/salgo del trabajo a las siete

    at work: he's at work está en el trabajo, está en la oficina (or la fábrica etc); they were hard at work estaban muy ocupados trabajando; other forces were at work intervenían otros factores, había otros factores en juego; men at work obras, hombres trabajando; in work (BrE): those in work quienes tienen trabajo; off work: she was off work for a month after the accident después del accidente estuvo un mes sin trabajar; he took a day off work se tomó un día libre; out of work: the closures will put 1,200 people out of work los cierres dejarán en la calle a 1.200 personas; to be out of work estar* sin trabajo or desocupado or desempleado or (Chi tb) cesante, estar* parado or en el paro (Esp); (before n) out-of-work — desocupado, desempleado, parado (Esp), cesante (Chi)

    4)
    a) c (product, single item) obra f
    b) u ( output) trabajo m

    it was the work of a professional — era obra de un profesional; see also works


    II
    1.
    1) \<\<person\>\> trabajar

    to get working — ponerse* a trabajar, poner* manos a la obra

    to work AT something: you have to work at your service tiene que practicar el servicio; a relationship is something you have to work at una relación de pareja requiere cierto esfuerzo; she was working away at her accounts estaba ocupada con su contabilidad; to work FOR somebody trabajar para alguien; to work for oneself trabajar por cuenta propia; to work FOR something: fame didn't just come to me: I had to work for it la fama no me llegó del cielo, tuve que trabajar para conseguirla; he's working for his finals está estudiando or está preparándose para los exámenes finales; to work IN something: to work in marble trabajar el mármol or con mármol; to work in oils pintar al óleo, trabajar con óleos; to work ON something: he's working on his car está arreglando el coche; scientists are working on a cure los científicos están intentando encontrar una cura; she hasn't been fired yet, but she's working on it (hum) todavía no la han echado, pero parece empeñada en que lo hagan; we're working on the assumption that... partimos del supuesto de que...; the police had very little to work on la policía tenía muy pocas pistas; to work UNDER somebody — trabajar bajo la dirección de alguien

    2)
    a) (operate, function) \<\<machine/system\>\> funcionar; \<\<drug/person\>\> actuar*

    to work against/in favor of somebody/something — obrar en contra/a favor de alguien/algo

    it works both ways: you have to make an effort too, you know: it works both ways — tú también tienes que hacer el esfuerzo, ¿sabes? funciona igual or (esp AmL) parejo para los dos

    b) ( have required effect) \<\<drug/plan/method\>\> surtir efecto

    try it, it might work — pruébalo, quizás resulte

    3) (slip, travel) (+ adv compl)

    his socks had worked down to his ankles — se le habían caído los calcetines; see also free I 1) c), loose I 1) b)


    2.
    vt
    1)
    a) ( force to work) hacer* trabajar
    b) ( exploit) \<\<land/soil\>\> trabajar, labrar; \<\<mine\>\> explotar
    c) \<\<nightclubs/casinos\>\> trabajar en

    do you know how to work the machine? — ¿sabes manejar la máquina?

    3)
    a) (move gradually, manipulate) (+ adv compl)

    to work one's way: we worked our way toward the exit nos abrimos camino hacia la salida; I worked my way through volume three logré terminar el tercer volumen; she worked her way to the top of her profession — trabajó hasta llegar a la cima de su profesión

    b) (shape, fashion) \<\<clay/metal\>\> trabajar; \<\<dough\>\> sobar, amasar
    4)
    a) (past & past p worked or wrought) ( bring about) \<\<miracle\>\> hacer*; see also wrought I
    b) (manage, arrange) (colloq) arreglar

    she worked it so that I didn't have to payse las arregló or se las ingenió para que yo no tuviera que pagar

    Phrasal Verbs:

    English-spanish dictionary > work

  • 18 great

    ɡreit
    1) (of a better quality than average; important: a great writer; Churchill was a great man.) grande, gran (antes del nombre), importante
    2) (very large, larger etc than average: a great crowd of people at the football match.) grande, gran (antes del nombre)
    3) (of a high degree: Take great care of that book.) mucho; especial
    4) (very pleasant: We had a great time at the party.) maravilloso, espléndido, fantástico
    5) (clever and expert: John's great at football.) excelente, buenísimo
    - greatness
    great adj
    1. gran / grande
    2. gran / importante
    3. estupendo / fenomenal
    you look great! ¡te veo fenomenal!
    tr[greɪt]
    2 (considerable, profound, intense) grande; (before sing noun) gran
    it gives me great pleasure to... tengo el gran placer de...
    3 (famous, important, outstanding) grande, importante; (before sing noun) gran, importante
    4 familiar (excellent, wonderful) estupendo,-a, fantástico,-a, sensacional, fabuloso,-a
    it's great to see you! ¡me alegro mucho de verte!
    how was the film? - great! ¿qué tal la película! - ¡fenomenal!
    what a great idea! ¡qué idea más buena!
    you great brute! ¡pedazo de animal!
    1 familiar muy bien, estupendamente, fenomenal
    1 (people) los grandes nombre masculino plural, la gente nombre femenino importante
    \
    SMALLIDIOMATIC EXPRESSION/SMALL
    to be no great shakes no ser gran cosa
    to go great guns ir a las mil maravillas, ir viento en popa
    the Great Barrier Reef la Gran Barrera de Coral
    great circle círculo máximo
    the Great War la Gran Guerra, la primera Guerra Mundial
    great ['greɪt] adj
    1) large: grande
    a great mountain: una montaña grande
    a great crowd: una gran muchedumbre
    2) intense: intenso, fuerte, grande
    great pain: gran dolor
    3) eminent: grande, eminente, distinguido
    a great poet: un gran poeta
    4) excellent, terrific: excelente, estupendo, fabuloso
    to have a great time: pasarlo en grande
    5)
    a great while : mucho tiempo
    adj.
    enorme adj.
    garrafal adj.
    gran adj.
    grande adj.
    importante adj.
    largo, -a adj.
    magno, -a adj.
    mucho, -a adj.
    pistonudo, -a adj.
    principal adj.
    solemne adj.
    vasto, -a adj.

    I greɪt
    1) (before n)
    a) ( large in size) (sing) gran (delante del n); (pl) grandes (delante del n)
    b) <number/quantity> (sing) gran (delante del n); (pl) grandes (delante del n)

    there's a dirty great hole in my sock — (BrE colloq) tengo un agujerazo en el calcetín (fam)

    2) (before n)
    a) ( important) <landowner/occasion> (sing) gran (delante del n); (pl) grandes (delante del n)
    b) (genuine, real) (before n) <friend/rival> (sing) gran (delante del n); (pl) grandes (delante del n)

    I'm in no great hurry — no tengo mucha prisa, no estoy muy apurado (AmL)

    you're a great help! — (colloq & iro) valiente ayuda la tuya! (iró)

    he's a great one for starting arguments — (colloq) es único para empezar discusiones!, para empezar discusiones es (como) mandado a hacer (CS fam)

    3) ( excellent) (colloq) <goal/movie/meal> sensacional, fabuloso

    he's a really great guyes un tipo or (Esp tb) tío sensacional (fam)

    to be great AT something: she's great at organizing things/getting people together para organizar las cosas/juntar a la gente, no hay nadie como ella; he's great at mending things se da mucha maña para hacer arreglos; (as interj) (that's) great! — qué bien!, fenomenal!, bárbaro! (fam), estupendo! (fam)


    II
    noun ( outstanding person) (colloq) estrella f, grande mf

    III
    adverb (esp AmE colloq) fenomenal (fam)
    [ɡreɪt]
    1. ADJ
    (compar greater) (superl greatest)
    1) (=huge) (in size) [house, room, object] enorme, inmenso; (in amount, number) [effort, variety] grande; [shock, surprise] verdadero, enorme

    she lived to a great agevivió hasta una edad muy avanzada

    I'll take great care of it — lo cuidaré mucho

    he didn't say a great dealno dijo mucho

    a great deal of time/money/effort — mucho tiempo/dinero/esfuerzo

    with great difficultycon gran or mucha dificultad

    to a great extenten gran parte

    we had great funlo pasamos fenomenal

    great heavens! ¡Cielo Santo! , ¡Válgame el cielo!

    to be a great helpser de gran ayuda

    well, you've been a great help! — iro ¡vaya ayuda la tuya!, ¡pues sí que has sido una ayuda!

    I'm in no great hurry, I'm not in any great hurryno tengo mucha prisa

    you great idiot! * — ¡pedazo de idiota! *

    a great many people believe he was right — mucha gente cree que tenía razón

    it was a great pity you didn't come — fue una verdadera pena que no vinieses

    with great pleasurecon gran placer

    it's my great pleasure to introduce... — es un gran placer para mí presentar a...

    great progress has been made — se han hecho grandes progresos

    great Scott! ¡Cielo Santo! , ¡Válgame el cielo!

    the concert was a great successel concierto fue un enorme éxito

    gun 1., 1)
    2) (=important) [achievement, occasion, event] grande

    the great cultural achievements of the past — los grandes logros culturales del pasado

    one of the great issues of the day — uno de los temas más importantes del día

    everyone said she was destined for great thingstodos decían que llegaría lejos

    great work(=masterpiece) obra f maestra

    3) (=outstanding) [person, nation, skill] grande

    a player of great abilityun jugador de gran habilidad

    she has a great eye for detail — tiene muy buen ojo para los detalles

    Frederick/Peter the Great — Federico/Pedro el Grande

    5) (=real) (as intensifier) grande

    she is a great believer in hard work — es una gran partidaria del trabajo duro

    she's a great one for antique shops — le encantan las tiendas de antigüedades, es una fanática de las tiendas de antigüedades

    he's a great one for criticizing others — es único para criticar a los demás, se las pinta solo para criticar a los demás *

    6) * (=excellent) [person, thing, idea] estupendo, genial *

    you were great! — ¡estuviste genial! *

    it's a great idea — es una idea estupenda, es una idea genial *

    "how was the movie?" - "it was great!" — -¿que tal fue la película? -¡genial! *

    (that's) great! — ¡eso es estupendo!

    wouldn't it be great to do that? — ¿no sería fabuloso or genial hacer eso?

    camping holidays are great for kids — las vacaciones en un camping son estupendas para los críos, las vacaciones en un camping son geniales para los críos *

    she was just great about it — se lo tomó muy bien

    he's great at football — juega estupendamente al fútbol

    to feel great — sentirse fenómeno or fenomenal *

    you look great! — (=attractive) ¡estás guapísimo!; (=healthy) ¡tienes un aspecto estupendo!

    she's great on jazz — sabe un montón de jazz *

    the great thing is that you don't have to iron it — lo mejor de todo es que no tienes que plancharlo

    7) (Bot, Zool) grande
    2. EXCL
    1) * (=excellent)

    (oh) great! — ¡fenómeno! *, ¡fenomenal!, ¡qué bien!

    2) iro

    (oh) great! that's all I need! — ¡maravilloso! ¡eso es lo que me faltaba!

    if that's what you want to believe, great! — si es eso lo que quieres creer, allá tú

    3.
    ADV
    4.
    N (=person) grande mf

    the great and the goodhum los abonados a las buenas causas

    5.
    CPD

    the Great Barrier Reef N — la Gran Barrera de Coral, el Gran Arrecife Coralino

    the Great Bear N — (Astron) la Osa Mayor

    great tit Nparo m grande, herrerillo m grande

    GREAT, BIG, LARGE
    "Grande" shortened to "gran"
    Gra nde must be shortened to gran before a singular noun of either gender:
    Great Britain (La) Gran Bretaña
    Position of "grande"
    Put gran/ grandes before the noun in the sense of "great":
    It's a great step forward in the search for peace Es un gran paso en la búsqueda de la paz
    He is a (very) great actor Es un gran actor ► In the sense of big or large, the adjective will precede the noun in the context of a general, subjective comment. However, when there is implicit or explicit comparison with other things or people that are physically bigger or smaller, it will follow the noun:
    It's a big problem Es un gran problema
    ... the difference in price between big flats and small ones...... la diferencia de precio entre los pisos grandes y pequeños...
    ... a certain type of large passenger plane...... cierto tipo de avión grande para el transporte de pasajeros... ► Compare the following examples:
    ... a great man...... un gran hombre...
    ... a big man...... un hombre grande... For further uses and examples, see great, big, large
    * * *

    I [greɪt]
    1) (before n)
    a) ( large in size) (sing) gran (delante del n); (pl) grandes (delante del n)
    b) <number/quantity> (sing) gran (delante del n); (pl) grandes (delante del n)

    there's a dirty great hole in my sock — (BrE colloq) tengo un agujerazo en el calcetín (fam)

    2) (before n)
    a) ( important) <landowner/occasion> (sing) gran (delante del n); (pl) grandes (delante del n)
    b) (genuine, real) (before n) <friend/rival> (sing) gran (delante del n); (pl) grandes (delante del n)

    I'm in no great hurry — no tengo mucha prisa, no estoy muy apurado (AmL)

    you're a great help! — (colloq & iro) valiente ayuda la tuya! (iró)

    he's a great one for starting arguments — (colloq) es único para empezar discusiones!, para empezar discusiones es (como) mandado a hacer (CS fam)

    3) ( excellent) (colloq) <goal/movie/meal> sensacional, fabuloso

    he's a really great guyes un tipo or (Esp tb) tío sensacional (fam)

    to be great AT something: she's great at organizing things/getting people together para organizar las cosas/juntar a la gente, no hay nadie como ella; he's great at mending things se da mucha maña para hacer arreglos; (as interj) (that's) great! — qué bien!, fenomenal!, bárbaro! (fam), estupendo! (fam)


    II
    noun ( outstanding person) (colloq) estrella f, grande mf

    III
    adverb (esp AmE colloq) fenomenal (fam)

    English-spanish dictionary > great

  • 19 abrañar

    Abrañar es alinear, arreglar en todas sus vertientes al ganado, no sólo el que se encuentra en las brañas, puertos o morteras, sino también el que permanece en las cortes (cuadras) de la misma aldea. A mediados de la primavera es cuando se empieza a subir el ganado escosu (que no da leche) para los puertos, estas reses suelen por regla general ser magüetas (novillas) de tres años para abajo, unas están dandu la cría (preñadas), otras son manías (que no están preñadas), luego más tarde, hacia la última quincena del mes de mayo, que es cuando ya no se pueden pacer más los préus (prados) porque sino no dan la cosecha de hierba que se recuétche (recoge) en el mes de xuliu (julio) denominado el mes de la yerbe (hierba). Así pues, cuando los prados ya no se pueden pacer, se sube al puerto todo el demás ganado, exceptuando las xunturas (yuntas) que han de acarrear la hierba, estas vacas suelen ser las bétchaes (paridas), o las que están próximas abétchadar (a parir). Es cuando llega entonces el momento de abrañar en los puertos, de ir hacer la braña. Miles de veces y en diferentes lugares de mi Tierrina, allá por los apenados y hambrientos años de la post-guerra, siendo yo un guaxetín (chiquillo), fui abrañar para los varios amos que como criadín por mala o buena fortuna yo he servido. Había que buscar al ganado que guareciendu (pastiando) se encontraba en el extenso y comunal puerto, que muchas veces era muy difícil de dar con él, por causa de la borrina (niebla), que no permitía ver a uno ni la propia mano dellantri de sous güétchus (delante de los ojos). Nos solíamos orientar por el sonido de las chuecas, chocaretas, zumbus o zumbiétchus (cencerros), que llevaban las vacas más responsables y serias por así denominarlo de cada cabana (cabaña), supuesto que estas reses suelen ser las que capitanean a todas las demás. Me recuerdo que los enormes felechales (helechos) y demás matoxus (matorrales) que eran más altos que mi cuerpo, que por doquier poblaban todo el puerto, se encontraban en los días de borrinas baxas (nieblas bajas), ameruxáus d'orbayu (llenos de agua) que me ponían de pingandu (mojado) lo mismo que si vestido me tirase al agua. Pero todo aquello era nada cuando lograba dar con las vacas, que alegraban tan difícil búsqueda, y afalándulas muy contento me dirigía hacia mi cabanón (cabaña) y después de muxilas (ordeñarlas) atizaba un bon fuéu, (prendía un buen fuego) dóu m'enxugaba la moyadura que m'enciétbechar. (Dónde me secaba la mojadura que me ataba). Una vez que estaba bien enxuchu (seco) muy dichoso me enzulaba (comía) la fugaz y sabrosa cena que tan sólo consistía, en un zapicáu de lleiche (un jarro de leche) acompangáu (acompañado) d'un cantexu de borona ou pan d'escanda. (Un trozo de pan de maíz o escanda). Chuéu, despós, endutbechábame nel xergoncín de paya, ya xurniaba toa la nuétche comu 'n anxelín del cielu xebráu de la man del sou Faedor. (Luego, después, encogiéndome en el jergón de paja, dormía toda la noche como un ángel de los cielos apartado de la mano del Hacedor). Hay vaqueirus que xuben (suben) todos los días por la mañana y de tarde hasta el puerto a hacer la braña, los que tienen corte (cuadra) en la braña, meten sus vacas dentro para ordeñarlas con tranquilidad, pero aquellos que no poseen cabanu (cuadra) tienen que buscar ordeñar al entestate (al aire libre). Casi todos los vaqueirus que tienen que catar (ordeñar) sus vacas al entestate, suelen llevar alguna couxa (cosa) de la aldea para que las vacas la coman y estén así quietas mientras las afoixinan (ordeñan), esto se llama el manoxu (manojo) que es según la época del año de diferente manera. Así en el mes de Xuniu ya xuliu ye de segáu, (junio y julio es de pación), en agosto, setiembre y octubre el manuxín (manojín) suele ser de las fuéas ya pereícoteirus de lus ñarbaxus, (plantas de maíz) y también de focháus de frisou (también de ramas de fresno), que les gusta mucho a las vacas y son muy sanas y nutritivas, así como también muy peligrosas para sous ventrones ya rumiaxes (vientres y rumiajes) si las comen demasiado calientes. Otros vaqueirus llevan sal que bazcuchan d'enría 'l campíz (vierten encima del campo) y como a las vacas les agrada todo lo sallado, comencipien a chamber (empiezan a lamer) en tal lugar hasta que terminan con todo el campizo dando tiempo a que el vaqueiru la ordeñe con toda tranquilidad. También existen otros más ingeniosos que arrebaten les ganes de mexar fasta la gora de afoixinar (que aguantan las ganas de mear hasta la hora de ordeñar) y así después meando en el campizo mientras que la vaca pace y lame el lugar meado ellos con rapidez la ordeñan. Otros vaquierus sólo hacen la braña una vez cada veinticuatro horas, bien porque sus vacas tengan poca leche, o porque les interese escosalas (secarlas) para así tan sólo subir al puerto una vez cada semana a verlas. Y hay otros vaqueirus que duermen y moran en sus cabañas de las brañas y tan sólo bajan a sus aldeas una vez a la semana. Existe la creencia entre las gentes de mi Tierra no documentadas en las ancestrales y hermosas costumbres de nuestras embrujadoras aldeas, creencia divulgada por escritores que no saben dónde tiene, pongo como ejemplo el caldar la vaca (ubre), de que en Asturias no hay más vaqueirus que los de la Alzada y no recuerdo en estos momentos qué otro lugar. Mas yo les digo ahora que esos babayus de despacho que se reúnen en cabanáes (rebaños) formando las infantiles y ridículas sociedades de «Amigos del Bable» o del «Conceyu del Bable», etc., etc., que lo único que saben es buscar una popularidad ya muxiyes la corexa a les ñobles xentes de miou Tierrina (y ordeñarles la cartera a las nobles gentes de mi Tierra). Digo que estas respetables personas lo único que saben de la Llingua y costumbres ancestrales de mi Asturias. es lo que plagian en los archivos, en los escritos de otros escritores ya fenecidos que la mayor parte de ellos tampoco en estas materias no tenían namái qu'una migayina (nada más que una migaja) de idea. Y ahora que ya para la posteridad dejo dicho lo que son estas rencuayas (ruinas) sociedades, compuestas por profesores y otras ilustres personas, que de no ganar la Guerra Civil el General Franco, de seguro que estarían de peones camineros, porque francamente creo que para otro menester ellos no sirven. Todos estos señores con sus teorías y conferencias mistificadas, no saben cómo habla el pueblo, ni como trabaja, ni cómo sufre y ríe, ni como canta y llora, las costumbres y el habla del sencillo, simple y natural pueblo, sólo se aprenden formando parte de ese pueblo que s’acueye 'l llabiegu, falandu la Llingua de nuexus mayores (se coge al arado hablando la lengua de nuestros mayores, todos los días del año). Yo no podré competir jamás, ni tan siquiera lo intento, en los saberes de todos estos señores licenciados y profesores de los números y las letras, porque por mala o buena fortuna los maestros que yo he tenido, no me enseñaron las sapiencias de tan hermosas profesiones, ya que ellos casi todos analfabetos por naturaleza en la dimensión de los signos, de los números y letras, en vez de poner entre mis manos un libro, me punxerun cuaxi disde miou ñacencia, una ferramienta paque trabayandu me ganara 'l potaxe que la probina de miou má non podía dame. (Me pusieron casi desde mi nacencia, una herramienta para que trabajando me ganara el potaje que la pobre de mi madre no podía darme). Así por ejemplo, el mejor profesor que yo he tenido ha sido mi amo Salustiano, un vaqueiru de la aldea de Folgueras, xustu ya ñoble 'n tal fondura (justo y noble en tal hondura), filósofo e inteligente en tal altura, que no se desliza un día por mi vida, que en algún momento con nostálgico cariño yo no le recuerde. El no sólo me enseñó a llabrar, semar ya cuchar la tierra (arar, sembrar y abonar la tierra), sino que tamién m'adeprendióu faer d'un piazu de maera, de ñocéu, de frisnu ou faya, con mious propies manus el mesmu llabiegu. (También me enseñó a hacer de un trozo de madera de nogal, de fresno o de haya, con mis propias manos el mismo arado). M'adeprendióu d'enría lus fierrus a cabruñar sen cartiar el gadañu, (me enseñó encima del yunque con el martillo a adelgazar la guadaña sin ondularla ni estropearla). M'adeprendióu a domeñar les magüetes pa xuniyes al xugu ya faeyes trabayar sen dalgún rexabiu a entrambes manus. (Me enseñó a domar las novillas para uncirlas al yugo y hacerles trabajar sin ningún resabio a las dos manos). Me enseñó a curar los ganados cuando enfermaban d'angún amoláu (de algún mal), como la coxera ou maluca (cojera), los garbious ou rumiayu, (mal en la boca y rumiaje) bregonazus y'entelaures (hinchazones en el ubre y el vientre) y a darle la vuelta a un xatu dientru 'l ventrón d'una vaca qu’tal parilu traxéralu 'l revés, couxa que güéi nel día non sapien faer abondus bretinarius. (A un jato dentro del vientre de una vaca que al parirlo lo trajese al revés, cosa que hoy día no saben hacerlo muchos veterinarios). M'adeprendióu a inxertar lus pomares, zreizus ya peréus, (me enseñó a injertar los manzanos, los cerezos y perales), a fradar lus ciarrus pa que non dieren soma nus préus ya muxéranye 'l campíz el allumbrar mexor yerbe (a cortar los matorrales que cercaban los prados, para que no diesen sombra y le permitiesen al campo alumbrar mejor hierba). Me enseñó sin libros de ninguna clase a querer y respetar todas las criaturas vivientes, a no hacerlas sufrir ni esclavizarlas nunca, a servirme de ellas nada más que cuando la necesidad me obligase. Tamién me falaba, qu'en d'anguna teixá pudiés morar animal d'angún qu’en trabayu non lleldare. (También me decía que en ninguna casa debía de vivir animal alguno que un trabajo no efectuase). Me enseñó a ser libre y honrado, a querer y respetar a mis mayores, a no ser hipócrita ni servil, a no apartarme de la Natural Justicia hasta la muerte, y a no preocuparme mucho de las vanas leyes aunque en ocasiones injustamente las condenadas me castigasen. Me contó cientos de historias, leyendas y cuentos, me enseñó a pensar y filosofear con las cosas naturales, y todas estas maravillosas cosas yo las he aprendido, pensando y hablando en la embrujadora y galana Llingua Asturiana, por lo tanto yo conozco perfectísimamente el Idioma de mi Querida Llingua Asturiana, con el cual yo cuento a mis gentes astures cosas sencillas y naturales, de la misma manera que las he aprendido de boca de maestros analfabetos como mi querido amo Salustiano, el mejor vaqueiru que yo he conocido, el natural y sencillo filósofo que a mí sin libros, más me ha enseñado. Mi amo Salustiano, siempre se sintió muy orgulloso y ufano de sus vacas, a las que el y yo, cuidábamos en todo momento con verdadero celo y alegría, sin lugar a dudas, eran nuestras vacas las mejores de todo Asturias, y así lo reconocían todos los vaqueirus que medianamente entendían de ganado. Daba verdadero placer y envidia, mirar aquellas vacas gordas y lustrosas, todas ellas de la más pura raza asturiana. La corte (cuadra) de Salustiano estaba axeíta un poco allonxá (alejada) de la aldea, en la cimeirá (lo alto) de un praiquín (prado pequeño) que tenía m'apoxentáu (allanado), al lláu d'una fontona (al lado de una fuente) que tenía buenas aguas para abrevar el ganado. Yera una corte grandie, conun payarón que faía un par d'uce es de corcecáus de yerba. (Era una cuadra grande, con un pajar que hacía un par de docenas de rastros de hierba), y la cuadra era amplia y bien ventilada, óu s'arretrigaben nes fortes pexebréires (dónde se amarraban en las fuertes pesebreras), las diez soberbias vacas que en la sazón tenía mi amo Salustiano. Pero una noche fatídica nus fondeiráus de Ia xeronda (en los últimos días del otoño), d'aquién n'aquétcha nuétche del diañu, llantói fuéu 'l pachar, morriendu amagostáes toes les llozanes vaques del guenu de Xallustianu. (Alguien en aquella noche de los demonios, le prendió fuego al pajar, muriéndose asadas todas las lozanas vacas del bueno de Salustiano). Y aunque las autoridades del concejo hicieron todas las investigaciones precisas, nadie pudo descubrir jamás el autor o autores de tan monstruosa felonía. Algunos decían, que había sido un mal querer. Otros afirmaban que tal vez fuese un probe de lus munchus qu’apedigueñaben pe les aldés nus famientus tempus d'endenantes (un pobre de los muchos que pedían por las aldeas en los hambrientos tiempos de antes). Seguramente que el mendigo entraría sin ser visto per el boicairón del payar que nun tenía piesllítchu (por el ventanal del pajar que no tenía cerradura), con el ánimo de pasar la noche, y una vez achucáu ente la greba yerbe (acostado entre la seca hierba), diérale por fumar prendiendo fuego sin querer al pajar, y despós ameruxáu pel miéu fuyere. (Después lleno de miedo huyere). Lo ciertamente sucedido fue, que desde aquel trágico día, el alegre y dicharachero vaqueiru Salustiano, ya no cantó más, ni rió jamás, pues poco a poco una profunda tristeza le fue consumiendo, y meses más tarde se moría de pena, por estar pensando sin interrupción en el gran sufrimiento e inenarrable dolor sufrido por sus queridas vacas, dentro de aquel enorme incendio, que poco a poco las carbonizó, sin que nadie pudiese hacer por ellas nada. Así de humano, sencillo y natural, era mi amo Salustiano, el grande hombre, el excepcional pensador y filósofo analfabeto, el mejor vaqueiru de toda mi Tierrina, ya que muy posible fuese el único que en todo el Universo, que por el amor de sus vacas muertas en tan avernoso sufrimiento, que hizo crecer en só'anxelical ya melgueiru (su angelical y dulce) pensamiento una pena tan amamplenada (grande, enorme) que fasta'l mesmu fuexu del sou morrer tal atristeyáu l'afaluchóu. (Que hasta el mismo hoyo de su morir, tal entristecimiento lo arreó).

    Primer Diccionario Enciclopédicu de la Llingua Asturiana > abrañar

  • 20 apaigüestias

    Apaigüestias, son apariciones, alucinaciones, esta palabra encierra un sugestivo campo de creencias en fantasmas, o ánimas condenadas y también encierra las creencias mitológicas, con todas sus historias y leyendas descabelladas o quizás ciertas, pues este mundo nuestro no se hizo de la Nada, y desde el más sabio de los humanos hasta el más ignorante, llevamos muy dentro de nuestra alma o espíritu, una lejana o cercana creencia en algo que existe «Sobrenatural», que tras la muerte nos ha de premiar o castigar, con firme exactitud en todas nuestras obras buenas y malas que hemos hecho. Ahora les contaré una historia, o leyenda, que sucedió en una de mis aldeas hace ya muchos, muchísimos años, y que yo he escuchado cuando era pequeño, de lengua de una tía abuela mía, que en aquel acaecer con más de cien años de existencia encima de su cuerpo, aún tenía arreos para trabajar en sus tierras como cualquier persona que bien lo hiciere. «MARÍA LA XANTINA» Casárase María la hija del tío Jacinto, muchacha pequeña de estatura, pero grande de hermosura y de exquisitos sentimientos, con Amalio el del Aldexuxán (Aldea de Susana), joven que no tenía de bueno nada más que el ser un mozarrón como un carbayu (roble) y ser su padre el más rico y poderoso vaqueiru de todos aquellos contornos. Tal caxoriu (casorio) fue amañucáu (preparado), por Rexina la Porricona (Regina la Desnuda), que recibiera del padre del novio por haber hecho tal arreglo, un xaretal d'ablanus (pequeño prado muy cuesto plantado de avellanos). Diremos para comprender mejor esta historia, que la Porricona, era una mujer que gozaba de grande fama en toda aquella rica comarca, porque era la esposa de Lláurianu 'l Llóndrigu (Laureano la Nutria), porque era éste un hábil cazador de estos finos animales de ricas pieles, que de aquella infestaban los regueirus (torrentes) de todas las montañas y el río que cruzaba el fértil valle. También era el Llóndrigu un experto en curar todos los males que tuviesen las personas y animales, por tal razón aquel matrimonio, al decir de muchos vecinos, era una verdadera bendición del mismo cielo, cosa que aprovechaba la Porricona, p'esquicionar al sou antoxu nus tibeirus quei dexaben fatáus de bétchaes ganancies. (Para hacer cuanto se le antojase con sus arreglos, negocios, líos, etc., que le dejaban siempre muchas y ricas ganancias). La aldea de Aldexuxán estaba compuesta por poco más de una docena de vecinos, que todos ellos eran familiares entre si. No voy a detenerme a narrar los diferentes pormenores de la historia como me fueron contados a mí, simplemente me ceñiré a un hecho concreto, relacionado con la mitología o apaigüestias fantasmales o milagrosas, ancestrales creencias, de las melgueras gentes de mi embrujadora Tierrina. Sobre la aldea de Aldexuxán había pesado desde siempre un fatídico malificio, haciendo que sus gentes siendo las más ricas de la fértil comarca, no fuesen tan felices como todos los demás eran, porque jamás en toda su historia había nacido una mujer en ella. Las mujeres que se casaban con los hombres de la aldea de Aldexuxán, se condenaban a no poder tener jamás una hija, y por todo lo contrario, alumbraban varones fuertes y sanos, que se convertían cuando llegaban a la mocedad, en los mozos más esbeltos y fornidos de toda la comarca. Pero a pesar de ser tan buenos mozos, y todos ellos vaqueirus ricos, gozaban de muy escasas simpatías entre las mozas casaderas, por tal razón, muchos no lograban casarse, y cuando alguno lo hacía, casi siempre mediaba un «arreglo» de por medio. —Así, el padre de Amalio se puso al habla con la Porricona, para que arreglase la boda de su hijo con Mariela, muchacha virginal y encantadora, de la que estaba enamorado ciegamente su hijo. Prometiéndole a la Porricona si lo conseguía, que él le daría como favor, el xaretal de Riuscuru, (pradín de Río Oscuro), que lindaba con otra finca que ella tenía. Cuando Mariela supo por sus padres, que estaba destinada para ser la mujer de Amalio el de Aldexuxan, una grande tristeza se adueñó de su alma, que le robó su alegría, y las francas y felices sonrisas que en todo instante su espíritu alumbraba. Y así de apenada todos los días se le veía por su aldea, con sus hermosos ojos siempre enrojecidos por la quemante caricia de sus lágrimas, sin encontrar el consuelo que le devolviese aquella felicidad que antes gozara. Gran devota de la Virgen de la aldea habla sido siempre Mariela, con la que con una fe desmedida siempre oracionaba y hablaba, y así de esta manera, entre profundos y dolorosos suspiros, y lágrimas torrenciales que manaban de su desespero, el día antes de su boda, con la Santina de su aldea así dialogaba: —Virxencina melgueira, qu'achorandu 'l tou cháu venu, ameruxá d'un dollor que m'esfáe pel tristeyáu miou alma, mamplená d'un miéu que d'afechu, encuandiona toa l'allegría qu'endenantes en miou espíritu per uquier afroriaba. (Virgencita dulce y preciosa, que llorando a tu lado vengo, plagada de un dolor que me deshace por triste toda mi alma, rebosante de un miedo que en toda su extensión entierra la alegría que antes en mi espíritu por donde quiera afloraba). —Xantina 'l miou alma, que tous lus amalexius encantexas, nun me faigas xufrire, pos nun queru caxame sen amore per fuercia, you nun queru isi muzu que de güenu nun peca, y'endenantes de dir xuntua d'él a l’ilexa, más quixera morreme, aforcá conun rixu que m'añuede 'l gaznatu ya me faiga en morrida. Ya tal couxa fairéla, Xantiquina 'l miou alma, se deximesme agora, ya me dexes solina, nel atayu miou pena, qu'en llocura m'entrema. (Santiquina de mi alma, que todos los males si tu quieres arreglas, no me hagas sufrir, pues no quiero casarme sin amor y por fuerza, yo no quiero ese mozo que de bueno no peca, y antes de ir junto de él a la iglesia, más quisiera morirme, ahorcada con una cuerda, que me anude mi cuello, y me haga en ser muerta. Y tal cosa he de hacer, Santiquina mi alma, si me olvidas ahora, y me dejas muy sola, en el atajo de mi pena, que a la locura me lleva). Algo muy hermoso le contestaría la Virgen a Mariela, porque otra vez se le volvió a ver llena de sana y feliz alegría, quizás con más fuerza que jamás tuviera. Y así de contenta, cariñosa y feliz, ante la misma Santina que su pena esfixera (deshiciera), al siguiente día en la iglesia se casaba con el vaqueiru Amalio. El día de su boda, fue un domingo del mes de mayo, bañado por la luz del sol que todo lo alumbraba y lo erradiaba de vida, y como era domingo, era fiesta en la aldea, el jilguero cantaba y el malvís silbiotaba y las gentes humildes con paxiétchus de festa (trajes de fiesta), a la boda acudían de la dulce Mariela, la más hermosa moza que la aldea tenía. La que viétchus ya xóvenes (viejos y jóvenes), grande y puro cariño hacia ella sentían. Cuando todos estaban fundidos en sus rezos y el buen cura casaba a la virgen Mariela, se escuchó como un trueno, muy cercano y enorme, muy profundo y tenebroso, que hizo palidecer de miedo a muchas gentes del festejo. ¡Un castigo del cielo, murmuraban las viejas, ha de mandarnos Dios, por casar a esta santa, con un fíu (hijo) de la aldea en poder del demonio! Aquel confuso ruido que a las gentes atemorizara, por ser dadas a irse a los Lares Divinos, no era tal trueno que en el aire quedara sin dejar un vestigio, pues había sido un castigo, y todos sobrecogidos pensaron, que el Hacedor andaba en aquel cataclismo. Pues el xaretal d'ablanus (el prado de avellanos) que el padre de Amalio le regalara a la Porrica, por conseguir a Mariela como mujer de su hijo, argaxárase per tous lus cháus, escuatramundiánduxe 'n fondigouxes cuandies, dou s'allacaben lus ablanus esgazáus d'afechu, con lus raigones amirandu 'l cielu, lu mesmu que se dangún terremetu, bramara nel ventrón d'aquel xareteiru, dexándulu tan llabráu y'esfechu, comu 'n güertiquín de pataques que fora afocicáu per una cabaná de goches paridiegues. (Partiérase, corriérase por todos sus lados, deshaciéndose el prado entero en profundas ollas, donde se enterraban los avellanos del todo rotos, con sus retorcidas raíces mirando al cielo, lo mismo que si un terremoto hiciera explosión en el vientre de aquel prado, dejándole tan despedazado, como un pequeño huerto de sembradas patatas, que hubiese sido hocicado por una manada de cerdas paridas). Sin embargo, tan insólito acontecimiento pasados los primeros momentos, no restó a la fiesta la sana alegría, que todos disfrutaban en la boda de la querida Mariela, pues tras de fartase tous fasta 'l rutiar de lus bunus manxares qu'achindi per uquier topábenxe, (pues tras de hartarse todos hasta dejarlo de sobra, de los buenos manjares que allí por todas partes había), se enguedechóu 'l baítche qu'en toes les bodes les xentes encalducaben (se enredó el baile que en todas las bodas las gentes hacían), fechu per la múxica xaraneira y'allegre del pandeiru ya la gaita, e axín tóus enlloquecíus de gouzu danciarun entexuntus ya hermenáus fasta 'l mesmu albiare, xeitu nel qu'entamangarun folixouxa engarradiétcha de galgazus, ente dus mozacus del chugar de Mariela, ya lus rapazones de l'aldeina d'Aldexuxan. (Hecho por la música jaranera y alegre de la pandereta y la gaita, y así todos enloquecidos de gozo, bailaron entrejuntos y hermanados hasta que llegó el amanecer, lugar que prepararon una sonada pelea de estacazos, entre los mozos de la aldea de Mariela, y los mozarrones de la aldeina de Susana). Tal pelea fue originada por los desmedidos insultos despreciativos dirigidos a los mozos de Aldexuxan, por los de la aldea de Mariela, asegurándoles que no llevarían a la santina Mariela a vivir con ellos a su aldea maldita, donde jamás había nacido ni una sola mujer, por la causa de ser todos hijos del mismo diablo. Tras de la feroz pelea, donde no sucedieron achuquinamientos (muertes) por mor de las sabias intervenciones de los ancianos de entrambas aldeas, el novio, sulfurado y ensangrentado por la titánica lucha desarrollada, en aquel mismo amanecer acompañado de todos sus parientes, se llevó a Mariela que no hizo ni la mínima negativa, y no permitió que recibiese de sus padres ni el valor de una cuyar (cuchara) de cuanto a ella le perteneciese. —Acuétchula d'un reflundión el magotón d'Amaliu a la felliz ya xonriyente Mariela, ya namái conel paxiétchu puestu, escarranquetóula d'enría la xiétcha pintureira del sou cabatchu, ya despós, conun blincu de corzu puenxuse el tres d'echa, ya cudiáu per tous sous vecinus que yeren tous parentela, xebrárunse d'aquel chugar, esnalandu nel aire ixuxus d'allegría, axenitáus nus sous cabatchus axalbaxáus lu mesmu qu' echus ya lleldáus dientru d'una ñatural ya roxurosa allegría. (Asió de un rápido tirón el bruto de Amalio a la feliz y sonriente Mariela, y nada más que con la ropa que llevaba puesta, la ajinetó encima de la pinturera silla de su caballo, y después, con un salto de corzo púsose él detrás de ella, y escoltado por sus vecinos que eran todos parentela, se marchó de aquel lugar lanzando al viento ijujús de alegría, ajinetados todos en sus caballos asalvajados lo mismo que ellos eran, y crecidos dentro de una natural y enloquecedora alegría). La cariñosa bondad, y la fértil felicidad y alegría que en todo momento emanaba torrencialmente de la encantadora Mariela, muy pronto cautivó y contagió a todas las gentes del Aldexuxan, pequenos y grandes, con tal frenesí llegaron a quererla, a adorarla y mimarla, lo mismo que si se tratara de un ser sobrenatural, que había llegado a la aldea para alegrarles a todos sus vidas. Durante el tiempo de su preñez, era Mariela atendida en todo momento por las mujeres de la aldea, y los hombres y los niños, estaban más pendientes de ella, que de sus trabajos y sus juegos, siempre le traían del campo flores y variedad de frutos, y todos al mirarse en sus encantadores ojos, la felicidad y el gozo en sus espíritus advertían. Era Mariela para todos, algo que ni tan siquiera habían soñado que existiera. Al Aldexuxan habían llegado de sus aldeas todas las mujeres que la cuidaban y mimaban y ninguna de ellas jamás había sido feliz ni encontrado la alegría en su espíritu en aquel lugar al que muy pocas de ellas habían llegado por su propia voluntad. Sin embargo al mirarse en los resplandecientes ojos de Mariela, al sentir el hado misterioso que en todo instante rezumía de su ser, llegaba a sus entrañas por primera vez raudales de gozo y alegría, que las llenaba de felicidad, y de una dicha embriagadora y sublime. Por eso entre ellas silenciosa y secretamente empezaban a decir que Mariela era divina, misteriosa y buena, y que en cualquier momento el cielo la llevaría, y dejaría a la aldea tan llena de tristeza y pena como antes lo estuviera. —Xabela la muyer d'Antón el Curuxu, que yera la que mexor amañaba lus dellicáus fatiquinus pa lus guaxinus cabantes de ñacer, ya le fixera tous lus paxiétchinus y'escarpinacus que ñecexitare 'l melgueiru nenin que traxera 'l mundiu cundu betchara la xantina Mariela. (Isabel la esposa de Antón el Buho que era la que mejor hacía los delicados ropajes propios para los niños recién nacidos, ya había industriado todos los trajecitos, calzas y demás vestiduras, que necesitase el dulce niño que trajese al mundo cuando hiciese su alumbramiento la santina de Mariela). —Tamién Xacintu 'l Utre que yera abondu curioxu pa carpinteirar, fixera 'n trubiétchu con maera de ñocéu, qu'al falar de toes les xentes d'Aldexuxan, nin el más empericotáu de tous lus nenus ñacíus ya cuaxi, cuaxi 'n per ñacere, xamás de lus xamaxes oitre mexor nun hubiés d'aquién lu fixera. (También Jacinto el Aguila que era muy mañoso para hacer de carpintero, hiciera una cuna de madera de nogal, que al hablar de todas las gentes del Aldexuxan, ni el más afamado, ni suertudo niño nacido, ni casi, casi de los aún no nacidos, jamás de los jamases otra mejor no hubiese quién se la hiciera). Todo estaba preparado para el día que el angelín a la luz amaneciera, y todos en la aldea, desde su madre hasta el más inocente de los pequeños que por aquellos montes correteare, esperaban ilusionados la venida de aquel inocente ser, fruto de las entrañas de quien les había a todos sembrado en sus espíritus la dicha y la alegría, hasta ya le habían elegido los padrinos y hasta el mismo nombre que debía llevar, el asunto era que naciese dentro del tiempo natural, y que no le trajese ningún amolexíu (mal) a la santina Mariela. Como todo en la vida tiene su tiempo de espera, y todo cuanto se espera si atañe a los procesos naturales llega, así vino el momento del alumbramiento de Mariela. Fue una mañana de los principios de la primavera, cuando todos los árboles y las plantas despertaban jubilosos y en silencio a la floreciente vida donde comenzaban, los malvises y jilgueros volvían a cantar alegres y bulliciosos, tras la mudez que les infligiera el frío y nevado invierno, fue aquella luminosa y primaveral mañana cuando todas las gentes de la aldea, se reunían contentas y felices a la par que en sus interiores algo preocupadas y temerosas, como si presintieran que algo irremediable le habría de ocurrir a la santina Mariela. Digo que todos reunidos en la casa de Mariela, anhelantes esperaban tan natural y querido acontecer. Algunas mujeres llenas de firmes creencias, rezaban sin descanso, pidiéndole al Faidor (Hacedor) y a sus santos más allegados, que la feliz nueva se alumbrara por los cauces naturales, y que Mariela no cosechara arduos sufrimientos. Otras más mañosas en tales menesteres, parteaban ilusionadas y eficientes, en cuantos cometidos quce en tal proceso se requieren. Al fin, de las entrañas de la parturienta, brotó la vida, y todas las gentes al presenciar aquella recién nacida criatura, doblaron sus rodillas en el suelo, y una oración de gracia en el cielo pusieron, dentro de la gran dicha y alegría que jamás sintieron. Porque por primera vez en toda la historia de la aldea del Aldexuxan, había nacido una niña, una hermosa niña que rompía con su divino milagro, el maléfico castigo que les había acompañado siempre. Tal milagroso acontecer, alborozó a los vecinos del Aldexuxan en tal altura, que por unos instantes se olvidaron de la moribunda Mariela, y cuando al fin Isabela enloquecida por la alegría que le hacía caminar por el incansable sendero de la dicha, digo que Isabela se dirigió respetuosa y venerativamente hacia Mariela, y besándola con gran cariño en su frente radiante de felicidad le decía, que el maleficio que pesaba sobre las gentes de la aldea, de no haber tenido jamás una mujer, una niña, ella porque era una santina, lo había roto al alumbrar aquella preciosa criatura, que era para todos los seres del Aldexuxan el fin del conxuru (conjuro) que desde siempre sobre todos pesaba. La moribunda Mariela, con su sonrisa encantadora siempre pendiente de sus labios, y una luz misteriosa y hechicera que en todo momento de sus bellos ojos se desprendía, les hizo comprender a los allí reunidos, que eran todas las gentes del Aldexuxan, que era Mariela algo que pertenecía a la divinidad de lo desconocido, y que no podría morar entre ellos, nada más que con su espíritu. Así silenciosamente Mariela, a todos miraba cariñosamente y todos se sentían bajo su embrujante y acariciante mirada, protegidos de cuantos males en la Tierra hubiese, y navegantes en una dicha que ni en sueños la esperaban. Llué Mariela con sou melgueira fala, que yera múxica de lus mesmus ánxeles, a tóus les dixu 'ndenantes de que del sou curpu xebrárase la vida: (Luego Mariela con su dulce palabra, que era la música de los mismos ángeles, a todos les dijo antes de que de su cuerpo se marchase la vida): ¡Disde güéi, toes les múcheres d'ista embruxadora aldina, parirán nenus ya nenes. Lu mesmu que faen les femes de tou 'l mundiu, y'enxamás naide mirará a lus vuexus homes, comu fasta gora toes les xentes lus fixeron, nun vus ruegu namái, nistus postreirus xeñaldares de la miou vida, que nun catéis caxorius amañáus pa lus vuexus fíus, dexái qu' echus atopen ya curién lus sous cortexus qu’en xcitu 'l sou querer mexor lus falague. Pos nun ye nagua bonu arretrigar la xuventú 'l cubiciu antoxadizu qu'entamanguen lus sous páes. Pos abondu felliz ya rica ye la xente probe, que rucandu de borona un cantezu, ou 'n tortu fechu d'enría 'l llare, son dichóuxus ya fellices fasta que de viétchus muerran. Ya munchu probe y'esgraciaína ye l'oitra xente, qu'amamplén tién de tóu lu que ñecexita, y'enfelliz ye, perque nun puén disfrutayu, con amore ya bone compañe. (Desde hoy, todas las mujeres de esta embrujadora aldeina, parirán niños y niñas, lo mismo que hacen todas las hembras del mundo entero, y jamás nadie mirará a vuestros hombres con el desprecio que hasta ahora todas las gentes les hicieron. No os ruego nada más, en estos postreros respirares de mi vida, que no busquéis casorios preparados para vuestros hijos, dejazlos que ellos busquen y cuiden sus amores en el lugar que su querer mejor los halague. Pues no es nada bueno, amarrar la juventud, a la codicia antojadiza que hacen sus padres. Pues muy felices y ricas son las gentes pobres, que comiendo un mendrugo de pan duro, o una torta cocida encima del lar, son dichosos y felices hasta que de viejos se mueren. Y muy pobres y desgraciadas son las otras gentes, que poseen todo cuanto necesitan, e infelices son, al no poder disfrutarlo, con la paz del amor y la buena compañía). Así fue como se despidió la melguera Mariela, antes de entregar su sublime alma, al Infinito poder de la Divinidad invisible, dejando a su cuerpo muerto llorado con gran pena, por aquellas sencillas, naturales y nobles gentes de la aldea del Aldexuxan, que harían de ella al correr del tiempo, la Santina Mariela. Yo no puedo afirmar si esta narración es una historia, una leyenda o quizás un mito, sólo se decir, que mi tía abuela aseguraba cuando me la contó, que era tan cierto como que ella se tenía que murrer (morir). También recuerdo cuando yo era un guaxiquín (muy pequeño), haber escuchado decir a las más viejas de estas aldeas, aconxexandu (aconsejando) a las mujeres que teniendo varios hijos varones, ellas querían tener una niña y no lograban alcanzar tal deseo. Digo que las ancianas les aconsejaban así: —Lo que tenéis que hacer si queréis tener una niña, es rezarle todos los días con buena fe a la Santina Mariela, ya veréis como el primer hijo que tengáis sin ninguna duda ha de ser una hermosa niña.

    Primer Diccionario Enciclopédicu de la Llingua Asturiana > apaigüestias

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